Hego Euskal Herria no está libre de este mundo cada vez más desigual. Frente a los discursos autocomplacientes de los Gobiernos de Gasteiz e Iruñea, la realidad muestra el efecto devastador de dichas políticas en nuestro pueblo: aumenta el porcentaje de población en situación de pobreza más extrema y aumenta el de población en situación de ausencia de bienestar .
Sin olvidar el problema de la “pobreza oculta”: aquellas situaciones de pérdida de empleo, o de reducción de ingresos que se están afrontando desde la solidaridad familiar, cada vez más agotada y débil.
Una desigualdad que está abriendo una auténtica brecha entre generaciones, sexos y realidades laborales y económicas. Jóvenes, mujeres y trabajadoras y trabajadores pobres sumergidos en la precariedad son las principales víctimas. Frente a ellos unas políticas neoliberales que desde los gobiernos y patronales de Hego Euskal Herria no dudan en aplicar reformas laborales salvajes, recortar derechos sociales, reducir prestaciones económicas y poner freno a todo intento por establecer políticas fiscales progresivas y redistribuidoras de la riqueza.
Por ello desde LAB reclamamos compromisos reales para hacer frente a la desigualdad: servicios públicos gratuitos y universales, fiscalidad progresiva y lucha contra la evasión fiscal, aumentar el salario mínimo para alcanzar los 1100 euros tal y como marca la Carta Social Europea, creación y reparto de empleo de calidad, protección social y económica para todas las personas, reclamar instrumentos políticos y jurídicos para decidir como pueblo en favor de la igualdad y de una vida digna para todas las personas.