Un guardia civil reconoce en Facebook que realizaban pintadas en Sakana. «Que buenos momentos en nuestras incursiones con los botes de spray decorando la puta Barranca»», dice textualmente.
Las redes sociales son un foro abierto donde en numerosas ocasiones se cometen o reconocen delitos. Si ayer publicamos la fotografía de «Terminator», un guardia civil bastante conocido en Sakana por su brutalidad posando ante un cartel de Etxarri Aranatz, hoy hemos conocido que tiene una cuenta de Facebook y que en ella ha colgado, además de un numerosas fotografías de su vida privada, otra en la que posa de uniforme y armado en San Miguel de Aralar. Pero lo más llamativo son los comentarios que acompañan estas dos fotos, y es que algunos compañeros de este militar rememoran «los buenos tiempos» contando las «hazañas» en la Sakana. Así, uno de ellos, reconoce que eran ellos quienes realizaban pintadas en el valle navarro. Pintadas que en numerosas ocasiones tenían como objetivo atacar murales reivindicativos, monolitos a las víctimas del franquismo, dar vivas a España u otras de caracter todavía más fascista. Textualmente, el guardia civil dice: «Que buenos momentos en nuestras incursiones con los botes de spray decorando la puta Barranca», y otro tilda Etxarri como «ese pueblo símbolo de resistencia de la Guardia Civil frente a la hostilidad y a la sin razón del extremismo». Como confirmación de quienes realizan este tipo de pintadas en Sakana, el comentario de otro militar en la misma foto: «Pon el cartel en cristiano si te queda algún bote de spray de cuando la guerrilla psicológica.»
El guardia civil protagonista de toda esta historia dedica su foto a «todos los ex-combatientes» y añade «ni alde hemendik ni ospa eguna ni su puta madre, mas de 30 años de resistencia, ni un paso atras», y otros le animan con frases como «dales metralla» y «espero que este siempre cargada para esos hp», en referencia al arma del militar español. El mismo guardia civil que reconocía su implicación en las «incursiones» por la Sakana spray en mano, añade para finalizar «Que se jodan, alli estaremos hasta el final». Toda una declaración de intenciones que se enfrenta a la voluntad mayoritaria de un valle que rechaza a las fuerzas policiales españolas.