Resumen de Medio Oriente, 29 de noviembre de 2020.
- foto: El comandante de la Fuerza Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, el general de brigada Ismail Qaani.
El Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica de Irán promete vengar, junto al Ejército, el asesinato del prominente científico nuclear Mohsen Fajrizade.
Fajrizade fue asesinado el viernes en un ataque terrorista cometido a 90 kilómetros de Teherán, en la ciudad de Absard, en el condado de Damavand. Las autoridades iraníes aseguran que en este crimen organizado
hay “serios indicios” del papel de Israel.
“Nos unimos a todas las fuerzas defensoras de la patria islámica para vengar la sangre de este y otros queridos mártires [derramada por] los terroristas necios y sus amos”, ha subrayado este sábado el comandante de la Fuerza Quds del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, el general de brigada Ismail Qaani.
El asesinato del doctor Fajrizade, ha proseguido el mando castrense iraní, “constituye una vergüenza para los falsos defensores de los derechos humanos, la democracia y la libertad” del mundo.
El comandante Qaani ha aseverado que “la arrogancia mundial, el sionismo y los patrocinadores del terrorismo”, con este y otros actos terroristas buscan, aunque sin éxito, detener el avance científico de Irán.
Sin embargo, ha afirmado que la experiencia ha demostrado que el asesinato de los cerebros y los más queridos capitales del Irán islámico no solo no detienen los avances científicos del país, sino que los aceleran.
El alto mando castrense ha recalcado que la República Islámica y las naciones musulmanas pueden frustrar los complots de los enemigos mediante el fomento “del desarrollo científico, la independencia y la autosuficiencia”.
Teherán ha asegurado que el asesinato del destacado científico tendrá respuesta en un tiempo apropiado.
El Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, ha pedido este sábado castigar a los autores materiales e intelectuales del crimen. “Primero, la investigación de este crimen, y el castigo definitivo de sus autores y de aquellos que lo ordenaron; y segundo, el seguimiento de los esfuerzos científicos y técnicos del mártir en todas las áreas en las que él se desempeñó”, ha apuntado.
