Con su procesamiento, ante la denuncia de Falange y Manos Limpias, por realizar un amago de investigación de los crímenes del franquismo, Garzón esta realizando, por supuesto en contra de su voluntad, su mejor servicio a la lucha por la democracia, al dejar al desnudo la auténtica naturaleza del Régimen actual y de sus instituciones.
Hacia mucho tiempo, a pesar de que todos los días hay motivos para ello, que no oíamos hablar con tanta profusión de las complicidades entre las actuales instituciones y el franquismo, de las limitaciones democráticas de éstas y de su orientación liberticida.
Estos días, personajes muy importantes de la sociedad se han reiterado en tales ideas, para algo positivo esta sirviendo el procesamiento de Garzón.
Parecen de especial interés las declaraciones del Ex-Fiscal contra la corrupción, señor Villarejo, persona que desde luego nos merece un respeto, a diferencia de otras que han salido a escena, denunciando la complicidad con la tortura de varios miembros actuales del Tribunal Supremo de España, refiriéndose especialmente a su época de miembros del Tribunal de Orden Publico.
Estamos completamente de acuerdo con esas valoraciones, pero no hay que olvidar que Garzón ha sido cómplice también de torturas en tiempos más actuales, cuestión ésta que tiene al menos similar gravedad.
El inicio en Argentina de un procedimiento judicial contra los crímenes del franquismo, ya veremos que recorrido tiene, puede ser también una derivada útil en este proceso, por otra parte imparable, de deslegitimación del actual Régimen posfranquista.
Garzón ha expresado ya que »las movilizaciones de apoyo no le favorecen». Quizás no ha entendido el hombre que la mayoría de la gente que ha salido a la calle no es en apoyo de su persona sino de rechazo a una actitud abiertamente fascista de la Administración de Justicia. Y eso sí que es útil.
En éste esperpento fascistoide hacia el que ha evolucionado el Régimen aún nos quedan muchas cosas por ver, una de ellas, eso es lo que buscan al menos los que están detrás de la reactivación del caso Faisán, es el procesamiento de Rubalcaba por colaboración con ETA.
¿Os imaginaís la situación? , parece totalmente kafkiano pero en esta Egpaña, amigos, amigas todo es posible en determinados ámbitos.