Colom­bia. Duque y la alo­cu­ción públi­ca de un genocida

Resu­men Lati­no­ame­ri­cano, 28 de junio de 2021.

El Geno­ci­da pre­si­den­te colom­biano Iván Duque, salió en alo­cu­ción, tras el supues­to “aten­ta­do” que le hicie­ron, dicien­do que bla­bla­bla “con­de­na la vio­len­cia”… Ah, pero no la vio­len­cia esta­tal que le revien­ta la cabe­za a los jóve­nes mani­fes­tan­tes… Esa no, cla­ro. La peor vio­len­cia, la que ase­si­na día a día al pue­blo ni la va a nom­brar, dado que es el pro­pio Esta­do el que la ejer­ce. Son unos cínicos.

Y dijo tam­bién el Car­ni­ce­ro Duque que “lucha­mos con­tra el nar­co­trá­fi­co”… Y ahí uno no sabía si llo­rar o reír al escu­char­lo, dado que los mayo­res nar­co­tra­fi­can­tes de Colom­bia están incrus­ta­dos en el pro­pio Esta­do y son par­te de la bur­gue­sía local y trans­na­cio­nal a la que el régi­men le sirve.

Lue­go tam­bién dijo que fue gra­cias a las “carac­te­rís­ti­cas” del heli­cóp­te­ro que supueees­ta­men­te, “no per­dió la vida”. ¿Recuer­dan el pre­cio billo­na­rio del famo­so heli­cóp­te­ro? Pues ya esta­rán vien­do a ver cómo com­pran otro y hacen ooo­tro macro­ne­go­cio de sobre­fac­tu­rar y lle­nar­se los bol­si­llos con el dine­ro de los impues­tos… Ah, pero “para edu­ca­ción y salud no hay pla­ta”, dicen.

Para ese régi­men hay una cons­tan­te: ase­si­nar al pue­blo y men­tir… orga­ni­zar tea­tros mediá­ti­cos para hacer­se las víc­ti­mas, cuan­do en reali­dad el Esta­do colom­biano es el mayor geno­ci­da del con­ti­nen­te. Ase­si­nar y men­tir, para seguir explo­tan­do y robando.

Y YA EN EL COLMO DE LO BURDO Y DEL CINISMO:

Los medios de des­in­for­ma­ción colom­bia­nos salen a decir que la poli­cía colom­bia­na habría encon­tra­do en el lugar des­de don­de dicen que le dis­pa­ra­ron al heli­cóp­te­ro, unos fusi­les aban­do­na­dos, uno de ellos “con mar­cas de las Fuer­zas arma­das de Vene­zue­la”… Sola­men­te les fal­tó decir que Madu­ro se había olvi­da­do el pasa­por­te tam­bién entre la male­za. Nos toman a todos por ton­tos. Nadie aban­do­na un fusil como quien pier­de una mone­di­ta del bol­si­llo. Pese a lo des­ca­be­lla­do del cuen­to del fusil, esa fábu­la ya está sien­do repe­ti­da por todos los medios de alie­na­ción, colom­bia­nos e inter­na­cio­na­les. La com­pli­ci­dad con el régi­men colom­biano es ate­rra­do­ra. Pue­de per­pe­trar un Exter­mi­nio con­tra miles de mani­fes­tan­tes y cuen­ta con la com­pli­ci­dad inter­na­cio­nal, dado que es un régi­men total­men­te fun­cio­nal al saqueo trans­na­cio­nal de Colom­bia, y faci­li­ta ese saqueo capi­ta­lis­ta pre­ci­sa­men­te median­te el Exter­mi­nio. Pue­de inven­tar­se las fábu­las más des­ca­be­lla­das, que le hacen coro sin ver­güen­za algu­na por el insul­to mayúscu­lo a la ver­dad y a la inteligencia.

El régi­men colom­biano, siem­pre tan patra­ñe­ro y cri­mi­nal, hacien­do sus mon­ta­jes y sus aten­ta­dos fal­sa ban­de­ra para inten­tar tapar los más de 86 ase­si­na­tos de mani­fes­tan­tes per­pe­tra­dos la poli­cía colom­bia­na, los cien­tos de des­apa­re­ci­dos por las fuer­zas repre­si­vas del Esta­do colom­biano, las miles de vio­la­cio­nes a los dere­chos huma­nos que ha come­ti­do y sigue come­tien­do el geno­ci­da Esta­do colom­biano, cada día.

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Nota: Sería la mayor come­dia ima­gi­na­ble, si no fue­ra por el Geno­ci­dio que está per­pe­tran­do el Esta­do colom­biano con­tra el pueblo.