El desarrollo y desenlace del conflicto en Honduras denota la implicación directa del Departamento de Estado de los Estados Unidos en la planificación y ejecución del Golpe de Estado contra José Manuel Zelaya Rosales. Aun cuando dijeron apoyarle y estar en contra del Golpe su postura fue cambiando con el transcurso del tiempo y mostrando su verdadero papel.
La planificación y ejecución…
La evidencia demuestra que fue la administración Obama la que planificó el Golpe de Estado en contra de Zelaya Rosales. No precisamente porque este representara un peligro para la región sino para enviarle un mensaje a la parte Sur de América que ha desarrollado ciertos lazos y acercamientos que irritan al Tío Sam. Los acercamientos de la administración Zelaya con el bloque de países miembros de la Alianza Bolivariana para América (ALBA) fue el detonante que provoco la caída del Presidente Zelaya.
Carlos H. Reyes, ex candidato popular independiente, asegura: “…De esa manera, Estados Unidos siempre ha intervenido en los asuntos internos de Honduras, y además, en el golpe de Estado del 28 de junio, intervino EEUU porque los grupos económicos que representan sus intereses, sintieron que estaban en peligro. Esto a raíz de la pequeña reforma que estaba haciendo el presidente Mel Zelaya, y porque él estaba consultando sobre la posibilidad de una constituyente. Entonces Washington dice sí al golpe de Estado, algo que se viene preparando mucho antes del 28 de junio. Yo le dije a Shannon que uno de los participantes en la trama es John Negroponte, y varios asesores de Bill Clinton (…) El embajador Llorens me pidió que no repitiera lo que había dicho. Yo le contesté: eso hemos pensado siempre, así fue y esa es la información que tenemos. No voy a dejar de manejarlo, porque es una realidad.”
El comportamiento del régimen de facto…
Desde el 28 de junio el régimen de facto se mostró fuerte e inflexible aun cuando estaba en contra del mundo. No le importo que la Organización de Estados Americanos (OEA) excluyera a Honduras de ese ente regional y tampoco le dio alguna importancia a las resoluciones de la Organización de Naciones Unidas (ONU). Eso solo se entiende ahora, cuando se sabe que siempre tuvo el apoyo de la administración Obama. Las desafiantes palabras de Micheletti en reuniones con representantes de la OEA insistiendo que… “aun cuando el país fuera invadido por una fuerza externa, ellos no retrocederían y que defenderían el país a costa de su vida”, demuestran nuestra afirmación.
La lucha interna en el imperio…
Honduras ha sido utilizada como campo de batalla por los republicanos y demócratas. Desde el 28 de junio han arribado a Honduras los senadores republicanos Díaz Balart, nietos del dictador cubano Batista, y otros representantes que tenían condicionados la votación en el Senado, la aprobación de algunos nombramientos de la administración Obama. Este logró sortearlos pero a cambio varió su postura ante lo sucedido a Zelaya Rosales. Hay que sumar que por Tegucigalpa han pasado los representantes de la derecha internacional de América Latina apoyando al régimen de facto y prometiendo gestionar reconocimiento internacional.
Desde el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) en su momento planteamos que en Honduras se jugaba el futuro el resto de América. Si evaluamos los resultados hasta este momento podemos afirmar que la derecha ganó la batalla y que se iniciaran una era de golpes y retrocesos en el ámbito democrático en el subcontinente.
Arias: de San José a Guaymuras…
Luego del Golpe de Estado, el departamento de Estado de Estados Unidos puso en práctica su plan para buscar una salida negociada a la crisis. Este incluyo la participación de un negociador y para ello nombró a Oscar Arias Sánchez, un viejo aliado del imperio, que colaboro en la “pacificación” de Centro América y cuyos réditos le merecieron la adjudicación del Nobel de la Paz. Por tanto dicho personaje goza per se de aceptación internacional y desde el inicio aseguraba los resultados. El objetivo del mediador era ganar tiempo para que el régimen de facto se fortaleciera. De ahí que la negativa del gobierno usurpador de aceptar la vuelta de Zelaya al poder no sorprendió a nadie, ya que de eso se trataba.
Las resoluciones tanto de la OEA como de la ONU fueron parte del juego que permitieron a los golpistas seguir ganando tiempo y acercarse al proceso electoral pasando por las urnas el Golpe de Estado. La OEA envío sendas visitas para reanudar el dialogo fracasado. Se dio por fracasado la propuesta de San José y con la venia de la comunidad internacional se pasó a lo que se llamó acuerdo al estilo hondureño, con ello se inauguro un proceso de negociación con sendas delegaciones de ambos sectores. La base de este dialogo fue la propuesta de Arias Sánchez, se fueron discutiendo punto por punto y haciendo declaraciones que pronto se pondría punto final al conflicto. Inesperadamente se dio por fracasado dicho dialogo por parte de la delegación del Presidente Zelaya, argumentando que el régimen de facto no tenía ninguna intención de buscar una salida a la crisis y que lo que hacía era ganar tiempo.
El imperio interviene directamente
Ante tal fracaso, el imperio interviene directamente:Estados Unidos decidió tomar la iniciativa para darle fin a la crisis que ha puesto en juego su diplomacia ‑y la de América Latina- y anunció el envío de una alta delegación a Tegucigalpa para «presionar» a las partes por una solución en las estancadas negociaciones para llevar paz al país. El secretario de Estado adjunto para el Hemisferio Occidental, Thomas Shannon; el secretario de Estado adjunto, Craig Kelly; y el asesor especial de la Casa Blanca y director de Relaciones Hemisféricas, Dan Restrepo, quienes permanecerán en Tegucigalpa, buscando una salida al conflicto.
Con la presencia de estos personeros se firmó el acuerdo que esencialmente mandaba dicho acuerdo para que fuese el Congreso Nacional el que se pronunciara sobre la restitución de Manuel Zelaya. Se asumía que esto ponía fin al conflicto pero no fue así. Ya que dicha instancia recibió dicho documento y mando a consultar a: la Corte Suprema de Justicia, el Ministerio Publico, al Comisionado de Derechos Humanos y a la Procuraduría General de la República. Los informes que dichas instancias ya presentaron de antemano se conocen puesto que son instituciones que participaron activamente en el Golpe de Estado. El presidente del Congreso Nacional anunció que convocaría a sesión el día 2 de diciembre. Ni el Partido Nacional de Pepe Lobo, ni el Partido Liberal con su candidato Elvin Santos quisieron cargar con la responsabilidad de decidir sobre el tema antes de la realización de las elecciones del 29 de Novieimbre.
Ante la insistencia del régimen de facto por realizar las elecciones sin restituir el orden constitucional la administración Obama ha dicho que reconocerá dichos resultados y el mismo Arias Sánchez ha declarado que pedirá a la comunidad internacional que dichos resultados sean reconocidos. Como vemos siguen siendo consecuentes con sus posturas de colaborar con el régimen de facto.
El comportamiento errado del FNR y de Mel…
La dirigencia del Frente Nacional de Resistencia contra el Golpe de Estado (FNR) si bien fue consecuente al mantenerse firme hasta el momento, tuvo un comportamiento errático en la conducción de la lucha. Se cometieron muchos errores entre los que están: 1. Se confió en demasía en que la salida al conflicto estaba en manos de los entes regionales y mundiales como la OEA y las Naciones Unidas. 2. Igual se creyó en lo que podría hacer la administración Obama sin percatarse que ellos fueron los planificadores, ejecutores y sostenedores del Golpe de Estado. 3. Siempre se aposto a la salida negociada al conflicto y no se aposto por la derrocamiento del régimen de facto. 4. Al no tener un plan claro de resistencia se movieron al ritmo que les impuso Zelaya Rosales. 5. Nunca se organizo a la población para luchar por el derrocamiento del régimen de facto, nunca se concreto la huelga general para golpear la economía y debilitar al gobierno usurpador. 6. La dirigencia del FNR copada por la burocracia sindical, quienes aplicaron los mismos métodos que les ha mantenido en el poder en sus respectivas instancias durante muchísimos años.
En cuanto a Mel Zelaya se puede señalar los siguientes: 1. Creyó en la palabra de la administración Obama cuando le aseguraron que sería restituido y que no reconocerían las elecciones. 2. Confió en los organismos regionales y mundiales como la OEA y ONU, pensando que con las resoluciones bastaban para su restitución. 3. Nunca estableció una coordinación con la dirección del frente de resistencia y sus acciones aparecieron como producto de la improvisación emotiva. 4. Cayó en la trampa de la negociación, confiando en la palabra de los golpistas sin entender que lo que estos hacían siempre fue ganar tiempo para legalizar el Golpe de Estado mediante las elecciones.
Los países del ALBA y el Golpe de Estado…
Igual que los entes regionales como la OEA y la ONU, no pasaron de declaraciones condenando el Golpe de Estado en contra de Zelaya Rosales. Pero no hubo acciones concretas contra el régimen de facto que lo obligara a ceder el poder. Se hicieron sendas declaraciones del Grupo de Rio y de UNASUR pero no se paso del discurso. Las encendidas palabras de Chávez al inicio de la crisis pronto fueron sustituidas por un silencio cómplice que dejo a Zelaya además de solo, encerrado en la embajada de Brasil. Hoy se cumplen cinco meses del Golpe de Estado y más de dos meses de estar encerrado en dicha embajada.
Los pueblos y gobernantes de la región Sur de América deben entender que la suerte de sus países pasa por los resultados que se den en Honduras. Lo que la administración Obama hizo fue experimentar en este país para luego repetirlo en cualquier otro de la región. La pregunta es ¿Cuál es el que sigue? ¿Sera Bolivia, Paraguay, EL Salvador, Ecuador o la misma Venezuela? El imperialismo con el cambio de inquilino de la Casa Blanca, no cambio de política. Sigue abriendo frentes de guerra e intentando tener un mayor control del mundo y si no veamos Afganistán, Irán y Colombia.
El Soca