Eco­lo­gía Social. Aldeas de isla Poli­ne­sia de Tuva­lu ya pue­den soñar con agua corriente

Por Cathe­ri­ne Wil­son. Resu­men Lati­no­ame­ri­cano, 26 de noviem­bre de 2020.

Los habi­tan­tes de las comu­ni­da­des rura­les de una de las nue­ve islas que com­po­nen la peque­ña nación de Tuva­lu, en la Poli­ne­sia, no dejan de pen­sar en cómo cam­bia­rá su vida cuan­do por pri­me­ra vez se conec­ten al agua corrien­te y pue­dan acce­der al agua pota­ble por los grifos.

A pesar de estar rodea­do por millo­nes de kiló­me­tros cua­dra­dos de océano, poco más de la mitad de los 12 millo­nes de per­so­nas que viven en la región de las Islas del Pací­fi­co tie­ne acce­so a agua pota­ble, la cifra más baja de cual­quier región del mundo.

En las comu­ni­da­des insu­la­res remo­tas de Tuva­lu y en toda la región, el défi­cit de agua pota­ble es un obs­tácu­lo impor­tan­te para la pre­ven­ción de enfer­me­da­des, una vida salu­da­ble y acce­der a pro­gre­so per­so­nal y el desa­rro­llo colectivo.

Pisi Sele­ga­niu, cuya fami­lia se repar­te entre dis­tin­tas aldeas de la isla de Vai­tu­pu, a unos 120 kiló­me­tros al noroes­te del prin­ci­pal ato­lón del país, Funa­fu­ti de Tuva­lu, dijo a IPS que «afec­ta mucho la vida diaria».

«La úni­ca fuen­te es el agua de llu­via; el pro­ble­ma es que cuan­do se seca no hay sumi­nis­tro de agua adi­cio­nal. La gen­te usa mucho com­bus­ti­ble para con­du­cir has­ta el otro extre­mo de la isla para con­se­guir agua y traer­la de vuel­ta a las aldeas”, contó.

Este mes de noviem­bre comien­za la cons­truc­ción de la red de tan­ques y tube­rías que des­pués con­du­ci­rán el agua sub­te­rrá­nea de los pozos situa­dos en el nor­te de la isla Vai­tu­pu a las 1500 per­so­nas que viven en las aldeas de Tuma­seu y Asau, en el sur.

Es la cul­mi­na­ción de años de con­sul­tas sobre el cono­ci­mien­to y mane­jo de los recur­sos hídri­cos entre los líde­res tra­di­cio­na­les de la isla y la Comu­ni­dad del Pací­fi­co, la orga­ni­za­ción de desa­rro­llo regio­nal, que tie­ne su sede en Nue­va Caledonia.

Situa­da en el océano Pací­fi­co cen­tral entre Kiri­ba­ti, al nores­te, y Fiji, al sur, la pobla­ción esti­ma­da de Tuva­lu es de 10 580 per­so­nas, que resi­de en islas bajas, don­de la ele­va­ción más alta es de 4,6 metros.

Las fuen­tes super­fi­cia­les de agua dul­ce son muy esca­sas. No hay ríos, por ejem­plo, y los isle­ños depen­den en for­ma des­me­di­da de la cap­ta­ción de agua de llu­via para beber, coci­nar e higienizarse.

“Tuva­lu tie­ne la ben­di­ción de tener mucha llu­via al año… La reco­lec­ción de agua de llu­via con un alma­ce­na­mien­to ade­cua­do es el úni­co medio sos­te­ni­ble para man­te­ner el sumi­nis­tro para la pobla­ción”, dijo Uatea Sale­sa, geren­te de pro­yec­to en la Comu­ni­dad del Pací­fi­co para el Pro­yec­to de Segu­ri­dad del Agua de Vaitupu.

Pero en diá­lo­go con IPS agre­gó que, en épo­cas de sequía, ni siquie­ra el agua de llu­via es suficiente.

El ato­lón es alta­men­te vul­ne­ra­ble al fenó­meno cli­má­ti­co El Niño-Osci­la­ción del Sur (Enos), un patrón alterno de cam­bios en la tem­pe­ra­tu­ra del agua del océano Pací­fi­co tro­pi­cal, cono­ci­do como El Niño y La Niña, que, a su vez, con­du­ce a tem­pe­ra­tu­ras cáli­das y frías. cam­bios atmos­fé­ri­cos y perio­dos fluc­tuan­tes de lluvia.

Personal del Departamento de Obras Públicas de Tuvalu realiza estudios geofísicos para identificar el grosor de la capa de agua subterránea dulce para determinar el potencial de desarrollo de agua subterránea. Foto: Cortesía de la Comunidad del Pacífico

Per­so­nal del Depar­ta­men­to de Obras Públi­cas de Tuva­lu rea­li­za estu­dios geo­fí­si­cos para iden­ti­fi­car el gro­sor de la capa de agua sub­te­rrá­nea dul­ce para deter­mi­nar el poten­cial de desa­rro­llo de agua sub­te­rrá­nea. Foto: Cor­te­sía de la Comu­ni­dad del Pacífico

En 2011, Tuva­lu expe­ri­men­tó una sequía seve­ra, atri­bui­da a La Niña, y lue­go meses sin llu­via, lo que lle­vó al gobierno a esta­ble­cer el esta­do de emer­gen­cia y a que donan­tes inter­na­cio­na­les trans­por­ta­ran por aire al país sumi­nis­tros de agua dul­ce potable.

El cre­ci­mien­to de la pobla­ción tam­bién aumen­tó las pre­sio­nes sobre los recur­sos hídri­cos del país.

Tuva­lu tie­ne una super­fi­cie total de solo 26 kiló­me­tros cua­dra­dos y una den­si­dad de pobla­ción de 408 per­so­nas por kiló­me­tro cua­dra­do, lo que gene­ra una enor­me deman­da de con­su­mo de un recur­so natu­ral frágil.

Impul­sar la segu­ri­dad hídri­ca del país es una de las prin­ci­pa­les prio­ri­da­des del gobierno de Tuva­lu y, con este fin, se ha estu­dia­do la desalinización.

“El gobierno implan­tó la desa­li­ni­za­ción para com­ple­men­tar el sumi­nis­tro de agua en la isla Funafuti

[don­de se encuen­tra la capital]

y en algu­nas de las islas del nor­te como res­pal­do duran­te los perío­dos de esca­sas llu­vias y de sequía”, seña­ló Salesa.

Pero, adu­jo, «la desa­li­ni­za­ción es una tec­no­lo­gía cara y no será sos­te­ni­ble si se con­vier­te en una fuen­te alter­na­ti­va de sumi­nis­tro de agua».

Sosea­la Tini­lau, direc­to­ra del Depar­ta­men­to de Medio Ambien­te del gobierno de Tuva­lu, dijo a IPS que los desa­fíos de la ges­tión y el sumi­nis­tro de agua tam­bién incluían la baja capa­ci­dad de los hoga­res para alma­ce­nar agua pota­ble y man­te­ner con­ti­nua­men­te los des­agües y los tan­ques de agua.

Stuart Min­chin, direc­tor gene­ral de la Comu­ni­dad del Pací­fi­co, des­ta­có la impor­tan­cia del agua pota­ble para la vida y el desa­rro­llo humano, así como para el desa­rro­llo nacio­nal, en el Día Mun­dial del Agua, el 22 de mar­zo de este año.

“La fal­ta de acce­so a agua pota­ble y sanea­mien­to plan­tea un gra­ve ries­go para la salud, en par­ti­cu­lar para los niños, y una limi­ta­ción fun­da­men­tal para el desa­rro­llo de las nacio­nes del Pací­fi­co», planteó.

El alto fun­cio­na­rio ase­gu­ró en esa oca­sión que «si bien el acce­so al agua pota­ble y el sanea­mien­to es un dere­cho humano bási­co que muchos de noso­tros damos por sen­ta­do, es un dere­cho que actual­men­te se les nie­ga a más de dos ter­cios de los isle­ños del Pacífico».

Eso, afir­mó Min­chin, suce­de «espe­cial­men­te a los que viven en áreas rura­les, coamu­ni­da­des infor­ma­les en los már­ge­nes de las áreas urba­nas en cre­ci­mien­to de la región y en los cien­tos de peque­ñas islas espar­ci­das por el Pacífico”.

El agua corrien­te es un agen­te esen­cial, en este momen­to, en la bata­lla con­tra la covid-19, pero tam­bién en la reduc­ción de la pre­va­len­cia de enfer­me­da­des trans­mi­ti­das por el agua en las islas del Pací­fi­co, como la dia­rrea y el cóle­ra, que son enfer­me­da­des fata­les para los niños pequeños.

Y, en un peque­ño Esta­do insu­lar, como Tuva­lu, cuya suer­te está cada vez más vin­cu­la­da a la suer­te del cam­bio cli­má­ti­co, es impe­ra­ti­vo para el asen­ta­mien­to humano permanente.

“El agua es una cues­tión de super­vi­ven­cia para la gen­te de Tuva­lu, el agua es vida”, dijo Tini­lau en su diá­lo­go con IPS.

En el Pací­fi­co, es un pro­ble­ma de mayor mag­ni­tud en las comu­ni­da­des rura­les, don­de solo 44 por cien­to de las per­so­nas tie­ne acce­so al agua, en com­pa­ra­ción con 92 por cien­to en pue­blos y ciudades.

En Tuma­seu y Asau, en la isla de Vai­tu­pu, los resi­den­tes cuyos medios de vida se rela­cio­nan prin­ci­pal­men­te con la pes­ca, tie­nen acce­so a clí­ni­cas de salud y sanea­mien­to, pero la vida es un desa­fío sin una fuen­te de agua con­fia­ble y cons­tan­te en las comunidades.

Esto aho­ra va a cam­biar des­pués de que exper­tos téc­ni­cos de la Comu­ni­dad del Pací­fi­co se basa­ron en el cono­ci­mien­to tra­di­cio­nal que tenían los ancia­nos de las aldeas sobre dón­de se ubi­ca­ban las fuen­tes de agua de pozo y lle­va­ron a cabo inves­ti­ga­cio­nes cien­tí­fi­cas en 2014.

Como resul­ta­do, el poten­cial de agua sub­te­rrá­nea en la isla de Vai­tu­pu fue mapea­do y cuan­ti­fi­ca­do por pri­me­ra vez.

“Veri­fi­ca­mos dón­de dije­ron que esta­ría la ubi­ca­ción, los posi­bles sitios. Usa­mos tec­no­lo­gía en la que pasa­mos seña­les eléc­tri­cas al sue­lo y lue­go supi­mos exac­ta­men­te dón­de esta­ba el agua, el nivel del agua… Fue genial ver la cien­cia detrás del aná­li­sis que real­men­te prue­ba el cono­ci­mien­to local”, comen­tó Sale­sa a IPS.

Como habían dicho los ancia­nos, la capa de agua sub­te­rrá­nea dul­ce más amplia esta­ba en el extre­mo nor­te de la isla, cer­ca de la costa.

Lue­go, el con­se­jo de la isla diri­gió soli­ci­tu­des exi­to­sas para obte­ner fon­dos del Minis­te­rio de Rela­cio­nes Exte­rio­res y Comer­cio del gobierno de Nue­va Zelan­da para la cons­truc­ción de tan­ques ele­va­dos en el sitio del pozo y tube­rías para trans­por­tar agua direc­ta­men­te a las aldeas.

El plan es que el agua pota­ble esté dis­po­ni­ble en Tuma­seu y Asau para junio de 2022.

“Será muy bene­fi­cio­so imple­men­tar este pro­yec­to. Ayu­da­rá a mejo­rar el nivel de vida de las per­so­nas en ambas comu­ni­da­des. Hará una gran dife­ren­cia en los pro­ble­mas de salud”, sos­tu­vo Seleganiu.

Agre­gó que los aldea­nos tam­bién ten­drán más tiem­po para dedi­car­lo a la obten­ción de ingre­sos y acti­vi­da­des de desa­rro­llo comu­ni­ta­rio, sin el labo­rio­so tra­ba­jo de trans­por­tar sumi­nis­tros de agua por carretera.

T: MLM.

RV: EG

Fuen­te: https://​www​.ips​no​ti​cias​.net/​2​0​2​0​/​1​1​/​a​l​d​e​a​s​-​i​s​l​a​-​p​o​l​i​n​e​s​i​a​-​t​u​v​a​l​u​-​y​a​-​p​u​e​d​e​n​-​s​o​n​a​r​-​a​g​u​a​-​c​o​r​r​i​e​n​te/, Rebe­lión.

[Foto: Téc­ni­cos espe­cia­lis­tas miden la sali­ni­dad de los pozos de agua sub­te­rrá­nea en la isla de Vai­tu­pu, en el peque­ño Esta­do de Tuva­lu. Este mes se comien­za la cons­truc­ción de la red de tan­ques y tube­rías que a par­tir de 2022 trans­por­ta­rán agua pota­ble des­de el nor­te de la isla Vai­tu­pu a las 1500 per­so­nas que viven en las aldeas de Tuma­seu y Asau, en el sur. Cor­te­sía de la Comu­ni­dad del Pacífico]

Itu­rria /​Fuen­te

Artikulua gustoko al duzu? / ¿Te ha gustado este artículo?

Twitter
Facebook
Telegram

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *