Nos envian a nuestro correo, este testimonio de familias de pres@s politic@s vasc@s y de la realidad que se les impone por la cruel politica penitenciaria española y francesa.
Relato duro, pero desgraciadamente real. Es el dia a dia de las familias de pres@s.
¿Porqué?
Berna
Cuando las cosas se repiten y, aunque malas, no se pueden cambiar, te habitúas a ellas, como si fueran parte de la rutina diaria, como el respirar, el andar, el ir al curro o donde haya que ir, el pelearte con los niños por los etxekolanas y por tantas otras cosas.
La visita al familiar preso se convierte así, también, en algo rutinario, normal, como si fuese parte de tu vida con destino incluido y marcas en el calendario los días en que te corresponde hacer el largo viaje para completar, con el resto de piezas solidarias, el puzle del calendario carcelario.
Pero, afortunadamente, aún nos queda una pequña chispa de capacidad reflexiva y de vez en cuando rompes esa rutina de destíno fatídico aceptado y te haces esa pregunta clave, mágica, revolucionaria, que ha motivado a la humanidad a lo largo de su existencia a superar su ignorancia y su «destino»: ¿Porqué?
¿Porqué tengo que programar año tras año mis vacaciones en función de un lugar lejano y repetido donde mis hijos sufren cárcel?
¿Porqué he de dedicar una buena parte de mi preciado tiempo vital en preparar y realizar largos viajes de cansancio y riesgo?
¿Porqué anular el sueño de llevar a mi hija de ocho años a ver en el Arriaga «El lago de los cisnes» sobre hielo, para poder pagar el viaje a la Francia profunda donde alejaron a nuestra familiar presa?
¿Porqué tanta crueldad y tanta hipocresía de quienes manejan los hilos de las políticas penitenciarias de los estados español y francés y de quienes les jalean por ello o miran para otro lado para no «mancharse»?
Preguntas con respuesta sí, pero preguntas que nos surgen de nuevo tras el viaje realizado, como respuesta del sistema inmunológico a tamaña agresión, que nos permite seguir vivos, críticamente vivos, solidariamente vivos, amorosamente vivos, aunque llevasen a nuestra familiar al desierto del Gobi, por poner un ejemplo no tan imposible, visto lo visto a estas alturas de la dispersión.
El pasado 31 de Diciembre viajamos los cuatro, Mabel, Eki, Nahia y Yo a Roanne, pequeña población de la región francesa Rhonne-Alpes, cerca de Lyon y a 850 km de casa. Es el nuevo destino de cumplimiento de condena de Maite, nuestra familiar presa política vasca. Hicimos dos noches allí para poder hacer visita dos días.
He aquí algunos datos:
– Presa: Maite Juarros Ruiz de Gordejuela, bilbaina de 31 años, detenida en Francia el 28 de Octubre de 2004. Juzgada en Febrero de 2010 (cinco años y medio después). Condenada a 13 años de cárcel. Ha estado en 6 cárceles francesas.
– Su compañero (se casaron en la prisión de Fresnes), mi hijo Aner, no puede visitarla por tener prohibido pisar suelo francés.
– Esta visita que hemos hecho:
* Berna ya había estado en esta cárcel en Setiembre; para Mabel y los niños es la primera visita a Roanne;
* viaje en coche; 1.700 km ida y vuelta: 20 horas de viaje en total;
* dormir en una gîte (como casa rural) a 9 km. de la cárcel; dos noches.
* gastos sin contar la comida: combustible 170 euros; autopista 120 euros; casa 100 euros;
– Proxima visita con los niños: una semana en verano (haremos allí la salida de vacaciones).
Escribo estas notas para llamar la atención sobre la situación, una parte de la grave situación que sufren los presos y presas de Euskal Herria, quienes padecen una destructiva, inhumana e ilegal política de dispersión carcelaria, que se ceba consecuentemente en sus familiares y amigos. Se puede estar o no de acuerdo con los planteamientos políticos de quienes decidieron luchar por su patria y su clase militando en ETA, pero nadie podrá hablar de democracia y de derechos humanos a la vez que mira para otro lado cuando hablemos de la situación de los presos y las presas vascas.
Seguramente la mayoría de quienes recibís este mensaje tenéis puestas las mismas esperanzas que yo tengo en los movimientos políticos que se están dando en nuestro país, una prueba del algodón de que el proceso en marcha será posible ha de estar en la capacidad social para acabar con la polítca de dispersión.
El próximo sábado hay una cita, especialmente importante en este contexto histórico, para reclamar el respeto a los derechos humanos de los presos políticos vascos, os animo a participar.
Un abrazo,
Berna
Sábado 8 de Enero
17:30
Plaza Aita Donosti (Bilbo)
En la fotografia, carcel de Roan en el estado frances