Primera guerrillera muerta durante la tregua unilateral indefinida
Para despedirnos en Colombia, nos esperó durante dos horas en el cruce de una trocha guerrillera, en octubre del año pasado, para abrazarnos y decirnos: “hasta pronto camaradas, lucha y fe en la victoria”. A los tres meses siguientes, la terrible noticia que nos lesionó el sentimiento revolucionario, Yake había muerto.
Jaqueline Patiño, guerrillera del Frente Aurelio Rodríguez – Bloque Iván Ríos de las FARC-EP |
Jaqueline Patiño guerrillera del Frente Aurelio Rodríguez. Yake, como cariñosamente le decíamos, tenía 28 años, murió en un bombardeo, el pasado 4 de enero a las 23 – 00 horas en las riberas del Rio Tamaná, al oriente del Chocó en las estribaciones de la cordillera El Tatamá. Un ataque miserable y a mansalva, mientras dormía en un campamento guerrillero. Este hecho luctuoso que hiere nuestros sentimientos, fue realizado por aviones Súper Túcanos, en medio de la tregua unilateral indefinida iniciada y decretada el pasado 20 de diciembre por nuestra organización, en el marco del desescalamiento del conflicto y como un gesto humanitario.
Así es la reciprocidad irracional del establecimiento a nuestros gestos por la vida y el desescalamiento de esta vorágine en que nos ha envuelto por más de 50 años. El gobierno tiene que entender que nuestra vocación de reconciliación de paz, está asociada al clamor nacional por una salida política al conflicto social y armado en nuestra patria.
Yake ingresó a la guerrilla en el año 2000. Oriunda de Quinchía (Risaralda), de familia humilde, dedicada toda la vida al cultivo del café, la caña y otros productos propios de esta zona cafetera. Yake llegó a filas como lo hace la mayoría de gente del campo, con una educación básica, ya en la organización se dedicó a estudiar y perfeccionar su lectura y escritura. Esto fue reconocido por el colectivo, que a los ocho meses la eligió como secretaria política de la célula; cuya responsabilidad asumió con mucha dedicación.
Se distinguió por ser una excelente compañera de filas, con un espíritu de solidaridad ejemplar. Participó en varios combates frente al ejército, donde se destacó por su arrojo y serenidad. A los dos años en filas fue promovida a reemplazante de escuadra y asignada al trabajo de organización en el occidente de Caldas; en esta labor, era una guerrillera amable y respetuosa con la población civil, característica que la ubicó como una de las principales organizadoras del Frente.
Se preocupaba por la formación militar, la educación y la superación personal de la guerrillerada. Ejercía la crítica y la autocrítica en todas las instancias democráticas internas de la organización, lo cual habla bien de su convencida formación comunista.
En los momentos de esparcimiento se destacaba como gran bailarina, aunque tenía una singular personalidad: introvertida, pero a la hora de fiestas o de integraciones, trocaba en extrovertida y era la primera en irradiar alegría y espontaneidad.
Con una belleza ancestral heredada de sus raíces embera-chamí, con su cabellera de negra cascada escurrida sobre su espalda, junto a sus compañeras y compañeros de lucha, remontó las empinadas trochas del Eje Cafetero en busca de un futuro cierto para la revolución colombiana. Fue amante de las flores y enamorada de la vida.
Siempre abrazada a su compañero y a su fusil, muy femenina en su presentación personal y disciplinada combatiente, firme en sus convicciones políticas. Nos enlutó aquella noche, cuando las bombas segaron su vida, ahogaron su respiración y su humanidad; quedó levitando en la eternidad del tiempo. Hoy sus compañeras y compañeros guerrilleros, la población donde aprendió y enseñó la recuerdan con especial afecto. En el patio, en la formación guerrillera, todos echamos de menos aquel moño rojo que siempre solía llevar en su trenza de azabache y carbón.
Yaqueline se convierte en la primera guerrillera asesinada por un régimen indolente que responde al cese unilateral de fuego decretado por las FARC-EP con despiadados bombardeos y otras provocaciones que pueden dar al traste con la iniciativa de descalamiento del conflicto.
¡Por nuestros muertos, ni un minuto de silencio, toda una vida de combate. venceremos!.