Hoy, 5 de septiembre, se cumple un año de que la organización ETA anunciara el cese de las acciones armadas ofensivas. A esa iniciativa le han seguido el alto el fuego general, permanente y abierto a su verificación anunciado en enero y la posterior cancelación del denominado impuesto revolucionario. Del mismo modo, en sus recientes declaraciones públicas ETA ha mostrado su voluntad para abrir un proceso que lleve a la superación definitiva de la confrontación armada. Pasos y compromisos adoptados por ETA que han permitido apuntalar un escenario abierto por la iniciativa política de la Izquierda Abertzale a través de la resolución Zutik Euskal Herria. Zutik Euskal Herria fue el fruto de un intenso, profundo y masivo debate en el seno de la Izquierda Abertzale, tras el cual toda la Izquierda Abertzale adopto una postura clara e inequívoca: la estrategia independentista solo puede desarrollarse por vías políticas y democráticas. Las iniciativas emprendidas y compromisos adoptados por la Izquierda Abertzale en estos dos últimos años han permitido construir un nuevo escenario político en el país, escenario reforzado por la respuesta positiva dada por ETA a los requerimientos realizados por la Declaración de Bruselas y el Acuerdo de Gernika. Un escenario en el que se han generado condiciones suficientes para encarar un proceso de soluciones definitivas y democráticas al histórico conflicto político. Esa es la realidad objetiva y esa es la percepción social mayoritaria. La sociedad vasca es plenamente consciente de ello, del mismo modo de que es plenamente consciente de la actitud que ha adoptado el Gobierno español en todo este tiempo. No ha dado ni un solo paso en la dirección constructiva que se le pedía en las declaraciones de Bruselas y Gernika, sino todo lo contrario, ha intentando condicionar la apuesta política de la Izquierda Abertzale con ilegalizaciones, detenciones y torturas. Sin embargo, y pese a la actitud inmovilista y de bloqueo de Madrid, se han generado condiciones suficientes para avanzar de forma irreversible en el proceso de soluciones definitivas, tanto en el ámbito de las consecuencias del conflicto como en el proceso de dialogo político multipartito que permita alcanzar la resolución política y democrática al histórico conflicto político. La voluntad expresada por ETA para la superación definitiva de la confrontación armada permite abordar un proceso para acordar todo lo relativo a la liberación de los presos y presas políticas vascas, de la vuelta de los y las refugiadas así como todo lo relativo al desmantelamiento de las estructuras militares de la organización. En este sentido, llamamos al PSOE y el PP para que abandonen la pretensión belicista de establecer fotos de vencedores y vencidos. Esa no es la solución para ningún conflicto político. Más aun cuando el Estado español es plenamente consciente de que su problema no es con ETA ni con siquiera con la Izquierda Abertzale. El problema del Estado es con una mayoría de la sociedad de Euskal Herria que desea detentar la capacidad de decidir su futuro sin injerencias de nadie. La Izquierda Abertzale considera que con la paz y con la normalización política y democrática ganamos absolutamente todos y todas. Y cuando hablamos de normalización política y democrática plena, nos referimos también a que el Estado español, sus poderes y estamentos, así como la opinión publica española han de aceptar como algo natural y democrático que el futuro político de nuestro país lo determine la libre voluntad de la sociedad vasca. Así pues, la Izquierda Abertzale ratifica su plena voluntad y compromiso para abordar una dinámica progresiva de soluciones. Una dinámica y un proceso que requiere de la participación de todas las fuerzas políticas del país, de absolutamente todas. Participación que ha de darse en igualdad de condiciones, para lo es imprescindible la legalización de Sortu y el cierre definitivo a la estrategia de persecución y criminalización de la actividad política del movimiento independentista. El proceso político en marcha y la oportunidad que se nos brinda para la resolución del problema político histórico, requiere de una gestión compartida del mismo. Esa es la oferta que la Izquierda Abertzale realiza al resto de fuerzas políticas. Tenemos que adentrarnos en el nuevo tiempo político con voluntad constructiva. Por ello, llamamos al PSOE, al PP y al PNV para que no realicen una utilización partidista y electoralista de una cuestión tan importante y sensible como la de la normalización política y democrática. |