Ver las fotos de cientos de niños y de niñar asesinados por el criminal sionismo, ver las imágenes de un pueblo masacrado, privado de los más elementales derechos, ante la indiferencia mundial causa indignación e ira en el mundo entero. Al menos en el mundo decente. Las personas decentes, aunque no sean de izquierdas, estan rabiosas ante la impunidad con que Israel asesina y trata de masacrar a todo un pueblo.
Ocurre que las imágenes a que hacemos referencias no son nuevas. Hace tres años Israel ya era un estado criminal. Hace tres años ya habia asesinado a cientos de niños y miles de personas. Hace tres años cuando Jon Iñarritu junto a conocidos sionistas catalanes y galegos firmaba un manifiesto contra el boicot a Israel el nazisionismo ya tenia planificado el genocidio del pueblo palestino.
Iñarritu, militante de Aralar y parlamentario de Amaiur, ya conocía hace tres años que tipo de concepto tiene Israel de los precesos de liberación nacional y nos habló de semejante estado como «modelo» para Euskal Herria, Galiza y Catalunya. El mismo Iñarritu que en una reciente entrevista dijo que su sueño era una «Euskadi libre en la Unión Europea». Asumible por el PNV y la burguesia vasca. Perfectamente asumible. Ese es el modelo social de Iñarritu.
Un hombre que se escuda trás la ANP para justificar lo injustificable. El sabe que ni la ANP ni Hamas ni los grupos que dice ser palestinos y no estar de acuerdo con el boicot son toda Palestina. Palestina es un pueblo martir y en proceso de genocidio debido a que el pais que tanto le gusta, Israel, dice ser un «pueblo elegido» al cual un supuesto dios le prometió una tierra, Palestina.
Como el sabe perfectamente que el boicot es eficaz y hace daño a israel. Los dirigentes sionistas ya han mostrado preocupación por un metodo de lucha que fué eficaz contra el racismo de Sudafrica y que puede ser eficaz contra el racismo de su amado Israel.
Y el sabe perfectamente que la critica a su manifiesto es una critica a su actuación personal. Por eso trata de emponzoñar esa critica afirmando con ligereza que en realidad se trata de mal meter en las relaciones internas entre los grupos que forman EHBildu.
El gobierno de Israel miente y asesina. Iñarritu no responde a nada, Iñarritu se justifica y trata de justificar lo injustificable, el darle cobertura política a un régimen, el israelí, perfectamente homologable al nazi o al racista de Sudafrica, por mucho lavado de cara y publireportaje que le den en algunas webs «alternativas»
