Según recoge la ONU en el primer artículo de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes: «A los efectos de la presente Convención, se entenderá por el término «Tortura» todo acto por el cual se inflija intencionadamente a una persona dolores o sufrimientos graves, ya sean físicos o mentales, con el fin de obtener de ella o de un tercero información o una confesión, de castigarla por un acto que haya cometido, o de intimidar o coaccionar a esa persona o a otras, o por cualquier razón basada en cualquier tipo de discriminación, cuando dichos sufrimientos sean infligidos por un funcionario público u otra persona en el ejercicio de funciones públicas, a instigación suya, o con su consentimiento o aquiescencia. No se considerarán torturas los dolores o sufrimientos que sean consecuencia únicamente de sanciones legítimas, o que sean inherentes o incidentales a éstas.»
En base a esta definición, universalmente adoptada, cuando hablamos de la tortura nos referimos a los sufrimientos graves que se inflijan a una persona, sufrimientos que pueden ser físicos o psicológicos, cuando sea infligido por un funcionario público o persona en el ejercicio de funciones públicas.
Los métodos de tortura que se utilizan contra las ciudadanas y ciudadanos vascas detenidas en régimen de incomunicación son métodos que han sido científicamente estudiados para mejor obtener los objetivos marcados. La experiencia de la tortura implica un proceso de puesta en cuestión de la propia identidad. Los métodos de tortura han ido variando a lo largo de los años. Actualmente se utilizan formas mas sofisticadas, encaminadas a evitar dejar huellas en la superficie corporal que puedan ser detectadas en un examen médico. Así, se observa una irrupción de técnicas denominadas psicológicas.
Los métodos de tortura han sido definidos habitualmente en métodos físicos y métodos psicológicos. Los primeros serían aquellos aplicados por agresión y/o provocación de efectos de sufrimiento físicos. Los métodos psicológicos son aquellos que, sin agresión física, producen una alteración en el estado psicológico de la persona. Sin embargo hay que tener en cuenta que todo sufrimiento físico conlleva un sufrimiento psicológico, y que muchos métodos de tortura pueden considerarse combinados, y además, que habitualmente se utilizan varias técnicas sobre una misma persona de forma simultanea. Entre los métodos que destacan nos encontramos con los siguientes:
- 1. GOLPES: Es la agresión más denunciada por los y las detenidas. Generalmente los y las detenidas denuncian que los golpes que sufren son generalizados, y estos pueden ser bien con las manos, puños, o con diversos objetos como pueden ser periódicos enrollados, listines telefónicos, palos forrados con periódicos o cinta aislante… Estos golpes suelen ser generalmente en diferentes zonas sensibles del cuerpo, como pueden ser la cabeza, el estómago, las piernas, los brazos… En ocasiones los golpes los profieren directamente, y en otras ocasiones cubriendo la parte donde se va a golpear con mantas etc. Todo ellos dirigido a no dejar marcas en el cuerpo del apersona detenida.
- 2. EXTENUACION FISICA: Provocar el agotamiento físico en la persona detenida, es un método que se repite cada vez con mayor intensidad, generalmente mediante la obligación de la persona detenida a permanecer de pie durante horas, incluso días, y este año hemos observado el aumento de obligación de permanecer en posturas anómalas a los detenidos sobre todo por parte de la Ertzaintza. También se alcanza el agotamiento de las personas detenidas mediante la realización de ejercicios físicos como flexiones, abdominales etc.
- 3. BOLSA: Técnica mediante la cual se priva a la persona de oxígeno durante cierto periodo de tiempo, llegando las personas detenidas a la pérdida del conocimiento. Este método consiste en colocar una bolsa a la persona detenida y apretarle el cuello provocándole de esta forma la asfixia. Hay relatos de personas detenidas que nos han hecho llegar que en el momento de asfixia, notaban un sentimiento de muerte, llegando incluso a defecarse y orinarse encima.
- 4. BAÑERA: Es otra técnica de asfixia, método de tortura que no había sido utilizado en los últimos tiempos, pero que este año nos lo han relatado en dos ocasiones. Una de las detenidas nos relataba que le introducían la cabeza en un balde lleno de agua, dejándole después en estado de semiinconsciencia, tirada en el suelo. Otro detenido nos ha relatado que le introdujeron la cabeza en un váter mientras tiraban de la bomba.
- 5. ELECTRODOS: Este método de tortura consiste en aplicar descargas eléctricas sobre distintas partes del cuerpo de la persona que permanece detenida, generalmente en zonas sensibles como pueden ser los costados, orejas, genitales, muñecas, pies, pechos…
- 6. IMPEDIMENTO DE LA VISION: Es cada vez más habitual entre todos los cuerpos policiales el impedir la visión a las personas detenidas, ampliando de esta forma su inseguridad y desorientación. Este impedimento de visión puede ser producido mediante la colocación de antifaces o capuchas (generalmente ene l caso de que los detenidos lo sean por la Guardia Civil), o bien obligando a las personas detenidas a permanecer con la cabeza agachada y los ojos cerrados.
- 7. AMENAZAS, GRITOS, HUMILLACIONES: Las personas detenidas nos relatan muy a menudo el haber oído los gritos de personas que han sido detenidas con ellas o de familiares o amigos a los que los agentes que participan en el interrogatorio han amenazado con detener, torturar, violar o matar. Por lo habitual las amenazas que nos relatan se refieren a amenazas contra sí mismos (la aplicación de diferentes métodos de tortura, amenazas de muerte…) o contra los seres queridos.
- 8. AGRESION SEXUAL: Este año hemos comprobado por los diferentes relatos que nos han hecho llegar las personas detenidas, que las agresiones y vejaciones sexuales han aumentado considerablemente, tanto en el caso de las mujeres como de los hombres. Es norma habitual que a la persona detenida se le obligue a desnudarse parcial o totalmente y en ocasiones a mantener posturas vejatorias, y es entonces cuando se suceden las amenazas y las vejaciones o humillaciones sexuales, de tipo oral (amenazas, vejaciones, insultos, amenazas de violación), mediante la violencia contra los órganos sexuales (mediante golpes o la colocación de electrodos), la desnudez obligatoria, tocamientos, movimientos obscenos contra sus cuerpo, llegando este año a la violación en comisaría por parte de la Guardia Civil mediante la introducción de un palo en el ano en el caso de diferentes hombres, e introduciendo lo que una detenida cree que era el pene de uno de los torturadores en su boca.
- 9. SIMULACRO DE EJECUCION: Muchas de las personas detenidas relatan que les han amenazado con matarles, bien en dependencias policiales, bien en su traslado hacia ellas. Hay relatos que nos hacen conocer que en ocasiones esa ejecución simulada consiste en colocarle un arma en la cabeza, cara etc. y apretar el gatillo. Otras personas relatan que en los traslados a dependencias policiales, los agentes paraban el coche obligándoles a salir de él mientras los agentes les decían que les daban cierto espacio de tiempo para que echasen a correr, haciendo constantes referencias a ciudadanos vascos que han sido encontrados muertos en el monte en extrañas circunstancias.
- 10. POLICIA BUENO POLICÍA MALO: Esta técnica es muy utilizada por los distintos cuerpos policiales, que logran la desorientación completa de la personas detenidas, al hacerles pasar de un estado de alerta en un estadio de brutalidad infinita a un estado de semi-tranquilidad con algún otro agente «amable».
- 11. CONSTANTES INTERROGATORIOS: Las personas detenidas nos relatan que los interrogatorios que sufren son constates, sin tener tiempo apenas para descansar o dormir.
- 12. OBLIGACIÓN DE OÍR LOS GRITOS DE OTRAS PERSONAS QUE ESTÁN TAMBIÉN DETENIDAS Y/O FAMILIARES O AMIGOS: En más de un relato hemos encontrado que las personas que han permanecido detenidas nos dicen que han oído los gritos de dolor y sufrimiento, y el llanto de otras personas que se encontraban también incomunicadas. Y en el caso de los detenidos por la Ertzaintza nos han relatado que oían las voces de sus seres queridos, como si se encontrasen en dependencias policiales.