Una simple moción pidiendo al Gobierno que presente a la Cámara un texto refundido sobre su «Plan de Convivencia» volvió a demostrar que las posiciones están todavía muy divididas entre PSE, PP y UPyD, por un lado, y PNV, Aralar, EA y EB, por el otro.
El plan «Convivencia Democrática y Deslegitimación de la Violencia» sigue dividiendo al Parlamento de Gasteiz y los argumentos de cada una de las partes siguen siendo también los mismos que se conocieron cuando el Ejecutivo de López presentó su primer borrador.
PSE, PP y UPyD insisten en la necesidad de incidir en la violencia de ETA y en dar la centralidad del plan a «las víctimas del terrorismo».
PNV, Aralar, EA y EB se mantienen en la necesidad de que el plan tenga una visión más amplia de la violencia, la educación para la paz y el respeto a los derechos humanos, y destacan que la centralidad del proyecto debe estar en el alumnado, no en las víctimas.
Desde que el Gobierno presentó su borrador, uno de los ejes de discusión ha sido si el plan de López sustituía al anterior del tripartito o lo complementaba. La posición inicial del Ejecutivo fue que lo sustituía. Pero visto el rechazo político y, sobre todo, la oposición de los agentes educativos, incluido el Consejo Escolar, comenzó a sostener que lo complementaba.
Por lo tanto, se necesitaba conocer qué partes del anterior plan se mantenían, cuáles se corregían y cuáles se suprimían. Hacía falta un texto refundido.
Fue una de las exigencias del PNV para comenzar a negociar y los jeltzales ya han recibido un texto del Gobierno que, de momento, no les convence y al que van a presentar sus propias alegaciones.
Y ayer Aralar solicitó en el pleno que ese texto fuera entregado a todos los grupos, para que también cada cual hiciera sus aportaciones.
Posiciones alejadas
En realidad, se habló poco de este texto y mucho más de las cuestiones de fondo, donde las posiciones siguen estando todavía muy alejadas y los bloques muy marcado. PSE, PP y UPyD tumbaron la moción de Aralar, y aprobaron otra con una terminología más acorde a su posición ideológica.
Por mucho que desde el Gobierno se haya estado filtrando a determinados medios que las conversaciones con el PNV van por el buen camino y es posible un acuerdo, la intervención de la parlamentaria jeltzale Maribel Vaquero dejó bastante claro que las divergencias son todavía de fondo.
fuente: gara.