Resumen Latinoamericano, 19 agosto 2020.
El movimiento hace un llamado de apoyo a todas las luchas de las familias que resisten a los desalojos.
El Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra hace público su apoyo a todas las luchas de los trabajadores y trabajadoras de las ciudades por una vivienda digna, agua y derechos.
El 14 de agosto, las casas de las familias acampadas y una escuela fueron demolidas por la Policía Militar, luego de una orden de desalojo ilegal en el Campamento Quilombo Campo Grande, en Campo do Meio, Minas Gerais.
Este día estará marcado como un día triste en nuestra historia por tanta atrocidad, pero también como una victoria de la unidad, representada en las 56 horas de resistencia. El gobernador Zema ha puesto en riesgo la vida de la población de Minas Gerais al promover tal acción en medio de la pandemia de COVID-19 y al negar los derechos fundamentales de las familias.
No estamos a favor de promover aglomeraciones y nos hemos esforzado por mantener los protocolos recomendados por los organismos internacionales de salud. Sin embargo, ante las violaciones, nos vemos obligados a reaccionar y resistir. Destacamos nuestra preocupación por la salud de la clase trabajadora. Es deber del Estado garantizar las condiciones para superar este momento, sin embargo, el gobierno de Zema fue el que menos invirtió en la salud y prevención del virus.
Por tanto, existe una urgente necesidad de que la unidad de la clase trabajadora, construida de forma madura y colectiva, se materialice y allane el camino para derrotar al neofascismo de los gobiernos actuales y defender nuestros territorios ante las amenazas de desalojo, la quita de derechos y de la frágil democracia brasileña.
¡Todo el apoyo a las luchas sociales!
¡No aceptaremos ningún desalojo!
Fuente: mst.org.br