Pro­pa­gan­da y mani­pu­la­ción mediá­ti­ca con­tra el régi­men boli­va­riano y sus polí­ti­cas ecó­no­mi­cas por par­te de los perió­di­cos Hoy y El Comer­cio de Ecua­dor- Dax Toscano


1. Intro­duc­ción

Duran­te 15 años, los medios de comu­ni­ca­ción al ser­vi­cio de la oli­gar­quía mun­dial y del impe­ria­lis­mo yan­qui han calum­nia­do al gobierno y pro­ce­so revo­lu­cio­na­rio boli­va­riano vene­zo­lano, como par­te de la gue­rra psi­co­ló­gi­ca de baja inten­si­dad que lle­van ade­lan­te para desestabilizarlo. 

La indus­tria mediá­ti­ca de la mani­pu­la­ción, de la alie­na­ción y la men­ti­ra no ha esca­ti­ma­do abso­lu­ta­men­te nada para crear una ima­gen nega­ti­va del gobierno boli­va­riano vene­zo­lano, de sus líde­res y de las polí­ti­cas que se han toma­do para empren­der un rum­bo dis­tin­to al que habían tra­za­do los gobier­nos ante­rio­res al del Coman­dan­te Hugo Rafael Chá­vez Frías, cuan­do fue ele­gi­do como pre­si­den­te en el año 1998. De igual mane­ra, han des­con­tex­tua­li­za­do la reali­dad y ter­gi­ver­sa­do las cau­sas gene­ra­do­ras de diver­sos pro­ble­mas que afron­ta el gobierno boli­va­riano y la pobla­ción vene­zo­la­na, sobre todo en mate­ria económica.

Los medios pri­va­dos de comu­ni­ca­ción ecua­to­ria­nos han juga­do un rol fun­da­men­tal en esta cam­pa­ña de des­pres­ti­gio, des­ta­cán­do­se los ata­ques de los perió­di­cos El Comer­cio y Hoy que actúan como ins­tru­men­tos de pro­pa­gan­da al ser­vi­cio de la dere­cha venezolana. 

¿Cuá­les son las razo­nes por las que los perió­di­cos El Comer­cio y Hoy de Ecua­dor se han suma­do a la cam­pa­ña de estig­ma­ti­za­ción, des­cré­di­to y sata­ni­za­ción del régi­men boli­va­riano venezolano?

La vin­cu­la­ción ideo­ló­gi­ca de los pro­pie­ta­rios de estos medios con los sec­to­res opues­tos a la cons­truc­ción de una socie­dad socia­lis­ta, expli­ca, en cier­ta medi­da, la opo­si­ción al pro­yec­to revo­lu­cio­na­rio en Venezuela. 

Ejem­pli­fi­ca­ti­vo de esto es la aren­ga dada en julio de 2009 por la Direc­to­ra Gene­ral del Gru­po El Comer­cio, Gua­da­lu­pe Man­ti­lla de Acqua­vi­va, quien dijo a sus emplea­dos: “Todos uste­des tie­nen su tra­ba­jo aquí, fir­me y segu­ro, pero si me hacen polí­ti­ca den­tro de la empre­sa ahí sí les digo: reac­cio­na­ré, aun­que sea de la tum­ba. Si uste­des quie­ren ser socia­lis­tas del Siglo XXI, hágan­lo, pero están pre­ve­ni­dos, vayan a hacer­lo a su casa”. Y aña­dió: “Esa supues­ta socie­dad social del siglo XXI no es más que lle­var­les a una dic­ta­du­ra como la de Chá­vez y la de Cas­tro.”[1]

El papel de la Socie­dad Inter­ame­ri­ca­na de Pren­sa (SIP), orga­ni­za­ción al ser­vi­cio de los due­ños de los medios de comu­ni­ca­ción en Amé­ri­ca Lati­na, tam­bién ha sido pri­mor­dial para la cam­pa­ña con­tra el régi­men boli­va­riano de Venezuela. 

Una de las prin­ci­pa­les auto­ri­da­des de este orga­nis­mo gre­mial de los empre­sa­rios mediá­ti­cos es Jai­me Man­ti­lla Ander­son, pro­pie­ta­rio y direc­tor gene­ral del perió­di­co Hoy de Ecuador. 

Las rela­cio­nes de estos per­so­na­jes con los pro­pie­ta­rios de los medios pri­va­dos vene­zo­la­nos que han ata­ca­do al gobierno del pre­si­den­te Hugo Chá­vez y aho­ra al de Nico­lás Madu­ro, es estre­cha. Las agre­sio­nes que se lan­zan con­tra el régi­men boli­va­riano son las mis­mas en el Nacio­nal o el Uni­ver­sal de Vene­zue­la que en El Comer­cio y Hoy de Ecuador. 

El obje­ti­vo de esta cam­pa­ña mediá­ti­ca es lograr la des­es­ta­bi­li­za­ción del gobierno boli­va­riano vene­zo­lano, des­truir su ima­gen ante los pue­blos y los colec­ti­vos socia­les, así como posi­cio­nar a los repre­sen­tan­tes de los gru­pos que se opo­nen al pro­yec­to revo­lu­cio­na­rio en Vene­zue­la, entre ellos a Hen­ri­que Capri­les Radons­ki, que lide­ra la opo­si­ción gol­pis­ta con­tra el pre­si­den­te Nico­lás Maduro. 

En el pre­sen­te tra­ba­jo se ana­li­za como los perió­di­cos El Comer­cio y Hoy de Ecua­dor lle­van ade­lan­te ésta cam­pa­ña mediá­ti­ca con­tra el régi­men boli­va­riano venezolano. 

Se toma como eje temá­ti­co de ésta inves­ti­ga­ción, la línea edi­to­rial y el mane­jo infor­ma­ti­vo que estos perió­di­cos lle­van ade­lan­te res­pec­to de la polí­ti­ca eco­nó­mi­ca de los gobier­nos de los pre­si­den­tes Hugo Rafael Chá­vez Frías y Nico­lás Maduro. 

2. Del mode­lo neo­li­be­ral al mode­lo bolivariano 

El mode­lo eco­nó­mi­co impe­ran­te en Vene­zue­la antes de la elec­ción del Coman­dan­te Hugo Rafael Chá­vez Frías, fue el del neo­li­be­ra­lis­mo sal­va­je. Tres gobier­nos pro­fun­di­za­ron la apli­ca­ción de este mode­lo que con­du­jo a un mayor empo­bre­ci­mien­to de la pobla­ción vene­zo­la­na: el de Jai­me Lusin­chi (1984−89), el de Car­los Andrés Pérez (1989−1993) y el de Rafael Cal­de­ra (1994−99), quie­nes en dos déca­das aca­ta­ron fiel­men­te las dis­po­si­cio­nes ema­na­das por el FMI. 

Fue bajo el gobierno de Car­los Andrés Pérez que la apli­ca­ción de dicho mode­lo se pro­fun­di­zó. Sus polí­ti­cas estu­vie­ron supe­di­ta­das a los dic­ta­dos de Washing­ton: “Los tér­mi­nos del Washing­ton Con­sen­sus eran el pan y el vino de las dos prin­ci­pa­les figu­ras del gobierno en lo que a refor­mas eco­nó­mi­cas se refie­re. Moi­sés Naím, minis­tro del Desa­rro­llo, y Miguel Rodrí­guez, minis­tro de Pla­ni­fi­ca­ción, eran niños pro­di­gio egre­sa­dos del MIT y de Yale”[2], seña­la el perio­dis­ta Richard Gott. 

La pri­va­ti­za­ción de empre­sas del Esta­do, la libe­ra­li­za­ción de los pre­cios, el incre­men­to gra­dual de las tari­fas de los ser­vi­cios bási­cos como agua, luz, telé­fono, gas domés­ti­co, el aumen­to del pre­cio de la gaso­li­na y de las tari­fas del trans­por­te públi­co, la eli­mi­na­ción de todas las res­tric­cio­nes comer­cia­les, de todos los con­tro­les de cam­bio, de los sub­si­dios masi­vos y de toda tra­ba a la inver­sión extran­je­ra, la crea­ción de fon­dos de pen­sio­nes y la rees­truc­tu­ra­ción del sis­te­ma de segu­ro social fue­ron las medi­das que el gobierno de Car­los Andrés Pérez tomó para afian­zar el mode­lo neo­li­be­ral en Venezuela.

Para 1990 la infla­ción alcan­zó el 40,6%, mien­tras la pobre­za extre­ma lle­gó al 24%.

El males­tar entre la pobla­ción se hizo evi­den­te y la pro­tes­ta social se generalizó. 

En 1989 el pue­blo se levan­ta en varias ciu­da­des de Vene­zue­la debi­do a la situa­ción de mise­ria en la que se encon­tra­ba. En Cara­cas, Mara­cay, Bar­qui­si­men­to, Valen­cia, Méri­da y Ciu­dad Gua­ya­na se pro­ta­go­ni­za­ron levan­ta­mien­tos popu­la­res, así como el saqueo de peque­ños abas­tos y super­mer­ca­dos. La res­pues­ta del gobierno de Car­los Andrés Pérez fue la repre­sión bru­tal. Se decre­tó el toque de que­da y la sus­pen­sión de las garan­tías cons­ti­tu­cio­na­les, mien­tras el paque­ta­zo eco­nó­mi­co con­tra el pue­blo era ratificado. 

Car­los Andrés Pérez dio la orden de dis­pa­rar con­tra el pue­blo. Entre el 27 y 28 de febre­ro de 1989 fue­ron ase­si­na­das más de dos mil per­so­nas por ele­men­tos de la Guar­dia Nacio­nal, el ejér­ci­to y la policía. 

Ante esta situa­ción cala­mi­to­sa, ofi­cia­les bajo el man­do del tenien­te coro­nel Hugo Chá­vez, cons­ti­tui­dos alre­de­dor del Movi­mien­to Boli­va­riano Revo­lu­cio­na­rio 200 (MBR-200) crea­do al inte­rior del ejér­ci­to vene­zo­lano, con­si­de­ra­ron pasar a una acción mili­tar con­tra el régi­men de Car­los Andrés Pérez.

El Coman­dan­te Hugo Chá­vez explicó: 

Cuan­do Car­los Andrés Pérez envió a la Fuer­za Arma­da a la calle a repri­mir aque­lla explo­sión social y hubo una masa­cre, los mili­ta­res boli­va­ria­nos del MBR-200 ana­li­za­mos que había­mos pasa­do el pun­to de no retorno y deci­di­mos que había que ir a las armas. No podía­mos seguir sien­do los can­cer­be­ros de un régi­men geno­ci­da. Ese acon­te­ci­mien­to fue un cata­li­za­dor del MBR-200. Comen­za­mos enton­ces a ace­le­rar la orga­ni­za­ción del Movi­mien­to, la bús­que­da de con­tac­tos con civi­les y movi­mien­tos popu­la­res, a pen­sar en la estra­te­gia, en la ideo­lo­gía, pero, sobre todo, en la estra­te­gia: el cómo hacer para tras­cen­der una situa­ción y bus­car una tran­si­ción hacia otra.[3]

El 4 de febre­ro de 1992, se pro­du­ce la insu­rrec­ción mili­tar. Este movi­mien­to insu­rrec­cio­nal con­tó con rela­ti­vo res­pal­do de los sec­to­res popu­la­res. Final­men­te, los insu­rrec­tos fue­ron derro­ta­dos y Hugo Chá­vez fue dete­ni­do. En una alo­cu­ción públi­ca, Chá­vez, quien asu­mió la res­pon­sa­bi­li­dad de dicho movi­mien­to, hizo un lla­ma­do a sus com­pa­ñe­ros de armas para que cesen las hos­ti­li­da­des pues­to que “por aho­ra” no se habían podi­do con­cre­tar los obje­ti­vos.

En 1994 asu­me la pre­si­den­cia de Vene­zue­la Rafael Cal­de­ra, quien con­ti­nuó con las polí­ti­cas de su ante­ce­sor. Cal­de­ra apli­có la Agen­da Vene­zue­la, median­te la cual pro­pi­ció la subi­da del pre­cio de la gaso­li­na, de la trans­por­ta­ción, la liqui­da­ción de las empre­sas de avia­ción Aero­pos­tal y Via­sa así como la pri­va­ti­za­ción de la empre­sa sali­ne­ra Ensal. La pobre­za alcan­zó la cifra del 70% bajo el gobierno de Cal­de­ra y la pobre­za extre­ma el 42%. 

Para 1997, Hugo Chá­vez, que había sali­do en liber­tad gra­cias al indul­to dado por el pre­si­den­te Cal­de­ra en 1994, deci­de for­mar un movi­mien­to polí­ti­co para la par­ti­ci­pa­ción en las elec­cio­nes pre­si­den­cia­les. El 19 de abril de 1997 se cons­ti­tu­ye el Movi­mien­to Quin­ta Repú­bli­ca (MVR).

El MVR plan­teó la recu­pe­ra­ción del petró­leo para los vene­zo­la­nos a tra­vés de una polí­ti­ca nacio­na­lis­ta y sobe­ra­na, la rees­truc­tu­ra­ción del Esta­do, una nue­va defi­ni­ción de la polí­ti­ca edu­ca­ti­va, cien­tí­fi­ca, tec­no­ló­gi­ca y cul­tu­ral, la revi­sión del pago de la deu­da exter­na y la implan­ta­ción de polí­ti­cas socia­les en bene­fi­cio del pue­blo. Hugo Chá­vez se plan­teó la refun­da­ción de la Repú­bli­ca y una de sus pro­pues­tas, de lle­gar a ganar las elec­cio­nes, fue lla­mar a una Asam­blea Cons­ti­tu­yen­te para ela­bo­rar una nue­va cons­ti­tu­ción, don­de se esta­blez­can los prin­ci­pios de esa nue­va Repú­bli­ca. Chá­vez fue con­tun­den­te en sus crí­ti­cas al neo­li­be­ra­lis­mo y al mode­lo de la par­ti­do­cra­cia tra­di­cio­nal, corrup­ta y oli­gár­qui­ca en Venezuela. 

El 6 de diciem­bre de 1998 Chá­vez gana las elec­cio­nes pre­si­den­cia­les con el 56% de los votos. Jura ante la “mori­bun­da” y, una vez pose­sio­na­do, hace un lla­ma­do al pue­blo para que aprue­be, median­te refe­rén­dum, la con­for­ma­ción de la Asam­blea Constituyente. 

El nue­vo pro­yec­to de cons­ti­tu­ción que sur­gió de esa Asam­blea, fue apro­ba­do por el pue­blo el 15 de diciem­bre de 1999 con el 71% de los votos. 

Nació así la “Quin­ta Repú­bli­ca”, ampa­ra­da en los idea­les del Liber­ta­dor Simón Bolí­var, opues­ta al mode­lo neo­li­be­ral y dis­pues­ta a avan­zar en la cons­truc­ción de una socie­dad más demo­crá­ti­ca, más jus­ta y más huma­na.

3. El ata­que mediá­ti­co con­tra las polí­ti­cas eco­nó­mi­cas del régi­men boli­va­riano venezolano

El gobierno de la Repú­bli­ca Boli­va­ria­na de Vene­zue­la está enfren­ta­do a una gue­rra eco­nó­mi­ca des­ata­da por el impe­ria­lis­mo yan­qui y la oli­gar­quía de ese país que, a toda cos­ta, pre­ten­de boi­co­tear el avan­ce de la revolución. 

Des­de el año 2001, cuan­do la Asam­blea Nacio­nal apro­bó un paque­te de 49 leyes ela­bo­ra­das por el gobierno del pre­si­den­te Chá­vez en bene­fi­cio del pue­blo y la sobe­ra­nía nacio­nal, la oli­gar­quía crio­lla vene­zo­la­na y el impe­ria­lis­mo empren­die­ron una bru­tal cam­pa­ña para des­es­ta­bi­li­zar al régi­men chavista:

Estas leyes desa­rro­llan entre otros aspec­tos la refor­ma agra­ria, la garan­tía de sobe­ra­nía sobre el petró­leo, la pro­tec­ción de la pes­ca arte­sa­nal, el orde­na­mien­to sus­ten­ta­ble del lito­ral, la res­pon­sa­bi­li­dad social de las enti­da­des finan­cie­ras y el impul­so al cooperativismo.

A par­tir de enton­ces, el poder eco­nó­mi­co, los par­ti­dos de dere­cha y los medios de comu­ni­ca­ción ade­lan­ta­ron una cam­pa­ña anti­de­mo­crá­ti­ca para des­es­ta­bi­li­zar a la nacien­te repú­bli­ca, con el apo­yo encu­bier­to de gobier­nos extran­je­ros.[4]

El gol­pe fas­cis­ta del 11 abril de 2002 fue la expre­sión cri­mi­nal del recha­zo de la oli­gar­quía vene­zo­la­na y el impe­ria­lis­mo a las leyes que el gobierno boli­va­riano desa­rro­lló en defen­sa de los intere­ses del país y del pue­blo, como la Ley de Tie­rras, la Ley de Pes­ca, la Ley de Hidro­car­bu­ros entre otras. 

Teo­do­ro Gue­va­ra y Artu­ro Vega, en un tra­ba­jo publi­ca­do el 21 de noviem­bre de 2002 en el por­tal web Rebe­lión, con el títu­lo: “Ley de tie­rra y ley de pes­ca: leyes para supe­rar la pobre­za y la depen­den­cia”[5], expli­can las razo­nes de la oli­gar­quía para opo­ner­se a dichos cuer­pos legales: 

Has­ta ese momen­to 8 fami­lias de terra­te­nien­tes poseían alre­de­dor de 150 mil hec­tá­reas de terreno. Muchos de esos fun­dos se encon­tra­ban ocio­sos o semiocio­sos. Muchos terra­te­nien­tes no habían podi­do com­pro­bar la pro­pie­dad legí­ti­ma de la tie­rra y muchos poseían títu­los fal­sos. El gobierno revo­lu­cio­na­rio, median­te la ley, esta­ble­ció el cobro de un impues­to por la ocio­si­dad en que las tie­rras se halla­ban has­ta ese momen­to. Esos sec­to­res, dicen Teo­do­ro Gue­va­ra y Artu­ro Vega, son los que vivían de la ganan­cia para­si­ta­ria y fácil, median­te la crian­za de gana­do en tie­rras ópti­mas para la agri­cul­tu­ra, sin desa­rro­llar este últi­mo ren­glón. Sec­to­res que vivían de los sub­si­dios del Esta­do, sin ren­dir cuen­tas sobre los mis­mos. La ley puso un freno a esa situa­ción, ade­más de esta­ble­cer un con­jun­to de avan­ces para el for­ta­le­ci­mien­to del movi­mien­to cam­pe­sino, la segu­ri­dad ali­men­ta­ria y el desa­rro­llo del apa­ra­to pro­duc­ti­vo, pro­pi­cian­do la crea­ción de coope­ra­ti­vas y otras for­mas de aso­cia­ción, así como pro­por­cio­nán­do­les ayu­da finan­cie­ra y téc­ni­ca. De igual mane­ra la ley posi­bi­li­tó el repar­to más equi­ta­ti­vo de la tie­rra por medio del Ins­ti­tu­to Nacio­nal de Tierras. 

Por su par­te la Ley de Pes­ca fijó lími­tes para la pes­ca indus­trial y de arras­tre con el obje­ti­vo de redu­cir los daños al eco­sis­te­ma marí­ti­mo y de esa mane­ra bene­fi­ciar el tra­ba­jo del pes­ca­dor arte­sa­nal. De igual mane­ra, en dicho cuer­po legal se esta­ble­cie­ron un sin­nú­me­ro de dis­po­si­cio­nes para pro­te­ger a los tri­pu­lan­tes de las embar­ca­cio­nes pes­que­ras, reco­no­cien­do sus dere­chos socia­les y labo­ra­les, expli­can los auto­res men­cio­na­dos.

La Ley de Hidro­car­bu­ros, median­te la cual se recu­pe­ró el petró­leo para el pue­blo vene­zo­lano, afec­tó por su par­te los intere­ses de la “meri­to­cra­cia” corrup­ta enquis­ta­da en la empre­sa vene­zo­la­na de petró­leos (PDVSA), así como los intere­ses eco­nó­mi­cos del impe­ria­lis­mo yan­qui, quie­nes des­pués del gol­pe de abril de 2002, en diciem­bre del mis­mo año e ini­cios de 2003, sabo­tea­ron la indus­tria petrolera. 

Impul­sa­dos una vez más por los medios pri­va­dos de comu­ni­ca­ción vene­zo­la­nos, los gol­pis­tas inten­ta­ron la des­es­ta­bi­li­za­ción del régi­men boli­va­riano cuan­do con­vo­ca­ron a para­li­zar las acti­vi­da­des eco­nó­mi­cas y a boi­co­tear la indus­tria del petróleo.

El paro petro­le­ro y empre­sa­rial, res­pal­da­do por geren­tes, admi­nis­tra­do­res de PDVSA, así como por diri­gen­tes sin­di­ca­les corrup­tos y la aris­to­cra­cia obre­ra, dejó pér­di­das a la nación por el orden de los 20 mil millo­nes de dólares.

El 2 de diciem­bre de 2002, Fede­cá­ma­ras, la CTV (Con­fe­de­ra­ción de Tra­ba­ja­do­res de Vene­zue­la) y la “Coor­di­na­do­ra Demo­crá­ti­ca” lla­man a un nue­vo “paro cívi­co nacio­nal”. Tres días des­pués la deno­mi­na­da “meri­to­cra­cia” del petró­leo ini­cia uno de los ata­ques más duros a la eco­no­mía vene­zo­la­na y se suma al paro cuan­do la tri­pu­la­ción del buque Pilín León se decla­ra en rebel­día y fon­dea en el lago de Mara­cai­bo el 5 de diciembre.

Al Pilín León lo imi­tan 10 buques más, entre el 5 y 17 de diciem­bre, fon­dea­dos en diver­sos puer­tos petro­le­ros del país, hecho que afec­to al sumi­nis­tro de cru­do nacio­nal e inter­na­cio­nal. Simul­tá­nea­men­te las refi­ne­rías El Pali­to, Puer­to la Cruz y Para­gua­ná fue­ron para­li­za­das en su tota­li­dad.[6]

Los Esta­dos Uni­dos tie­nen como obje­ti­vo apo­de­rar­se de las reser­vas petro­le­ras de Vene­zue­la y para ello acu­den al sabo­ta­je eco­nó­mi­co, a la des­es­ta­bi­li­za­ción polí­ti­ca y al uso de la pro­pa­gan­da negra para ata­car al pro­ce­so revo­lu­cio­na­rio en Vene­zue­la. (…) emplean sus enor­mes recur­sos mediá­ti­cos para tra­tar de hun­dir al Gobierno Revo­lu­cio­na­rio Boli­va­riano en un mar de men­ti­ras y calum­nias. Lo que los yan­kis quie­ren es el petró­leo de Vene­zue­la”[7] seña­ló el Coman­dan­te Fidel Cas­tro, en una refle­xión publi­ca­da el 27 de sep­tiem­bre de 2010 con el títu­lo “Lo que quie­ren es el petró­leo de Venezuela”.

El direc­tor de la CIA bajo el gobierno de W. Bush, Geor­ge Tenet, ante el Comi­té de Inte­li­gen­cia del Sena­do de EEUU, mani­fes­ta­ba en 2002 su “preo­cu­pa­ción” por la segu­ri­dad en Amé­ri­ca Lati­na, espe­cial­men­te sobre Venezuela:

Estoy par­ti­cu­lar­men­te preo­cu­pa­do por Vene­zue­la, nues­tro ter­cer mayor pro­vee­dor de petró­leo. La insa­tis­fac­ción domés­ti­ca con la revo­lu­ción boli­va­ria­na del pre­si­den­te Chá­vez está cre­cien­do, las con­di­cio­nes eco­nó­mi­cas se han dete­rio­ra­do con la caí­da de los pre­cios del petró­leo, y la atmós­fe­ra de cri­sis pro­ba­ble­men­te va a empeo­rar.[8]

Las reser­vas actua­les de petró­leo en Vene­zue­la se ubi­can en 296.500 millo­nes de barri­les, lo que repre­sen­ta el 18% de los recur­sos mun­dia­les, dice un infor­me de la petro­le­ra Bri­tish Petro­leum, mien­tras que el Minis­te­rio del Poder Popu­lar para la Ener­gía y el Petró­leo de Vene­zue­la seña­la que dichas reser­vas ascien­den a 297.570 millo­nes de barri­les.[9] Vene­zue­la cons­ti­tu­ye en la actua­li­dad el país con mayo­res reser­vas mun­dia­les de oro negro.

La gue­rra eco­nó­mi­ca con­tra el gobierno boli­va­riano se remon­ta a esos momen­tos. El impac­to social y sico­ló­gi­co con­tra la pobla­ción fue duro y las pér­di­das pro­vo­ca­das con­tra el país fue­ron millonarias:

Duran­te diciem­bre de 2002 y los pri­me­ros meses de 2003, el sabo­ta­je petro­le­ro pro­mo­vi­do por sec­to­res anti­na­cio­na­les tra­jo como con­se­cuen­cia una dis­mi­nu­ción abrup­ta de las prin­ci­pa­les acti­vi­da­des eco­nó­mi­cas del país y secue­las tan­to para la cor­po­ra­ción como para la socie­dad vene­zo­la­na. Estu­dios del Minis­te­rio de Finan­zas y el Ban­co Cen­tral de Vene­zue­la seña­lan los siguien­tes datos: 

El mon­to de las pér­di­das por ven­tas no rea­li­za­das lle­gó a 14 430 millo­nes de dóla­res apro­xi­ma­da­men­te, lo cual moti­vó una dis­mi­nu­ción de un mon­to cer­cano a 9 998 millo­nes de dóla­res en la capa­ci­dad con­tri­bu­ti­va de PDVSA y sus filia­les al fis­co nacio­nal. Esto limi­tó la capa­ci­dad del Eje­cu­ti­vo Nacio­nal para la eje­cu­ción de sus pla­nes y programas.

El Pro­duc­to Interno Bru­to (PIB) del país regis­tró una caí­da de 15,8 % duran­te el cuar­to tri­mes­tre de 2002, y de 24, 9%, duran­te el pri­mer tri­mes­tre de 2003. En el sec­tor petro­le­ro la caí­da del PIB fue de 25,9% y 39,3% respectivamente. 

Se regis­tró igual­men­te una con­trac­ción en los mon­tos de las Reser­vas Inter­na­cio­na­les en Divi­sas y del Fon­do para la Esta­bi­li­za­ción Macro­eco­nó­mi­ca, lo cual obli­gó al Eje­cu­ti­vo Nacio­nal, con­jun­ta­men­te con el Ban­co Cen­tral de Vene­zue­la, a dic­tar las medi­das para esta­ble­cer un sis­te­ma de con­trol de cam­bios, con el fin de ate­nuar los efec­tos nega­ti­vos sobre la eco­no­mía nacional.

En tér­mi­nos mone­ta­rios, se obser­vó un aumen­to en el efec­ti­vo de 26%, una caí­da de los depó­si­tos ban­ca­rios de 8%, aumen­to 4,5 pun­tos por­cen­tua­les en la tasa acti­va y una amplia­ción del mar­gen de tasas de 4,1 pun­tos por­cen­tua­les.[10]

Para ese momen­to, perió­di­cos como El Comer­cio de Ecua­dor, se limi­ta­ban a seña­lar que lo que en Vene­zue­la exis­tía era un enfren­ta­mien­to entre “cha­ve­cis­tas y anti­cha­ve­cis­tas”, mien­tras sus titu­la­res y el cuer­po de las noti­cias no hacían refe­ren­cia a la situa­ción con­cre­ta del boi­cot eco­nó­mi­co, sino que se limi­ta­ban a pre­sen­tar­lo como un “paro anti-Chá­vez” don­de los res­pon­sa­bles de la situa­ción de males­tar pro­vo­ca­da en el país, así como las cau­sas reales de dicho paro, el perió­di­co El Comer­cio jamás se atre­vió a iden­ti­fi­car­los y señalarlas.

“El paro anti-Chá­vez aso­la Vene­zue­la” (El Comer­cio, 5 de enero de 2003), “La ban­ca plie­ga al paro anti-Chá­vez” (El Comer­cio, 9 de enero de 2003), “El paro anti-Chá­vez entra en su día 44” (El Comer­cio, 14 de enero de 2003), “El paro anti-Chá­vez entra en su día 60” (El Comer­cio, 30 de enero de 2003) son algu­nos de los títu­los que en ese momen­to se publicaron. 

El 12 de enero de 2003 El Comer­cio publi­ca una noti­cia des­con­tex­tua­li­za­da con el títu­lo: “Chá­vez advier­te a los empre­sa­rios”, don­de cla­ra­men­te se pre­ten­de pre­sen­tar al enton­ces man­da­ta­rio vene­zo­lano como auto­ri­ta­rio y repre­si­vo, dejan­do de lado la res­pon­sa­bi­li­dad de esos empre­sa­rios en la esca­sez de pro­duc­tos ali­men­ti­cios y la nece­si­dad de hacer­les fren­te para evi­tar males­tar a la pobla­ción. Dice la noti­cia: “Mili­ta­ri­za­ción de la indus­tria ali­men­ti­cia. Esa adver­ten­cia lan­zó el pre­si­den­te vene­zo­lano, Hugo Chá­vez, a los empre­sa­rios como mane­ra de con­tra­rres­tar el des­abas­te­ci­mien­to de pro­duc­tos que empie­za a sen­tir­se en el país, tras 40 días de ‘paro cívi­co’” y aña­de: “La adver­ten­cia pre­si­den­cial fue par­te de una alo­cu­ción de más de una hora trans­mi­ti­da en cade­na de radio y tele­vi­sión, la cuar­ta en lo que va de la sema­na”. Nóte­se como la “noti­cia” pone énfa­sis en cues­tio­nes for­ma­les con el pro­pó­si­to de crear una ima­gen nega­ti­va del man­da­ta­rio res­pec­to del uso de los tiem­pos de las cade­nas de radio y tele­vi­sión, sin preo­cu­par­se de lo esen­cial del dis­cur­so del pre­si­den­te Chá­vez. Al sabo­ta­je petro­le­ro se le lla­ma “paro cívi­co”, hacién­do­lo ver de esta mane­ra como un acto noble, lle­va­do a cabo por la ciu­da­da­nía, por el pue­blo que se levan­ta para recla­mar sus derechos. 

El miér­co­les 19 de febre­ro de 2003, el perió­di­co El Comer­cio publi­ca un edi­to­rial de Manuel Terán con el títu­lo “La liber­tad en aprie­tos” en el que dice: 

El autó­cra­ta no cree más que en sí mis­mo y en sus adu­la­do­res que se con­vier­ten en su reso­nan­cia. Fue­ra de ese círcu­lo todos son sos­pe­cho­sos a los que hay que com­ba­tir. Ese es el dolo­ro­so caso de Vene­zue­la en don­de el líder del Gobierno que ha lle­va­do a ese país a la cri­sis más gran­de que recuer­da su his­to­ria, en don­de a pesar de con­tar con ingen­tes recur­sos petro­le­ros ha logra­do pre­ci­pi­tar duran­te su ges­tión de cua­tro años una caí­da equi­va­len­te a alre­de­dor del 25 por cien­to de su PIB, aco­rra­la­do por una opi­nión públi­ca aho­ra mayo­ri­ta­ria­men­te en su con­tra, pre­ten­de sitiar a la pren­sa libre a la que acu­sa del des­ca­la­bro sufri­do por esa nación, que no es sino con­se­cuen­cia de sus des­afor­tu­na­das inter­ven­cio­nes, lle­nas de mati­ces ter­cer­mun­dis­tas y apo­lo­gías a enemi­gos del Pri­mer Mun­do, que no ven en él sino una des­co­lo­ri­da cari­ca­tu­ra de un per­so­na­je de nove­la pro­pia del rea­lis­mo mági­co.

El gobierno boli­va­riano vene­zo­lano, des­de hace 15 años, se enfren­ta a estos ata­ques mediá­ti­cos que, median­te el ocul­ta­mien­to de la reali­dad, pre­ten­den pre­sen­tar­lo como el úni­co res­pon­sa­ble de la cri­sis eco­nó­mi­ca que vive Venezuela. 

Gue­rra eco­nó­mi­ca y gue­rra mediá­ti­ca for­man par­te del mis­mo plan des­es­ta­bi­li­za­dor de la oli­gar­quía vene­zo­la­na y el impe­ria­lis­mo con­tra el pro­ce­so revo­lu­cio­na­rio en Venezuela. 

A esta pro­ble­má­ti­ca se suma el hecho de que el pro­ce­so boli­va­riano está enfren­ta­do a un dile­ma res­pec­to del mode­lo polí­ti­co y eco­nó­mi­co que pre­ten­de cons­truir. El pro­ble­ma tie­ne que ver con el hecho de que no pue­de pen­sar­se en el cam­bio radi­cal de la socie­dad, sin afec­tar las bases que sos­tie­nen al vie­jo mode­lo eco­nó­mi­co y esta­tal capitalista. 

Tan­to el extin­to pre­si­den­te Hugo Chá­vez, como el actual man­da­ta­rio vene­zo­lano Nico­lás Madu­ro, han plan­tea­do la nece­si­dad de avan­zar en la cons­truc­ción de una socie­dad socia­lis­ta. Sin embar­go, duran­te estos quin­ce años no se han toma­do las medi­das nece­sa­rias para nacio­na­li­zar la eco­no­mía y de esa mane­ra tomar el con­trol de la pro­duc­ción y dis­tri­bu­ción de ali­men­tos a nivel nacio­nal, así como del comer­cio exterior. 

Si la oli­gar­quía vene­zo­la­na con­ti­núa con el con­trol de la eco­no­mía, la revo­lu­ción boli­va­ria­na corre el serio ries­go de enfren­tar­se a una situa­ción caó­ti­ca que le sig­ni­fi­ca­ría la pér­di­da de apo­yo entre el pue­blo, al man­te­ner intran­qui­li­dad entre la pobla­ción en mate­ria eco­nó­mi­ca, así como por dejar impu­ne el sis­te­ma pro­duc­ti­vo capitalista. 

La solu­ción no pasa sola­men­te por empren­der una lucha fron­tal con­tra la corrup­ción, la cual es nece­sa­ria e intrín­se­ca al sis­te­ma oli­gár­qui­co, capi­ta­lis­ta. Lo que hay que afec­tar son las bases que lo sus­ten­tan y eso solo se pue­de hacer median­te el con­trol por par­te de la cla­se tra­ba­ja­do­ra de los medios de producción. 

No se pue­de pen­sar en la cons­truc­ción de una socie­dad socia­lis­ta, con­ci­lian­do con los sec­to­res de la burguesía. 

La oli­gar­quía vene­zo­la­na, en con­tu­ber­nio con el impe­ria­lis­mo, no cesa­rán sus ata­ques, mucho menos si man­tie­ne toda­vía el con­trol sobre pun­tos cla­ves de la eco­no­mía.

Jor­ge Mar­tín explica: 

El capi­ta­lis­mo no pue­de ser regu­la­do. La oli­gar­quía no deten­drá su cons­pi­ra­ción con­tra la revo­lu­ción. Con el fin de evi­tar una mayor dis­lo­ca­ción y sabo­ta­je de la eco­no­mía, los medios de pro­duc­ción, los ban­cos y las gran­des hacien­das de los terra­te­nien­tes deben ser expro­pia­dos y pues­tos bajo el con­trol de los tra­ba­ja­do­res, para que pue­dan ser incor­po­ra­dos a un plan demo­crá­ti­co de la eco­no­mía. Esto sig­ni­fi­ca­ría un enfren­ta­mien­to fron­tal con la bur­gue­sía y el impe­ria­lis­mo, que sólo se pue­de ganar median­te la más amplia movi­li­za­ción de las masas revo­lu­cio­na­rias, con la cla­se obre­ra a su cabe­za. Para que esto sea posi­ble debe haber una pur­ga a fon­do del ala dere­cha y de los ele­men­tos corrup­tos e infil­tra­dos den­tro movi­mien­to boli­va­riano, y que todo el movi­mien­to sea pues­to bajo el con­trol de la base revo­lu­cio­na­ria y le rin­da cuen­tas a ella. Este es el úni­co camino a seguir. Cual­quier inten­to de con­ci­liar con la cla­se domi­nan­te sólo con­du­ci­rá a más sabo­ta­jes y ofen­si­vas con­tra­rre­vo­lu­cio­na­rias. Esta es la dis­yun­ti­va que está plan­tea­da des­pués de esta vic­to­ria elec­to­ral.[11]

El gobierno boli­va­riano vene­zo­lano, con áni­mo con­ci­lia­dor, en diver­sas oca­sio­nes ha hecho lla­ma­dos a los empre­sa­rios a que invier­tan, para lo cual inclu­so se ha fle­xi­bi­li­za­do el con­trol de pre­cios y de divi­sas, así como se han eli­mi­na­do impues­tos a las tran­sac­cio­nes finan­cie­ras. El resul­ta­do ha sido el de que dichos empre­sa­rios no han inver­ti­do y más bien han pro­vo­ca­do mayo­res daños a la eco­no­mía popular. 

Mien­tras la gran indus­tria mediá­ti­ca al ser­vi­cio del impe­ria­lis­mo y la oli­gar­quía vene­zo­la­na cons­tan­te­men­te acu­sa al régi­men boli­va­riano de poner todo tipo de fre­nos a la inver­sión pri­va­da, ocul­ta que la bur­gue­sía no está intere­sa­da en inver­tir en el país bajo el gobierno revo­lu­cio­na­rio, a la vez que silen­cia que en Vene­zue­la exis­te una ver­da­de­ra huel­ga de capi­ta­les y que la oli­gar­quía está man­dan­do el dine­ro al extran­je­ro. Manuel Suther­land dice que en “Vene­zue­la el 97% de las divi­sas las gene­ra el sec­tor esta­tal de la eco­no­mía”, mien­tras el total del “empre­sa­ria­do solo expor­ta un famé­li­co 3% (…) del total de divi­sas que ingre­san al país”.[12]

Las orga­ni­za­cio­nes de la patro­nal vene­zo­la­na: Fede­cá­ma­ras, Con­se­co­mer­cio y Venam­cham han boi­co­tea­do la revo­lu­ción por­que están en abier­ta con­tra­dic­ción con ella y no des­can­sa­rán has­ta ver­la derro­ta­da. La estra­te­gia adop­ta­da por estas orga­ni­za­cio­nes es la mis­ma que lle­va­ron ade­lan­te en Chi­le en la déca­da de 1970 con­tra el gobierno popu­lar del pre­si­den­te Sal­va­dor Allende. 

La con­ci­lia­ción no pue­de dar­se con los enemi­gos del pro­ce­so de trans­for­ma­ción de la socie­dad capitalista. 

William Sana­bria expli­ca­ba el 30 de octu­bre de 2008, en un artícu­lo titu­la­do “Vene­zue­la: la rana, el ala­crán y los empre­sa­rios patrio­tas… ¡qué jamás exis­ti­rán!” el com­por­ta­mien­to de los empre­sa­rios en la eco­no­mía venezolana: 

Según la “Encues­ta de Coyun­tu­ra Indus­trial” rea­li­za­da en Junio de este año por la aso­cia­ción empre­sa­rial Con­in­dus­tria y la con­sul­to­ría Lucas Con­sul­to­res, que inves­ti­ga el com­por­ta­mien­to de los empre­sa­rios a lo lar­go del pri­mer tri­mes­tre de 2008 y sus pers­pec­ti­vas de inver­sión para lo que res­ta de año: sólo un 5 % de los empre­sa­rios mani­fies­ta haber inver­ti­do en nue­vas ins­ta­la­cio­nes o tener la inten­ción de hacer­lo. Este es pre­ci­sa­men­te el tipo de inver­sión que sugie­re cier­ta dis­po­si­ción a ampliar seria­men­te la pro­duc­ción y crear nue­vos pues­tos de tra­ba­jo. El 47% mani­fies­tan haber inver­ti­do o estar dis­pues­tos a inver­tir úni­ca­men­te en maqui­na­ria. Este con­cep­to indi­ca que quie­ren apro­ve­char el empu­je de un con­su­mo que, aun­que des­ace­le­ra­do, toda­vía man­tie­ne cier­to impul­so pero has­ta ahí. Este tipo de inver­sión no sue­le crear nue­vo empleo en can­ti­da­des apre­cia­bles sino incre­men­tar la explo­ta­ción de los tra­ba­ja­do­res que ya exis­ten. Inclu­so, en la gran mayo­ría de casos, lo que aca­ba sig­ni­fi­can­do es sus­ti­tu­ción de mano de obra por máqui­nas más avan­za­das que per­mi­tan redu­cir el núme­ro de tra­ba­ja­do­res, los cos­tes y maxi­mi­zar los bene­fi­cios, incre­men­tan­do la plus­va­lía que se extrae por cada tra­ba­ja­dor. El 30% res­tan­te de los encues­ta­dos son (con per­dón) aún «más arre­chos»: mani­fies­tan que no han inver­ti­do nada ni pien­san hacer­lo.[13]

Ya en ese año, los empre­sa­rios capi­ta­lis­tas daban rien­da suel­ta a la subi­da de pre­cios de los pro­duc­tos para afec­tar la eco­no­mía popu­lar, mien­tras la gran indus­tria mediá­ti­ca acu­sa­ba al gobierno del pre­si­den­te Chá­vez de inefi­cien­cia eco­nó­mi­ca sin expli­car en abso­lu­to la “huel­ga de capitales”. 

Sana­bria expre­sa que: 

La cau­sa fun­da­men­tal de las subi­das de pre­cios que están diez­man­do la capa­ci­dad adqui­si­ti­va de los tra­ba­ja­do­res y los sec­to­res popu­la­res no es otra, como ya hemos dicho, que la nega­ti­va de los capi­ta­lis­tas a inver­tir. Con­tra esto sólo hay dos cami­nos: o expro­piar las empre­sas y rique­zas que, crea­das con el tra­ba­jo del con­jun­to de la socie­dad, estos seño­res se nie­gan a poner en mar­cha por­que no les pro­por­cio­nan el mar­gen de bene­fi­cios que con­si­de­ran nece­sa­rio; o ceder a la pre­sión de estos pará­si­tos y acep­tar sus deman­das: exen­cio­nes fis­ca­les, ayu­das, subi­das de pre­cios…[14]

Pese a esta reali­dad, los medios pri­va­dos de comu­ni­ca­ción no cesan los ata­ques con­tra el régi­men boli­va­riano al que se le acu­sa de inefi­cien­cia, de ser el res­pon­sa­ble de la corrup­ción, así como de la fal­ta de inte­rés y deci­sión para resol­ver los pro­ble­mas eco­nó­mi­cos de la población. 

La gue­rra eco­nó­mi­ca se expre­sa en el sabo­teo del pro­ce­so de pro­duc­ción y abas­te­ci­mien­to de pro­duc­tos en el mer­ca­do nacio­nal para la pobla­ción en general.

Des­abas­te­ci­mien­to pla­ni­fi­ca­do, espe­cu­la­ción, aca­pa­ra­mien­to, aumen­to de pre­cios han pro­vo­ca­do los sec­to­res de la oli­gar­quía vene­zo­la­na para afec­tar la situa­ción eco­nó­mi­ca y ali­men­ti­cia de la pobla­ción venezolana. 

Los medios pri­va­dos de comu­ni­ca­ción pri­va­dos tan­to en Vene­zue­la como en el res­to del mun­do, no dicen una pala­bra sobre el papel de la oli­gar­quía vene­zo­la­na: ban­que­ros, indus­tria­les y terra­te­nien­tes que toda­vía tie­nen poder polí­ti­co y eco­nó­mi­co para boi­co­tear la revo­lu­ción. Toda la res­pon­sa­bi­li­dad, para ellos, recae sobre el gobierno revolucionario. 

En esta cam­pa­ña mediá­ti­ca con­tra el régi­men boli­va­riano, la gran pren­sa inter­na­cio­nal jue­ga un rol impor­tan­te, des­ta­cán­do­se en el Ecua­dor los perió­di­cos Hoy y El Comer­cio.

Un vis­ta­zo a edi­to­ria­les publi­ca­dos en 2013 por el perió­di­co Hoy de Ecua­dor evi­den­cia dicho posi­cio­na­mien­to, pero ade­más la cam­pa­ña de des­pres­ti­gio del gobierno boli­va­riano y sus polí­ti­cas económicas.

Tha­lía Flo­res, el 11 de abril de 2013 en un edi­to­rial titu­la­do “El extra­ño caso de Hugo Chá­vez” dice: 

Las cifras son atro­ces: Entre 2000 y 2011 Vene­zue­la ha per­di­do casi un millón de barri­les dia­rios de petró­leo. La mone­da está en caí­da libre: en sep­tiem­bre pasa­do, en el mer­ca­do negro se cam­bia­ba un dólar por 11 bolí­va­res, aho­ra por 25. A fin de año, la infla­ción podría lle­gar al 33% y hay esca­sez de leche, café, acei­te y otros pro­duc­tos bási­cos. Para rema­tar, la vio­len­cia cre­ce. En 2012 se con­ta­bi­li­za­ron 16 000 homi­ci­dios. El país pare­ce fue­ra de con­trol, pero «el hijo de Chá­vez”, como se hace lla­mar Madu­ro mue­ve las masas en nom­bre de su coman­dan­te, al que ha pues­to de jefe de cam­pa­ña.

Fran­cis­co Rosa­les, el 8 de abril de 2013 en el edi­to­rial “Vene­zue­la al bor­de la quie­bra”, expresa: 

Este mane­jo eco­nó­mi­co caó­ti­co no pue­de con­ti­nuar, so pena de que­brar a Vene­zue­la, que es el país con más altas reser­vas de hidro­car­bu­ros en el mun­do. De allí que el pre­si­den­te ele­gi­do el 14 de abril ten­drá que apli­car un pro­gra­ma estric­to de reor­de­na­mien­to eco­nó­mi­co. Éste debe­rá incluir al menos la reduc­ción drás­ti­ca de los sub­si­dios a Cuba y otros paí­ses del Cari­be. La revi­sión de los pre­cios inter­nos de los com­bus­ti­bles y otros bie­nes sub­si­dia­dos, pues no pue­de seguir ven­dién­do­se el galón de gaso­li­na a 3 cen­ta­vos de dólar. Poner orden al des­ba­ra­jus­te de PDVSA, que no invier­te ni paga a sus pro­vee­do­res por des­ti­nar sus recur­sos a la impor­ta­ción sub­si­dia­da de ali­men­tos. Sin­ce­rar el tipo de cam­bio, pues pese a la deva­lua­ción últi­ma de 4,30 a 6,30 bolí­va­res fuer­tes por dólar, en el mer­ca­do para­le­lo se sitúa en 4 veces esta cifra. Aban­do­nar la dema­go­gia y el mane­jo polí­ti­co, que lle­gó a la expro­pia­ción capri­cho­sa de empre­sas y de inmue­bles. Y res­ta­ble­cer un nivel de con­fian­za míni­mo para que el empre­sa­rio, tan hos­ti­li­za­do en los últi­mos años, vuel­va a creer en las posi­bi­li­da­des de su país e invier­ta al menos par­te del dine­ro que en volú­me­nes colo­sa­les fugó de Vene­zue­la duran­te el régi­men de Chávez. 

El perio­dis­ta Die­go Oquen­do, el 11 de mar­zo de 2013, en su sec­ción en el perió­di­co Hoy, “Fre­gan­do la Pita”, manifiesta: 

Al cabo de 14 años de man­da­to del locuaz per­so­na­je el balan­ce es deplo­ra­ble. Su lega­do se resu­me en una cri­sis inte­gral: polí­ti­ca, social y eco­nó­mi­ca. Vene­zue­la vive un dra­ma difí­cil de supe­rar, a menos que los líde­res enfren­ta­dos depon­gan sus ambi­cio­nes y bus­quen una vía de sali­da en con­sen­so, bajo una ins­pi­ra­ción democrática. 

El perió­di­co Hoy publi­có el 7 de mar­zo de 2013 un “aná­li­sis” bajo el títu­lo “Inte­rro­gan­tes tras muer­te de Chá­vez” en el que señala: 

Las res­pues­ta a esta y otras pre­gun­tas sobre el futu­ro polí­ti­co vene­zo­lano esta­rán, sin embar­go, con­di­cio­na­das por una reali­dad eco­nó­mi­ca que, a pesar de la inmen­sa rique­za petro­le­ra, mues­tra en el país seña­les de gra­ve dete­rio­ro: los vene­zo­la­nos sufren esca­sez de ali­men­tos y pro­duc­tos bási­cos y la más alta infla­ción del con­ti­nen­te. Con un mode­lo cen­tra­li­za­do de mane­jo de la eco­no­mía cuyo cre­ci­mien­to gira en torno de la inver­sión esta­tal, se ha debi­li­ta­do al sec­tor pro­duc­ti­vo pri­va­do. El mes pasa­do, el Gobierno anun­ció una deva­lua­ción del 46,5%. Los impac­tos sobre los bol­si­llos pesa­rán sobre la con­ti­nui­dad gubernamental. 

De igual mane­ra, el perió­di­co ecua­to­riano El Comer­cio publi­ca cons­tan­te­men­te edi­to­ria­les con­tra­rios al régi­men bolivariano. 

Ben­ja­mín Fer­nán­dez Boga­do, el 17 de mar­zo de 2013, en el edi­to­rial “Fati­ga de la maqui­na­ria” dice:

El estre­cho resul­ta­do de los comi­cios de Vene­zue­la se corres­pon­de entre otras muchas expli­ca­cio­nes, a una cla­ra mues­tra de ago­ta­mien­to del sis­te­ma. El pue­blo lue­go de tan­ta bulla obser­va que sus con­di­cio­nes de vida no han mejo­ra­do, que los que lo invo­can de mane­ra reite­ra­da y rui­do­sa no han dis­mi­nui­do la cri­mi­na­li­dad y ade­más: la eco­no­mía empeo­ra cada día. No es sufi­cien­te invo­car a los espí­ri­tus cuan­do la vida coti­dia­na les demues­tra que la lucha no es entre los oli­gar­cas y el pue­blo sino entre un Gobierno incom­pe­ten­te y la realidad. 

Sebas­tián Man­ti­lla Baca en el edi­to­rial “Decli­ve del cha­vis­mo”, publi­ca­do el 17 de abril de 2013, señala: 

Pese a man­te­ner­se en estos comi­cios el mis­mo nivel de par­ti­ci­pa­ción elec­to­ral que en octu­bre pasa­do, el cual ha esta­do en el orden del 79%, se apre­cia un fran­co decli­ve del cha­vis­mo en Vene­zue­la. Esto sig­ni­fi­ca que el lide­raz­go de Capri­les y de la opo­si­ción se ha refor­za­do, pero tam­bién que el des­con­ten­to de la pobla­ción con el mane­jo del país empie­za a sen­tir­se. No es para menos. Vene­zue­la, pese a ser el pri­mer pro­duc­tor de petró­leo de Suda­mé­ri­ca y el quin­to a esca­la mun­dial, atra­vie­sa por una situa­ción cala­mi­to­sa en el ámbi­to eco­nó­mi­co e inclu­so social. La infla­ción es la más alta de la región (20,1% en el 2012). La esca­sez de ali­men­tos de pri­me­ra nece­si­dad como car­ne, arroz, azú­car y café ron­da en el 20%. 

En la mis­ma fecha, Manuel Terán publi­ca el edi­to­rial con el títu­lo “Derro­ta­do” en el que expresa: 

Ganar con algo más del 1% de dife­ren­cia, des­pués de haber­se impues­to elec­ción tras elec­ción, debe ver­se como el resur­gi­mien­to de las fuer­zas que no comul­gan con el pro­yec­to cha­vis­ta. Al pare­cer exis­te una espe­cie de har­taz­go con del cha­vis­mo que ha con­ver­ti­do a Vene­zue­la, una de las Repú­bli­cas más ricas de Suda­mé­ri­ca, en un país en don­de la infla­ción, la vio­len­cia y el des­abas­te­ci­mien­to de pro­duc­tos bási­cos son el pan de cada día. Esa mitad de ciu­da­da­nos que se pro­nun­cian en con­tra del mode­lo impues­to son los que bus­can otro des­tino para la Patria de Bolívar. 

El 18 de abril de 2013, Washing­ton Herre­ra, en el edi­to­rial “Retos para Vene­zue­la” manifiesta:

Vene­zue­la tie­ne dos desa­fíos gran­des: recom­po­ner la eco­no­mía para cre­cer a un rit­mo mayor al 5% y ele­var más aún el índi­ce de desa­rro­llo humano. Los orga­nis­mos inter­na­cio­na­les impar­cia­les lle­gan a una con­clu­sión: el cha­vis­mo ha hecho bien la inclu­sión social de la gen­te pobre pero un mal mane­jo de la eco­no­mía, a pesar de dis­po­ner de ele­va­dos ingre­sos petroleros. 

Estos perió­di­cos man­tie­nen la mis­ma matriz dis­cur­si­va, la cual res­pon­de ade­más de la pos­tu­ra ideo­ló­gi­ca de sus pro­pie­ta­rios a una cam­pa­ña pro­pa­gan­dís­ti­ca inter­na­cio­nal orques­ta­da por el impe­ria­lis­mo yan­qui y la oli­gar­quía lati­no­ame­ri­ca­na, fun­da­men­tal­men­te, dise­ña­da para gol­pear mediá­ti­ca­men­te a la revo­lu­ción boli­va­ria­na venezolana. 

Se uti­li­zan pala­bras, tér­mi­nos para des­ca­li­fi­car la ges­tión eco­nó­mi­ca del gobierno boli­va­riano y de esa mane­ra crear una ima­gen de inefi­cien­cia y des­ca­la­bro que ha deri­va­do en males­tar para la pobla­ción vene­zo­la­na. “Tér­mi­nos mane­ja­dos de mane­ra hue­ca para relle­nar­los con odio”, dice el comu­ni­có­lo­go Fer­nan­do Buen Abad en una entre­vis­ta publi­ca­da en el perió­di­co El Correo del Ori­no­co, el 27 de octu­bre de 2013, uti­li­za­dos “para escon­der los logros de la Revo­lu­ción”.

Los éxi­tos alcan­za­dos en mate­ria social y eco­nó­mi­ca en estos 14 años de régi­men boli­va­riano son invi­si­vi­li­za­dos o mini­mi­za­dos por los medios pri­va­dos de comu­ni­ca­ción. Cuan­do algu­na vez reco­no­cen la exis­ten­cia de algún avan­ce, lo que se hace es res­tar­le impor­tan­cia al mismo. 

Los edi­to­ria­lis­tas de estos perió­di­cos exal­tan los regí­me­nes capi­ta­lis­tas de la región, mien­tras ata­can las medi­das eco­nó­mi­cas del gobierno revo­lu­cio­na­rio vene­zo­lano. Ponen de relie­ve en sus escri­tos el rol de los empre­sa­rios pri­va­dos, abo­gan por la inver­sión extran­je­ra y las pri­va­ti­za­cio­nes, mien­tras aus­pi­cian las alian­zas comer­cia­les fomen­ta­das des­de EEUU. 

Las con­se­cuen­cias de la apli­ca­ción del mode­lo neo­li­be­ral en la región, que ha pro­vo­ca­do ham­bre, mise­ria, des­ocu­pa­ción en la pobla­ción lati­no­ame­ri­ca­na no son pro­ble­ma para estos edi­to­ria­lis­tas que pre­ten­den con­fun­dir a sus lec­to­res con la idea de que las medi­das que piden que se apli­quen son sola­men­te téc­ni­cas, al con­tra­rio de las deci­sio­nes del régi­men boli­va­riano que, para ellos, obe­de­cen úni­ca­men­te a razo­nes ideológicas. 

Die­go Ceva­llos Rojas, en el edi­to­rial “Mun­dos opues­tos”, publi­ca­do en el perió­di­co El Comer­cio el 5 de abril de 2013 dice: 

Más allá de fobias o filias ideo­ló­gi­cas, algu­nas repues­tas están en las cifras. En 2012 se regis­tra­ron en Vene­zue­la 54 ase­si­na­tos por cada 100 000 habi­tan­tes, en Chi­le menos de cua­tro. Vene­zue­la es uno de los más corrup­tos, en nive­les simi­la­res a los Hai­tí e Iraq, Chi­le es uno de los mejor cali­fi­ca­dos en esa mate­ria. Entre 2007 y 2012, Vene­zue­la se movió en el Índi­ce de Desa­rro­llo Humano del PNUD, del pues­to 65 al 71, mien­tras Chi­le lo hizo del 38 al 40 ‑1 es el más desa­rro­lla­do y el 186 el menos-. Entre los indi­ca­do­res que inte­gran ese índi­ce están edu­ca­ción y espe­ran­za de vida. La pobla­ción del pri­mer país tie­ne 7,6 años de escue­la pro­me­dio, el segun­do 9,7. En cuan­to a años de vida, el uno está en 74,6, el otro en 79,3. Hugo Chá­vez, quien estu­vo en el poder 13 años, has­ta que falle­ció ‑Chi­le tuvo tres man­da­ta­rios en ese perío­do – , fue sobre todo un lucha­dor con­tra la injus­ti­cia social, pro­cla­man sus deu­dos. El últi­mo infor­me de la Cepal sobre la mate­ria indi­ca que entre 2010 y 2011, la pobre­za en Vene­zue­la repun­tó de 27,8 a 29,5 por cien­to, mien­tras que la indi­gen­cia pasó de 10,7 a 11,7. En el mis­mo lap­so, en Chi­le, don­de hay un arco polí­ti­co diver­so y has­ta anta­gó­ni­co, pero actuan­do des­de hace más de 20 años bajo un acuer­do por la aper­tu­ra de mer­ca­dos, el libre comer­cio y las polí­ti­cas socia­les per­sis­ten­tes, la pobre­za des­cen­dió de 11,5 a 11 por cien­to y la indi­gen­cia de 3,6 a 3,1 pun­tos. La infla­ción chi­le­na en 2012 fue de 2,9 pun­tos, 1,5 menos que en 2011. La vene­zo­la­na, en tan­to, bajó de 29 a 18,5 por cien­to. En cuan­do a des­abas­te­ci­mien­to de pro­duc­tos, en el país andino no exis­te, mien­tras en Vene­zue­la es dra­má­ti­co. Entre 2010 y 2012, el cre­ci­mien­to eco­nó­mi­co de Chi­le se des­pla­zó de 6.1 a 5,5 por cien­to, Vene­zue­la en cam­bio se movió de 1,5 por cien­to nega­ti­vo a 5,3. Para 2013, se esti­ma que Chi­le cre­ce­rá 4,8 pun­tos y Vene­zue­la 2. Los inver­sio­nis­tas extran­je­ros miden sus pre­fe­ren­cias. Casi 17 300 millo­nes de dóla­res fue­ron inver­ti­dos en Chi­le en 2011 ver­sus un nega­ti­vo de 759 millo­nes para Vene­zue­la. ¿Qué está fun­cio­nan­do mejor? ¿Un mode­lo basa­do en con­cen­tra­ción de poder, auto­ri­ta­ris­mo y encono u otro eri­gi­do sobre acuer­dos, divi­sión de pode­res y una ope­ra­ción ins­ti­tu­cio­nal pre­de­ci­ble? Juzgue. 

El mode­lo neo­li­be­ral imple­men­ta­do por la dic­ta­du­ra fas­cis­ta de Augus­to Pino­chet a par­tir del 11 de sep­tiem­bre de 1973, es el que ponen de ejem­plo edi­to­ria­lis­tas como Die­go Ceva­llos Rojas, ocul­tan­do el papel cri­mi­nal de la dic­ta­du­ra para afian­zar ese mode­lo que ha agu­di­za­do la bre­cha entre ricos y pobres y que impi­de a la cla­se tra­ba­ja­do­ra chi­le­na gozar del acce­so a la edu­ca­ción y a la salud. Lo que ocul­ta Die­go Ceva­llos es que Chi­le es uno de los paí­ses más des­igua­les del mun­do. Maria­ne­la Jarroud en un artícu­lo titu­la­do “El Chi­le de las des­igual­da­des ante la elec­ción del no va más”, dice que en el país “dos de cada tres hoga­res viven con menos de 1.200 dóla­res al mes y alta­men­te endeu­da­dos”, pues­to que “la mitad de los tra­ba­ja­do­res ganan menos de 500 dóla­res men­sua­les”, mien­tras “las 4.500 fami­lias más ricas tie­nen un ingre­so men­sual de más de 40.000 dóla­res”.[15] Por su par­te, Gon­za­lo Cid, del Cen­tro de Estu­dios Nacio­na­les de Desa­rro­llo Alter­na­ti­vo, en entre­vis­ta con Tele­sur el 14 de noviem­bre de 2013, seña­ló que si bien el cre­ci­mien­to de Chi­le ha sido de un 6% anual en pro­me­dio, el mode­lo, que pri­vi­le­gia la macro­eco­no­mía, aten­ta con­tra los dere­chos socia­les de los tra­ba­ja­do­res, en un país en el que el dere­cho a la huel­ga está prohi­bi­do, en el que el 50% del empleo es pre­ca­rio, con 4 millo­nes de tra­ba­ja­do­res que no tie­nen nin­gún dere­cho bási­co, con los cos­tos de ener­gía más altos de mun­do y en el que 3 millo­nes de per­so­nas sobre­vi­ven con menos de dos dóla­res dia­rios y más de un millón con menos de un dólar, mien­tras el más rico gana 27 veces más que el más pobre de los tra­ba­ja­do­res chi­le­nos.[16]

No es nue­va esta defen­sa de los expo­nen­tes del neo­li­be­ra­lis­mo. El 18 de enero de 2001, Aní­bal Rome­ro, en un edi­to­rial publi­ca­do en El Comer­cio bajo el títu­lo “Fox y Chá­vez: dos opcio­nes”, hacía lo mis­mo que Die­go Ceva­llos: exal­tar el mode­lo neo­li­be­ral impues­to por Fox en Méxi­co fren­te a las polí­ti­cas del gobierno del pre­si­den­te Chá­vez. Obvia­men­te, el pri­me­ro era pre­sen­ta­do como exi­to­so, mien­tras que el segun­do como anti­de­mo­crá­ti­co e ineficiente: 

Las dife­ren­cias se plan­tean de mane­ra ine­quí­vo­ca en el terreno polí­ti­co interno, en la pro­yec­ción inter­na­cio­nal, en las con­cep­cio­nes eco­nó­mi­cas y en lo que podría­mos lla­mar el espí­ri­tu de gobierno de ambos man­da­ta­rios. Para empe­zar, en lo que toca a la cues­tión inter­na, Fox es un jefe de Esta­do de cla­ra pos­tu­ra demo­crá­ti­ca, que está demos­tran­do su dis­po­si­ción a gober­nar con ampli­tud, bajo la ley, y con res­pe­to a las nor­mas de una con­vi­ven­cia civi­li­za­da. Chá­vez, por el con­tra­rio, ha pues­to de mani­fies­to una ine­quí­vo­ca voca­ción de con­cen­tra­ción y mono­po­li­za­ción del poder en sus pro­pias manos, subor­di­nan­do a su volun­tad el res­to de los pode­res públi­cos y lesio­nan­do seve­ra­men­te su equilibrio. 

En lo eco­nó­mi­co, la dis­tan­cia entre ambos man­da­ta­rios es casi side­ral. Fox vie­ne de un exi­to­so ejer­ci­cio geren­cial al fren­te de una impor­tan­te empre­sa trans­na­cio­nal; tie­ne, por tan­to, una sóli­da cul­tu­ra empre­sa­rial en el mar­co del capi­ta­lis­mo y la com­pe­ten­cia, y entien­de lo que sig­ni­fi­ca el con­tex­to glo­ba­li­za­do de las actua­les rela­cio­nes eco­nó­mi­cas inter­na­cio­na­les. Chá­vez, por otra par­te, vie­ne de la izquier­da; su hori­zon­te men­tal se ubi­ca en los con­tor­nos del mar­xis­mo, el gue­va­ris­mo y el recha­zo a la empre­sa pri­va­da. Para Chá­vez, poco sig­ni­fi­ca­do tie­ne el estre­pi­to­so fra­ca­so socia­lis­ta; su mesia­nis­mo le indi­ca que, en su caso, las cosas si funcionarán. 

Como se apre­cia el éxi­to radi­ca en quie­nes siguen el mode­lo “empre­sa­rial”, que no es otra cosa que el mode­lo capi­ta­lis­ta, mien­tras se deni­gra a quie­nes se opo­nen. La mis­ma can­ta­le­ta: “esta­bi­li­dad macro­eco­nó­mi­ca y finan­zas públi­cas sanas”. La reali­dad: pobre­za, des­em­pleo, some­ti­mien­to a las trans­na­cio­na­les espa­ño­las y esta­dou­ni­den­ses, pér­di­da de la sobe­ra­nía nacio­nal, some­ti­mien­to a los dic­ta­dos de Washing­ton, res­tric­ción del gas­to públi­co y expul­sión del país de cien­tos de miles de per­so­nas que por cual­quier medio emi­gra­ron a los EEUU en bus­ca del sue­ño ame­ri­cano.

Des­de los pri­me­ros años del gobierno del pre­si­den­te Hugo Chá­vez, los medios aupa­ban el sabo­ta­je y la desestabilización. 

El 25 de noviem­bre de 2001 el perió­di­co el Comer­cio publi­có un artícu­lo con el títu­lo “Chá­vez acu­mu­la derro­tas y crí­ti­cas” con infor­ma­cio­nes pro­ve­nien­tes de El Nacio­nal y de agen­cias en el que dice: “La sema­na que cie­rra con­fir­mó que el pre­si­den­te vene­zo­lano, Hugo Chá­vez, pier­de popu­la­ri­dad, acu­mu­la cues­tio­na­mien­tos a su ges­tión, afron­ta paros, se enfren­ta abier­ta­men­te con la pren­sa e inclu­so enca­ja duros reve­ses.”

En dicho artícu­lo se infor­ma que: 

Un millón de esta­ble­ci­mien­tos comer­cia­les en Vene­zue­la está dis­pues­to a cerrar sus puer­tas el 10 de diciem­bre para sumar­se a la huel­ga con­tra el Gobierno con­vo­ca­da por la máxi­ma cúpu­la empre­sa­rial. Julio Bra­zón, pre­si­den­te del Con­se­jo Nacio­nal de Comer­cio, dijo que esos esta­ble­ci­mien­tos comer­cia­les, agru­pa­dos en 165 cáma­ras, están dis­pues­tos a cerrar sus puer­tas. “El paro será un éxi­to y si tene­mos que seguir paran­do el país, lo para­mos”, fus­ti­go Bra­zón, uno de los más encen­di­dos líde­res empre­sa­ria­les a favor de la pro­tes­ta con­tra el gobierno de Hugo Chávez. 

El 16 de diciem­bre de 2001 el Comer­cio publi­có un tra­ba­jo perio­dís­ti­co titu­la­do “Chá­vez, una revo­lu­ción que tie­ne a un país al bor­de del abis­mo”. El 20 de diciem­bre de 2001 el mis­mo perió­di­co publi­có otra noti­cia con el títu­lo “La popu­la­ri­dad de Chá­vez cae más”. 

Era el pre­lu­dio del gol­pe fas­cis­ta que se pro­du­jo el 11 de abril de 2002, en el que como seña­la­ron los pro­pios gol­pis­tas, los medios de comu­ni­ca­ción fue­ron sus prin­ci­pa­les armas.

El 13 de abril de 2002, el dia­rio Hoy publi­có su opi­nión sobre el gol­pe de Esta­do en Vene­zue­la bajo el títu­lo “Régi­men de tran­si­ción en Vene­zue­la” en el que se lee: 

La pola­ri­za­ción a la que Hugo Chá­vez con­du­jo al país; el des­en­ga­ño popu­lar por las ofer­tas de cam­bio y bien­es­tar, que no pasa­ron de ser un alar­de retó­ri­co; los enfren­ta­mien­tos con tra­ba­ja­do­res, empre­sa­rios y otros gru­pos socia­les; la into­le­ran­cia, ame­na­zas y abu­so con­tra los medios de comu­ni­ca­ción; la corrup­ción y los inten­tos de copar las ins­ti­tu­cio­nes del Esta­do, se vol­vie­ron en con­tra del pre­si­den­te, des­gas­ta­ron de for­ma ver­ti­gi­no­sa su popu­la­ri­dad y lle­va­ron al pro­nun­cia­mien­to de los mili­ta­res para exi­gir la renun­cia pre­si­den­cial, en una jor­na­da de repre­sión, con 15 muer­tos y más de un cen­te­nar de heridos. 

Ocul­ta­mien­to, fal­si­fi­ca­ción y ter­gi­ver­sa­ción de la reali­dad, a más de la jus­ti­fi­ca­ción del gol­pe fas­cis­ta, es lo que el perió­di­co Hoy de Ecua­dor hizo con este editorial.

Mien­tras tan­to el mis­mo día en que el perió­di­co Hoy escri­bía su edi­to­rial, la gen­te pobre baja­ba de los cerros y se comu­ni­ca­ba a tra­vés de diver­sos medios para exi­gir la res­ti­tu­ción de su pre­si­den­te, el Coman­dan­te Hugo Rafael Chá­vez Frías. La supues­ta fal­ta de popu­la­ri­dad de la que habla el edi­to­rial se des­plo­mó cuan­do el pue­blo res­ti­tu­yó a su pre­si­den­te y cuan­do los gol­pis­tas huye­ron. La repre­sión de la que habla este escri­to no fue otra cosa que una masa­cre lle­va­da a cabo por fran­co­ti­ra­do­res al ser­vi­cio de los auto­res del gol­pe fas­cis­ta. El edi­to­rial del perió­di­co Hoy seña­ló que el gobierno de Chá­vez fue into­le­ran­te, ame­na­zó y abu­só con­tra los medios de comu­ni­ca­ción, cuan­do fue­ron ellos los que azu­za­ron el gol­pe antes y duran­te el mis­mo, insul­tan­do al pre­si­den­te, des­ca­li­fi­can­do a sus segui­do­res e inci­tan­do al derro­ca­mien­to y mag­ni­ci­dio del Coman­dan­te Hugo Chávez. 

El Comer­cio, hacién­do­se eco de las men­ti­ras esgri­mi­das por los gol­pis­tas de que Chá­vez había renun­cia­do publi­có una infor­ma­ción noti­cio­sa el 12 de abril de 2002 con el títu­lo: “Hugo Chá­vez fue obli­ga­do a renun­ciar”, mien­tras el 14 de abril publi­ca­ba otro en el que decía: “Hugo Chá­vez se que­dó solo y cayó”. 

Duran­te 2012 y 2013 la gue­rra eco­nó­mi­ca con­tra el gobierno del pre­si­den­te Nico­lás Madu­ro arre­ció. En 1970, el pre­si­den­te de EEUU, Richard Nixon, con el pro­pó­si­to de des­es­ta­bi­li­zar al gobierno de la Uni­dad Popu­lar en Chi­le dijo: “Hay que hacer gri­tar la eco­no­mía chi­le­na”. Bajo esa mis­ma lógi­ca, las admi­nis­tra­cio­nes esta­dou­ni­den­ses que se han suce­di­do des­de 1998 has­ta la pre­sen­te fecha, tra­ba­jan con el obje­ti­vo de pro­vo­car la caí­da del gobierno boli­va­riano vene­zo­lano. Los medios pri­va­dos de comu­ni­ca­ción siguen sien­do armas impor­tan­tes para lograr su propósito. 

El 14 de octu­bre de 2012, Gon­za­lo Mal­do­na­do Albán, en un edi­to­rial publi­ca­do por el perió­di­co El Comer­cio con el títu­lo “¿Por qué ganó Chá­vez?” expresaba:

Se ha dicho que el triun­fo elec­to­ral de Hugo Chá­vez, el domin­go ante­rior, tie­ne varias expli­ca­cio­nes. Se ha seña­la­do que el can­di­da­to ofi­cial tuvo más espa­cio que su opo­si­tor para hacer pro­pa­gan­da polí­ti­ca; se ha dicho que exis­tió un voto cau­ti­vo de casi 2.5 millo­nes de per­so­nas que tra­ba­jan en el sec­tor públi­co vene­zo­lano y que votan por Chá­vez para pro­te­ger su empleo; se ha afir­ma­do que la opo­si­ción, por no mos­trar­se dema­sia­do beli­ge­ran­te con el Gobierno, envió un men­sa­je con­fu­so al elec­to­ra­do, uno que ter­mi­nó favo­re­cien­do a Chá­vez. Aque­llas son expli­ca­cio­nes plau­si­bles pero no razo­nes de fon­do que per­mi­tan enten­der por qué los vene­zo­la­nos eli­gie­ron nue­va­men­te a un gober­nan­te que ha empeo­ra­do las con­di­cio­nes eco­nó­mi­cas y socia­les en que viven. (Entre 1998 y 201l el empleo indus­trial cayó en 35%; la pro­duc­ción petro­le­ra dis­mi­nu­yó en 19%; los ase­si­na­tos cre­cie­ron en 459%; el poder adqui­si­ti­vo es el mis­mo que en 1966; y la infla­ción de aquel país está entre las más altas del mundo).

José Her­nán­dez, direc­tor adjun­to del perió­di­co Hoy de Ecua­dor, en un tra­ba­jo publi­ca­do el 21 de abril de 2013 bajo el títu­lo: “Madu­ro: la revo­lu­ción de cuer­po ente­ro”, cali­fi­ca como un desas­tre al mode­lo bolivariano: 

La reali­dad del cha­vis­mo sal­ta a los ojos: dis­cur­sos infla­ma­dos, mar de pro­me­sas, uso y abu­so de la figu­ra de Bolí­var, pla­ta por mon­to­nes has­ta para rega­lar… El cha­vis­mo pre­ten­dió eri­gir­se en la nue­va reli­gión del mun­do. Madu­ro, su here­de­ro, ha teni­do que reco­no­cer (par­te por aho­ra) de su reali­dad real: un país des­abas­te­ci­do, des­in­dus­tria­li­za­do, petro­de­pen­dien­te a extre­mos des­co­no­ci­dos… Un país con un mode­lo eco­nó­mi­co invia­ble por cul­pa de Chá­vez; el hom­bre que para­do en cual­quier esqui­na y con dedo inqui­si­dor al fren­te, orde­na­ba que se expro­pie o se incau­te lo que se le ocu­rría. Cual fin­que­ro feudal.


Ese hom­bre y ese mode­lo se con­vir­tie­ron en los tótems de esa vie­ja izquier­da de Amé­ri­ca Lati­na ahí­ta de lemas y pro­cla­mas y dis­tan­te de efi­cien­cias y resul­ta­dos. Es el segun­do desas­tre can­ta­do, tras el cubano, que rehú­sa ver. A esos mili­tan­tes les pare­ce más revo­lu­cio­na­rio teo­ri­zar sobre la mise­ria que gene­ran que com­pe­tir con sus con­tra­dic­to­res con resul­ta­dos medi­bles. Madu­ro, con muy poco talen­to, ten­drá que admi­nis­trar una fala­cia ideo­ló­gi­ca que se tra­du­ce para los vene­zo­la­nos, en sus bol­si­llos y ala­ce­nas, en una ver­da­de­ra pesadilla.

El odio con­tra el pro­yec­to boli­va­riano está en el hecho de que éste se ha cons­ti­tui­do en un obs­tácu­lo para la con­cre­ción de los pla­nes polí­ti­cos, eco­nó­mi­cos y mili­ta­res del impe­ria­lis­mo y la oli­gar­quía venezolana. 

El 4 de noviem­bre de 2005, el pre­si­den­te Hugo Chá­vez, en Mar de Pla­ta, Argen­ti­na, sen­ten­cia­ba la muer­te del pro­yec­to cri­mi­nal del impe­ria­lis­mo, el ALCA, mien­tras abo­ga­ba por la nece­si­dad de luchar por el for­ta­le­ci­mien­to de la ALBA. 

Dijo el Coman­dan­te Chá­vez en ese momento: 

(…) Tene­mos una doble tarea, ente­rrar el ALCA y el mode­lo eco­nó­mi­co, impe­ria­lis­ta, capi­ta­lis­ta por una par­te, pero por la otra a noso­tros nos toca, com­pa­ñe­ros y com­pa­ñe­ras, ser los par­te­ros del nue­vo tiem­po, los par­te­ros de la nue­va his­to­ria, los par­te­ros de la nue­va inte­gra­ción, los par­te­ros del ALBA, la Alter­na­ti­va Boli­va­ria­na para las Amé­ri­cas, para los pue­blos de Amé­ri­ca, una ver­da­de­ra inte­gra­ción libe­ra­do­ra, para la liber­tad, para la igual­dad, para la jus­ti­cia y para la paz (…)

Y aña­dió:

Hace cin­co años en Cana­dá, el gobierno de Esta­dos Uni­dos logró que se apro­ba­ra, casi por una­ni­mi­dad, lamen­ta­ble­men­te, la pro­pues­ta del ALCA, un Área de Libre Comer­cio para las Amé­ri­cas, y Vene­zue­la fue el úni­co país que en soli­ta­rio levan­tó esta mis­ma mano para decir ¡no!, para decir­le no a aque­lla pro­pues­ta, pero todos los demás gobier­nos apro­ba­ron la pro­pues­ta, y fíjen­se lo que ha ocu­rri­do, allá en Cana­dá se apro­bó un artícu­lo, un párra­fo de la decla­ra­ción que siem­pre se saca don­de dice: Las nego­cia­cio­nes para un Área de Libre Comer­cio de las Amé­ri­cas debe­rán estar con­clui­das el pri­me­ro de enero del 2005, y ade­más el acuer­do o con­ve­nio debe­rá estar acti­va­do a más tar­dar el 31 de diciem­bre de 2005. Ama­ne­ció el pri­me­ro de enero de 2005 y el ALCA ¿dón­de está? Ya vie­ne el 31 de diciem­bre de 2005 y el ALCA ¿dón­de está? Al ALCA, repi­to, la derro­ta­mos los pue­blos de este con­ti­nen­te, y al ALCA hoy le tocó su entie­rro aquí en Mar del Pla­ta, hoy ente­rra­mos al ALCA, en Mar del Pla­ta se que­da ente­rra­do y bien hon­do.[17]

El ALCA fue un pro­yec­to dise­ña­do por los Esta­dos Uni­dos en 1994, en la Pri­me­ra Cum­bre de las Amé­ri­cas lle­va­da a cabo en Mia­mi, cuyo obje­ti­vo fun­da­men­tal era el de posi­bi­li­tar el domi­nio de las trans­na­cio­na­les capi­ta­lis­tas grin­gas en la región y la con­so­li­da­ción del mode­lo neoliberal. 

Entre otras cosas, el Alca bus­ca­ba: gene­rar acuer­dos inter­na­cio­na­les que limi­ta­ran la capa­ci­dad de acción de los gobier­nos nacio­na­les sobre su pro­pia eco­no­mía, medio ambien­te y socie­dad; crear nor­mas comer­cia­les supra­na­cio­na­les que limi­ta­ran la capa­ci­dad de acción y con­trol de los gobier­nos nacio­na­les sobre las acti­vi­da­des de los inver­so­res; así como bene­fi­ciar a las trans­na­cio­na­les con acuer­dos que redu­je­ran los cos­tos sala­ria­les e impo­si­ti­vos de las cor­po­ra­cio­nes al mínimo.

Tam­bién incluía que el Fon­do Mone­ta­rio Inter­na­cio­nal (FMI) y el Ban­co Mun­dial con­ti­nua­ran con la apli­ca­ción de pro­gra­mas de “ajus­te estruc­tu­ral”, un eufe­mis­mo que incluía recor­tes socia­les y eco­nó­mi­cos en los paí­ses endeu­da­dos para garan­ti­zar el pago de los intere­ses sobre deu­das que nun­ca podrán saldar.

Esto, entre otras razo­nes, fue lo que lle­vó a Amé­ri­ca Lati­na jun­to a Chá­vez a decir: ¡Alca, al cara­jo![18]

La opo­si­ción a los pro­yec­tos impe­ria­lis­tas y el haber reto­ma­do la idea de la cons­truc­ción del socia­lis­mo fren­te al capi­ta­lis­mo, han acre­cen­ta­do el odio de las admi­nis­tra­cio­nes esta­dou­ni­den­ses con­tra el pro­yec­to boli­va­riano venezolano. 

La pren­sa ecua­to­ria­na y sus edi­to­ria­lis­tas han sido duros crí­ti­cos de los pro­yec­tos de inte­gra­ción boli­va­ria­na, mien­tras han exal­ta­do las alian­zas pro­pi­cia­das por el imperialismo. 

Xavier Nei­ra Menén­dez, en un edi­to­rial publi­ca­do en el perió­di­co Hoy el 29 de julio de 2013, con el títu­lo “La Alian­za del Pací­fi­co”, mani­fes­ta­ba que: 

Los paí­ses de la AP han libe­ra­li­za­do sus eco­no­mías abrién­do­se al mun­do. Y lo más impor­tan­te: han deci­di­do orien­tar su desa­rro­llo hacia el Pací­fi­co para aliar­se con Asia y EEUU, con cuyas nacio­nes han sus­cri­to Tra­ta­dos de Libre Comer­cio (TLC). Así, con­ver­ti­da en la octa­va eco­no­mía mun­dial, la AP garan­ti­za el mer­ca­do asiá­ti­co, inte­grán­do­se tam­bién en pro­pie­dad inte­lec­tual, inver­sio­nes, polí­ti­cas de com­pe­ten­cia, finan­zas, solu­ción de con­tro­ver­sias, etc.


Los paí­ses que rápi­da­men­te se han desa­rro­lla­do son aque­llos que se han abier­to al comer­cio en vez de ais­lar­se del mun­do glo­ba­li­za­do, para­pe­tán­do­se bajo con­sig­nas polí­ti­cas que impi­den el pro­gre­so. Lejos de com­ple­jos y de fun­da­men­ta­lis­mos, Lula, las Sras. Rous­seff y Bache­let, Feli­pe Gon­zá­lez, Huma­la, Muji­ca, gober­nan­tes socia­lis­tas todos, fue­ron y/​o son prag­má­ti­cos. Es hora de inte­grar­se para avan­zar, no para retro­ce­der. El ALBA es una alter­na­ti­va polí­ti­ca que no ofre­ce futu­ro eco­nó­mi­co. Nin­gún país por si solo está en capa­ci­dad de derro­tar a la pobre­za.

En este artícu­lo no se dice una pala­bra sobre las con­se­cuen­cias que han teni­do para los pue­blos estas alian­zas, ni del papel de las gran­des trans­na­cio­na­les capi­ta­lis­tas para des­truir las eco­no­mías nacio­na­les, ni que la pobre­za es el resul­ta­do de un mode­lo injus­to: el capi­ta­lis­ta, del que Nei­ra es uno de sus más acé­rri­mos defensores. 

El mis­mo autor, en otro edi­to­rial con el mis­mo titu­lar, publi­ca­do en el perió­di­co Hoy el 18 de junio de 2012, expresaba: 

Que­dó para la his­to­ria cul­par a otros de nues­tro atra­so social y eco­nó­mi­co tra­tan­do de jus­ti­fi­car erro­res. Los típi­cos pre­tex­tos son cono­ci­dos: impo­si­cio­nes del impe­ria­lis­mo, pre­po­ten­cia de la «pren­sa corrup­ta», la lar­ga noche neo­li­be­ral, la mala dis­tri­bu­ción de la rique­za, la ausen­cia de soli­da­ri­dad, los abu­sos del poder oli­gár­qui­co y otras expre­sio­nes de pare­ci­do jaez. La AP es un ejem­plo al que debe­mos adhe­rir­nos. Es un esfuer­zo para orien­tar nues­tra pro­duc­ción al mun­do. Apos­te­mos con mode­los exi­to­sos, de pro­ba­da efi­ca­cia. No insis­ta­mos en rece­tas fra­ca­sa­das que no han teni­do éxi­to en nin­gún lugar don­de se apli­ca­ron. No hay otro camino para un desa­rro­llo sos­te­ni­do que eli­mi­ne gra­dual­men­te la pobre­za que afec­ta a millo­nes de lati­no­ame­ri­ca­nos. Así lo han enten­di­do gober­nan­tes de dis­tin­tas ideo­lo­gías: el socia­lis­mo chi­leno que lide­ró los TLC’S con EEUU y otros paí­ses, y que gober­nó –vía Con­cer­ta­ción- 20 años; el etno-cace­ris­mo de Huma­la; el prag­ma­tis­mo de Cal­de­rón y San­tos, etc. Es decir, Esta­dis­tas que pre­fie­ren gober­nar con rea­lis­mo crean­do empleos y no enclaus­trar­se en sus dog­ma­tis­mos que lo úni­co que garan­ti­zan es la mise­ria de las gran­des masas a las que supues­ta­men­te se quie­re rescatar.

Nóte­se como el autor exal­ta a los gobier­nos que cali­fi­ca como “prag­má­ti­cos”, gene­ral­men­te a aque­llos que como el Chi­le de Bache­let, solo han teni­do como mem­bre­te el de ser socia­lis­tas. Nei­ra un expo­nen­te de la dere­cha ecua­to­ria­na, no tie­ne nin­gún pro­ble­ma en poner de relie­ve a esos gobier­nos refor­mis­tas que solo pre­ten­den maqui­llar el capi­ta­lis­mo, sin pro­pi­ciar un cam­bio radi­cal en la socie­dad. Mien­tras no afec­ten al sis­te­ma impe­ran­te, los gober­nan­tes pue­den ser bue­nos, cuan­do son radi­cal­men­te opues­tos al orden polí­ti­co y eco­nó­mi­co esta­ble­ci­do, son peli­gro­sos y malos. 

Lo mis­mo hace Lolo Eche­ve­rría en un edi­to­rial titu­la­do “Las dos Amé­ri­cas”, publi­ca­do el 12 de octu­bre de 2013 en el perió­di­co El Comer­cio, en el que dice: 

Amé­ri­ca, la que soñó siem­pre con ser una sola, avan­za, divi­di­da, por cami­nos diver­gen­tes. No las Amé­ri­cas sajo­na y lati­na, sino dos ver­sio­nes dife­ren­tes de Amé­ri­ca Lati­na que van por cami­nos dis­tin­tos. La pri­me­ra Amé­ri­ca Lati­na, la de los paí­ses que con­for­man la Alian­za del Pací­fi­co, está inte­gra­da por Chi­le, Perú, Colom­bia y Méxi­co; es un blo­que que bus­ca la inte­gra­ción real y la demo­cra­cia ple­na; res­pe­ta la liber­tad de pren­sa y los perío­dos elec­to­ra­les, res­pe­ta la inde­pen­den­cia de fun­cio­nes y bus­ca la inte­gra­ción con todo el mun­do. Jun­tos, estos paí­ses, repre­sen­tan la octa­va eco­no­mía y la sép­ti­ma poten­cia expor­ta­do­ra a esca­la mun­dial. Ha reci­bi­do el año pasa­do 70 000 millo­nes de dóla­res de inver­sión extran­je­ra direc­ta y ha rea­li­za­do el 50% del comer­cio de la región.

Lolo Eche­ve­rría olvi­da decir que esa Amé­ri­ca, “la que soñó siem­pre con ser una sola”, ha sido divi­di­da por la inje­ren­cia de los EEUU y el papel de las oli­gar­quías ser­vi­les al impe­ria­lis­mo yan­qui. El sue­ño boli­va­riano de uni­dad fue frus­tra­do tem­pra­na­men­te por EEUU y el papel trai­dor del san­ta­de­ris­mo y sus secuaces. 

El año 2013 la gue­rra eco­nó­mi­ca entró en su fase más dura y crí­ti­ca con­tra el gobierno bolivariano. 

Los sec­to­res empre­sa­ria­les, los gran­des comer­cian­tes han escon­di­do pro­duc­tos ali­men­ti­cios, han subi­do los pre­cios de los mis­mos y pro­vo­ca­do un des­abas­te­ci­mien­to pla­ni­fi­ca­do en el mer­ca­do nacio­nal. Igual lo han hecho con los electrodomésticos. 

Víc­tor Hugo Majano mani­fies­ta que: 

La “gue­rra eco­nó­mi­ca” en Vene­zue­la con­sis­te bási­ca­men­te en el uso de meca­nis­mos pro­pios de la lógi­ca de mer­ca­do del capi­tal para redu­cir o limi­tar la ofer­ta de bie­nes esen­cia­les de con­su­mo masi­vo. Entre los meca­nis­mos se inclu­yen téc­ni­cas de “mer­chan­di­sing”, que son accio­nes ten­dien­tes a modi­fi­car la con­duc­ta del con­su­mi­dor en los pun­tos fina­les de ven­ta. Tam­bién la uti­li­za­ción de sis­te­mas no for­ma­les de dis­tri­bu­ción, con­tra­ban­do de extrac­ción y reduc­ción deli­be­ra­da de la pro­duc­ción ale­gan­do fal­ta de algún insu­mo. Estos meca­nis­mos son habi­tua­les e inhe­ren­tes al pro­ce­so de cir­cu­la­ción de las mer­can­cías en un sis­te­ma capi­ta­lis­ta, por lo tan­to son lega­les y no se con­si­de­ran ile­gí­ti­mos.[19]

El autor men­cio­na­do expli­ca como los empre­sa­rios capi­ta­lis­tas para elu­dir el con­trol de pre­cios esta­ble­ci­do por el gobierno boli­va­riano sobre algu­nos pro­duc­tos bási­cos, argu­yen haber intro­du­ci­do nue­vos ele­men­tos (con­di­men­tos, sabo­ri­zan­tes, vita­mi­nas) en el arroz, la hari­na de maíz o la leche para bebés, los que supues­ta­men­te les daría una “cali­dad” dis­tin­ta, con lo cual pre­ten­de­rían jus­ti­fi­car la subi­da de pre­cios. En el caso del papel higié­ni­co con­ven­cio­nal han esta­ble­ci­do seve­ras res­tric­cio­nes a su pro­duc­ción, mien­tras en el mer­ca­do apa­re­cen otros pro­duc­tos cuyos pre­cios han sido aumen­ta­dos has­ta un 1000 por cien­to con res­pec­to al rollo con­ven­cio­nal y regu­la­do, dice Víc­tor Hugo Majano. 

Majano seña­la que: 

Todos los pro­duc­tos con “esca­sez” poseen altos nive­les de indus­tria­li­za­ción y son ela­bo­ra­dos por gran­des cor­po­ra­cio­nes trans­na­cio­na­les o con cone­xio­nes muy estre­chas con estas. Entre estas se debe men­cio­nar a Polar, Nestlé, Proc­ter, Kim­berly-Clark, Car­gill entre otras. A su vez estas cor­po­ra­cio­nes man­tie­nen alian­zas con com­po­nen­tes de la bur­gue­sía vene­zo­la­na dedi­ca­dos a la impor­ta­ción y dis­tri­bu­ción. Son quie­nes mane­jan las redes de dis­tri­bui­do­res de ali­men­tos al por mayor y gran­des y media­nos super­mer­ca­dos. Esta capa que pode­mos deno­mi­nar la “bur­gue­sía comer­cial-impor­ta­do­ra” es la que mane­ja la indus­tria de la publi­ci­dad de los gran­des medios de difu­sión y por tan­to de la lla­ma­da indus­tria cul­tu­ral. Y por este lado con­tro­la a los voce­ros y acto­res polí­ti­cos que adver­san a la revo­lu­ción boli­va­ria­na. Para ser pre­ci­sos hay que men­cio­nar que la prin­ci­pal figu­ra opo­si­to­ra, Hen­ri­que Capri­les, es hijo (lite­ral­men­te) de fami­lias liga­das a la impor­ta­ción de ali­men­tos y a la dis­tri­bu­ción de pelí­cu­las. Su padre fue una espe­cie de fran­qui­ci­ta­rio de Ali­men­tos Kraft y la fami­lia de su madre esta­ble­ció una de las prin­ci­pa­les cade­nas de cines del país. Asi­mis­mo sus más estre­chos cola­bo­ra­do­res pro­vie­nen de fami­lias con gran­des nego­cios de impor­ta­ción y ven­ta de equi­pos de línea blan­ca y línea gris.[20]

Los vege­ta­les, las hor­ta­li­zas, las car­nes y los pro­duc­tos rela­cio­na­dos con el man­te­ni­mien­to y fun­cio­na­mien­to de las vivien­das tam­bién regis­tran un aumen­to con­si­de­ra­ble de pre­cios, expli­ca Majano, mien­tras los empre­sa­rios se rehú­san a cum­plir la nue­va Ley de Tra­ba­jo pro­mul­ga­da por el pre­si­den­te Hugo Chá­vez en 2012, en la que se dis­po­ne, entre otras nor­ma­ti­vas en favor de la cla­se tra­ba­ja­do­ra, una reduc­ción de la jor­na­da labo­ral de 44 a 40 horas sema­na­les diurnas. 

Pese a esta situa­ción, el gobierno boli­va­riano ha con­ti­nua­do, de mane­ra equi­vo­ca­da, hacien­do un lla­ma­do a los empre­sa­rios para que tra­ba­jen en bene­fi­cio del país, a sabien­das de que lo úni­co que bus­can es la des­es­ta­bi­li­za­ción del régimen. 

Las medi­das debe­rían apun­tar a afec­tar los intere­ses de estos gru­pos pode­ro­sos para tras­pa­sar el con­trol de la eco­no­mía a la cla­se tra­ba­ja­do­ra median­te la nacio­na­li­za­ción de las empre­sas y la expro­pia­ción de aque­llas cuyos due­ños sabo­teen la pro­duc­ción y eco­no­mía venezolana. 

En mayo de 2013 el pre­si­den­te Nico­lás Madu­ro ofre­cía todo el apo­yo del gobierno para que el gru­po Polar pro­duz­ca al máxi­mo, mien­tras cele­bra­ba haber lle­ga­do a un acuer­do con el pre­si­den­te de ese oli­go­po­lio, Loren­zo Men­do­za. La for­tu­na de este repre­sen­tan­te de la oli­gar­quía vene­zo­la­na, que res­pal­dó el gol­pe fas­cis­ta de 2002, ascien­de a 4.500 millo­nes de dólares.

El gru­po Polar, que tie­ne mayo­ri­ta­ria­men­te el con­trol de la pro­duc­ción de ali­men­tos en Vene­zue­la, ha juga­do un papel fun­da­men­tal en esta gue­rra eco­nó­mi­ca des­de años ante­rio­res. Este oli­go­po­lio pro­du­ce cerea­les, hari­nas pre­co­ci­das de maíz, mar­ga­ri­nas, mer­me­la­das, cho­co­la­te en pol­vo, mayo­ne­sas, refres­cos, vinos, cer­ve­zas, enla­ta­dos del mar, hela­dos, ali­men­tos balan­cea­dos para ani­ma­les.

En mayo de 2010, en el pro­gra­ma Aló Pre­si­den­te, el Coman­dan­te Hugo Chá­vez, ins­tru­yó al enton­ces vice­pre­si­den­te eje­cu­ti­vo, Elías Jaua “para que soli­ci­te a la Fis­ca­lía Gene­ral de la Repú­bli­ca (FGR) abrir un pro­ce­di­mien­to con­tra Empre­sas Polar por aca­pa­rar ali­men­tos.”[21]

En aque­lla oca­sión el Ejér­ci­to “deco­mi­só 120 tone­la­das de ali­men­tos de los gal­po­nes de Empre­sas Polar ubi­ca­dos en la Zona Indus­trial III de Bar­qui­si­me­to, esta­do Lara, por incon­sis­ten­cias en el inven­ta­rio y aca­pa­rar estos ali­men­tos de pri­me­ra nece­si­dad para los vene­zo­la­nos y las vene­zo­la­nas.”[22]

En junio de 2010 Chá­vez adver­tía ade­más de una posi­ble nacio­na­li­za­ción de las empre­sas Polar, lo cual, lamen­ta­ble­men­te, no se ha dado has­ta la pre­sen­te fecha. 

Duran­te el año 2013 la GNB, en cum­pli­mien­to de las dis­po­si­cio­nes ema­na­das por pre­si­den­te Nico­lás Madu­ro para garan­ti­zar la sobe­ra­nía ali­men­ta­ria del pue­blo vene­zo­lano, lle­vó ade­lan­te ope­ra­ti­vos para incau­tar tone­la­das de ali­men­tos aca­pa­ra­dos por empre­sa­rios y comer­cian­tes cuyo obje­ti­vo era el de gene­rar males­tar entre la pobla­ción como resul­ta­do de la esca­sez provocada. 

El 9 de enero de 2013, la Agen­cia Vene­zo­la­na de Noti­cias infor­ma­ba que la Guar­dia Nacio­nal Boli­va­ria­na había deco­mi­sa­do 346 tone­la­das de ali­men­tos aca­pa­ra­dos, los cua­les se encon­tra­ban en un gal­pón de las empre­sas Polar. 

En agos­to de 2013, en el esta­do de Táchi­ra, la GNB deco­mi­só 40 tone­la­das de ali­men­tos como arroz, leche, acei­te, hari­na de maíz pre­co­ci­da, mayo­ne­sa así como artícu­los para la lim­pie­za y el aseo per­so­nal, infor­ma­ba en ese momen­to Vene­zo­la­na de Tele­vi­sión.[23]

En este con­tex­to, los medios pri­va­dos de comu­ni­ca­ción como el perió­di­co Hoy y El Comer­cio de Ecua­dor, fue­ron crean­do duran­te el 2013 una ima­gen de caos eco­nó­mi­co en Vene­zue­la, de la cual fun­da­men­tal­men­te res­pon­sa­bi­li­za­ron al gobierno y sus polí­ti­cas. Esto se vio acen­tua­do debi­do a la enfer­me­dad y pos­te­rior falle­ci­mien­to del pre­si­den­te Hugo Chávez: 

“La incer­ti­dum­bre polí­ti­ca pasa fac­tu­ra a la eco­no­mía vene­zo­la­na” (El Comer­cio, 10 de enero de 2013) redac­ta­do con infor­ma­cio­nes pro­ve­nien­tes de El Mer­cu­rio de Chi­le y El Nacio­nal de Venezuela: 

Azú­car, hari­na y pollo son algu­nos de los ali­men­tos que más esca­sean en los mer­ca­dos de la capi­tal vene­zo­la­na, una situa­ción fre­cuen­te des­de hace años pero que se ha agra­va­do en las últi­mas semanas. 

(…)

El pro­ble­ma es que en el gobierno de Chá­vez se han toma­do una serie de medi­das, des­de el con­trol de cam­bio has­ta las expro­pia­cio­nes, que han dis­tor­sio­na­do el fun­cio­na­mien­to de la eco­no­mía nacio­nal y han acen­tua­do la depen­den­cia de la ren­ta petro­le­ra que pro­vee el 95% de las divi­sas que entran al país.

Los des­equi­li­brios macro­eco­nó­mi­cos se agu­di­za­ron en los últi­mos dos años por­que, para garan­ti­zar la reelec­ción de Chá­vez en los comi­cios del 7 de octu­bre de 2012, el gobierno eje­cu­tó una polí­ti­ca de incre­men­to de gas­to públi­co y endeu­da­mien­to masi­vo que lle­vó el défi­cit fis­cal a un nivel cer­cano al 20% del PIB. 

“Las estan­te­rías se vacían en Vene­zue­la” (El Comer­cio, 26 de enero de 2013), infor­ma­ción acom­pa­ña­da de una foto­gra­fía con ana­que­les sin pro­duc­tos, en la que se lee en el pie de foto: “Des­abas­te­ci­mien­to elo­cuen­te. Una mujer bus­ca ali­men­tos para su hogar en un des­abas­te­ci­do mer­ca­do de la ciu­dad de Caracas.”

“La esca­sez otra vez afli­ge a los vene­zo­la­nos” (El Comer­cio, 10 de febre­ro de 2013) repro­du­ce un tra­ba­jo del The Wall Street Journal: 

Vene­zue­la está sufrien­do la mayor cri­sis de abas­te­ci­mien­to de ali­men­tos y bie­nes de con­su­mo en casi cua­tro años, y com­prar hari­na y otros artícu­los bási­cos como car­ne, azú­car, acei­te de coci­na y papel higié­ni­co se ha con­ver­ti­do en una autén­ti­ca odi­sea. Has­ta cues­ta hallar medi­ca­men­tos como los inha­la­do­res con­tra el asma. 

Los líde­res empre­sa­ria­les dicen que la expli­ca­ción es sim­ple: los con­tro­les cam­bia­rios adop­ta­dos en 2003 para impe­dir las fugas de capi­tal tam­bién com­pli­ca­ron la impor­ta­ción de bie­nes, mien­tras que la fija­ción de pre­cios máxi­mos, medi­da expan­di­da a fina­les de 2011, no cubre los cos­tos de producción. 

Los eco­no­mis­tas ase­gu­ran que la esca­sez cau­sa­da por estos fac­to­res fue exa­cer­ba­da por el gas­to exce­si­vo duran­te la cam­pa­ña de reelec­ción del pre­si­den­te Hugo Chá­vez.

En los dos artícu­los men­cio­na­dos se res­pon­sa­bi­li­za de la esca­sez de ali­men­tos a las medi­das de con­trol de pre­cios y de sali­da de divi­sas esta­ble­ci­das por el gobierno boli­va­riano, a la vez que se acu­sa al régi­men de haber exa­cer­ba­do el gas­to para favo­re­cer la reelec­ción de Chá­vez, lo cual tam­bién, según estas infor­ma­cio­nes publi­ca­das en el perió­di­co El Comer­cio, sería otra de las cau­sas de la escasez. 

El 3 de mayo de 2013 el perió­di­co Hoy publi­có un tra­ba­jo con el títu­lo: “Por lo que mues­tran sus cifras, Vene­zue­la se acer­ca a la quie­bra”, en el que afirma: 

Vene­zue­la, a cri­te­rio de los ana­lis­tas eco­nó­mi­cos no solo de ese país, sino de la región, es una bom­ba de tiem­po en mate­ria finan­cie­ra. Los núme­ros de su pano­ra­ma eco­nó­mi­co, pese a la rique­za que, en teo­ría repre­sen­ta su ingre­so petro­le­ro ($91 mil millo­nes) no cua­dran a su favor y las deu­das no per­do­nan. Pero, sobre todo, el cos­to social es alto toda­vía, pese a las pro­cla­mas guber­na­men­ta­les de que la situa­ción de los vene­zo­la­nos ha mejo­ra­do sus­tan­cial­men­te en estos 14 años de chavismo. 

En el tra­ba­jo men­cio­na­do se cita al colum­nis­ta del Mia­mi Herald, Andrés Openhei­mer, quien dice que el gobierno de Vene­zue­la ha teni­do un pobre desem­pe­ño en la lucha con­tra la pobre­za cuan­do se la com­pa­ra con otros paí­ses lati­no­ame­ri­ca­nos” para aña­dir que: 



(…) aun­que la pobre­za en Vene­zue­la cayó del 49% de la pobla­ción al 26,8 % des­de que Chá­vez asu­mió el poder en 1999, no ha sido algo de dema­sia­da rele­van­cia fren­te a los logros de Perú, por ejem­plo, que redu­jo la pobre­za del 49% al 27% de la pobla­ción duran­te el mis­mo perío­do, y Chi­le del 21% al 11%, según la CEPAL.

Mien­tras Perú, Chi­le, Bra­sil y otros paí­ses han redu­ci­do la pobre­za mien­tras atraían inver­sio­nes y diver­si­fi­ca­ban sus expor­ta­cio­nes, Vene­zue­la dila­pi­dó su ingre­so petro­le­ro en publi­ci­dad, sub­si­dios y bonos de pobre­za, petró­leo envia­do a Cuba y can­jes de cru­do por pro­duc­tos, lo que no ha dado ganan­cias en efec­ti­vo y de eso, de ili­qui­dez es de lo que más pade­ce ese país.

El ses­go infor­ma­ti­vo que­da en evi­den­cia cuan­do según los datos expues­tos en este tra­ba­jo, tan­to Vene­zue­la y Perú habrían redu­ci­do en igual por­cen­ta­je la pobre­za, pero mien­tras lo que se ha hecho en Perú es digno de resal­tar, lo rea­li­za­do en Vene­zue­la no es rele­van­te. De igual mane­ra se hace refe­ren­cia a una supues­ta dila­pi­da­ción de fon­dos por par­te de Vene­zue­la en sub­si­dios, bonos de pobre­za y el envío de petró­leo a Cuba. La preo­cu­pa­ción del gobierno boli­va­riano por mejo­rar la situa­ción de la pobla­ción más pobre en Vene­zue­la y los inter­cam­bios comer­cia­les en con­di­cio­nes diver­sas a las que his­tó­ri­ca­men­te bajo el capi­ta­lis­mo se han esta­ble­ci­do entre los paí­ses, son con­si­de­ra­das por este artícu­lo como una dila­pi­da­ción de fondos. 

Lo que no dice el perió­di­co Hoy es que en 1999 el pre­cio del barril del petró­leo vene­zo­lano se comer­cia­li­za­ba alre­de­dor de 13 dóla­res, mien­tras la OPEP esta­ba a pun­to de des­apa­re­cer. Fue gra­cias al pre­si­den­te Chá­vez que Vene­zue­la recu­pe­ró la sobe­ra­nía petro­le­ra en bene­fi­cio del pue­blo y que la OPEP se revi­ta­li­zó. Actual­men­te el pre­cio del barril del petró­leo lle­ga a los 105 dóla­res. Por otro lado la ren­ta petro­le­ra ha ser­vi­do para lle­var a cabo un sin­nú­me­ro de pro­yec­tos para el desa­rro­llo inte­gral de las y los vene­zo­la­nos. Petró­leos de Vene­zue­la (PDVSA) ha impul­sa­do el Fon­do para el Desa­rro­llo Eco­nó­mi­co y Social del País (Fon­des­pa), así como ha res­pal­da­do las diver­sas misio­nes socia­les desa­rro­lla­das por el gobierno boli­va­riano a lo lar­go de estos años. Fon­des­pa se creó en mayo de 2004 y su pro­pó­si­to es el de inver­tir los exce­den­tes petro­le­ros en obras rela­cio­na­das con la infra­es­truc­tu­ra, la via­bi­li­dad, el desa­rro­llo agrí­co­la, la salud, la edu­ca­ción. Las misio­nes socia­les tie­nen como pro­pó­si­to garan­ti­zar los dere­chos fun­da­men­ta­les a la pobla­ción, prin­ci­pal­men­te a los sec­to­res que his­tó­ri­ca­men­te fue­ron exclui­dos en Vene­zue­la. A lo lar­go de estos años se han rea­li­za­do diver­sas misio­nes en mate­ria edu­ca­ti­va, de salud, de vivien­da, de cui­da­do al adul­to mayor. A tra­vés de las misio­nes Mila­gro, Robin­son, Barrio Aden­tro, Sucre, Ali­men­ta­ción, Cien­cia, Vuel­van Caras, Guai­cai­pu­ro, Árbol, Cien­cia, Ener­gé­ti­ca se ha aten­di­do las nece­si­da­des fun­da­men­ta­les de la pobla­ción. Así, por ejem­plo, a tra­vés de la misión Mila­gro se ha podi­do aten­der y dar solu­ción a pro­ble­mas visua­les de la pobla­ción no solo vene­zo­la­na, sino lati­no­ame­ri­ca­na, lle­gan­do has­ta la pre­sen­te fecha a ser aten­di­dos 147.440 pacien­tes. De igual mane­ra, la misión Ribas ha per­mi­ti­do aten­der a la pobla­ción pobre en cen­tros de salud crea­dos con ese pro­pó­si­to. Estas misio­nes han con­ta­do con el apo­yo soli­da­rio de Cuba. 

La afir­ma­ción que se hace en el perió­di­co Hoy de que Vene­zue­la rega­la petró­leo a Cuba, no es cier­ta. Ambos paí­ses man­tie­nen acuer­dos bila­te­ra­les que no res­pon­den estric­ta­men­te a la lógi­ca mer­can­til capi­ta­lis­ta, sino que están basa­dos en prin­ci­pios de soli­da­ri­dad y ayu­da mutua. Cuba ha inte­gra­do a cer­ca de 46 mil pro­fe­sio­na­les que rea­li­zan acti­vi­da­des en más de 20 pro­gra­mas socia­les, prin­ci­pal­men­te en las áreas de la edu­ca­ción y la salud, bene­fi­cian­do a millo­nes de per­so­nas pobres.[24] El “rega­lo” de petró­leo del que habla la indus­tria mediá­ti­ca, no existe. 

Fren­te a la gue­rra eco­nó­mi­ca, el gobierno del pre­si­den­te Nico­lás Madu­ro ha dis­pues­to un sin­nú­me­ro de medi­das para enfrentarla. 

La desig­na­ción de Eduar­do Samán al fren­te del extin­to Ins­ti­tu­to para la Defen­sa de las Per­so­nas en el acce­so de los Bie­nes y Ser­vi­cios (Inde­pa­bis), enti­dad que estu­vo ads­cri­ta al Minis­te­rio del Poder Popu­lar para el Comer­cio, cuya fun­ción era la de la defen­sa y pro­tec­ción de los dere­chos e intere­ses indi­vi­dua­les y colec­ti­vos en el acce­so de las per­so­nas a los bie­nes y ser­vi­cios, fue posi­ti­vo. Samán lle­vó ade­lan­te una lucha fron­tal con­tra la corrup­ción, la espe­cu­la­ción y el acaparamiento. 

Algu­nas medi­das dis­pues­tas por el pre­si­den­te Madu­ro para que el Inde­pa­bis las eje­cu­te fue­ron: el mar­ca­je impre­so de los pre­cios de los bie­nes o ser­vi­cios decla­ra­dos o no de pri­me­ra nece­si­dad, la veri­fi­ca­ción en los esta­ble­ci­mien­tos de que los bie­nes y ser­vi­cios que se hayan adqui­ri­do se los haya hecho con divi­sas auto­ri­za­das por la Comi­sión de Admi­nis­tra­ción de Divi­sas (enti­dad des­apa­re­ci­da y que hoy for­ma par­te del Cen­tro Nacio­nal de Comer­cio Exte­rior), la fis­ca­li­za­ción de las empre­sas del Esta­do que comer­cia­li­cen bie­nes o pres­ten ser­vi­cios, la par­ti­ci­pa­ción del poder popu­lar para que en alian­za con los mili­ta­res se lle­ve ade­lan­te la lucha con­tra la espe­cu­la­ción y el aca­pa­ra­mien­to. El man­da­ta­rio Nico­lás Madu­ro plan­teó la crea­ción de una pode­ro­sa red de comi­tés popu­la­res de defen­sa de la economía. 

A tra­vés del esta­ble­ci­mien­to de la Ley Habi­li­tan­te para la Regu­la­ción de Cos­tos y Pre­cios, el gobierno de Madu­ro pre­ten­de fre­nar los actos delic­ti­vos de los empre­sa­rios y comer­cian­tes. En este cuer­po legal se esta­ble­cen nor­mas para los már­ge­nes de ganan­cia de empre­sa­rios y comer­cian­tes de has­ta un 30% máxi­mo en todas las acti­vi­da­des económicas.

Estas medi­das se suman a las toma­das bajo el gobierno del pre­si­den­te Chá­vez como el esta­ble­ci­mien­to y crea­ción de misio­nes y redes de mer­ca­dos para el abas­te­ci­mien­to de pro­duc­tos a pre­cios eco­nó­mi­cos, fun­da­men­tal­men­te a los sec­to­res popu­la­res, como Mer­cal o la Red de Abas­to Bicen­te­na­rio. La “Misión Ali­men­ta­ción” ha sido impor­tan­te para el sumi­nis­tro de pro­duc­tos de pri­me­ra nece­si­dad al pueblo. 

El Minis­te­rio del Poder Popu­lar para la Ali­men­ta­ción es el órgano encar­ga­do de lle­var ade­lan­te estas polí­ti­cas entre las que están el garan­ti­zar la segu­ri­dad ali­men­ta­ria y res­ca­tar la sobe­ra­nía en este cam­po. El pre­si­den­te Chá­vez, para con­cre­tar este obje­ti­vo, dejó sen­ta­das las bases para el desa­rro­llo de la Gran Misión Agro Vene­zue­la. A tra­vés de ésta misión se ha pre­vis­to incre­men­tar la fron­te­ra agrí­co­la y pro­pi­ciar el aumen­to en la pro­duc­ción de maíz, arroz, tri­go, legu­mi­no­sas y hor­ta­li­zas.[25]

Duran­te el pri­mer semes­tre de 1998, la pobre­za era del 49%. Actual­men­te es de 23,9%. De igual mane­ra el por­cen­ta­je de pobre­za extre­ma ha dis­mi­nui­do del 21 al 7,3%.[26]Por otro lado, entre 1999 y 2011 el con­su­mo de ali­men­tos de pri­me­ra nece­si­dad se incre­men­tó en 80%.[27]

La indus­tria de la men­ti­ra no dice nada res­pec­to a estos logros, a la vez que ocul­ta y ter­gi­ver­sa la reali­dad sobre lo que suce­de en mate­ria eco­nó­mi­ca en Venezuela. 

El 9 de enero de 2013 el perió­di­co Hoy publi­có un aná­li­sis con el títu­lo “Vene­zue­la está al bor­de del colap­so eco­nó­mi­co”. El 17 de abril del mis­mo año hacía lo mis­mo con otro tra­ba­jo con el títu­lo: “Vene­zue­la está al bor­de de lo peor”. El 16 de mayo de 2013 este perió­di­co publi­ca otra infor­ma­ción con el títu­lo: “Vene­zue­la: miles hacen cola para com­prar hari­na”. El 26 de noviem­bre de 2013 con el títu­lo: “Vene­zue­la está a un paso de lle­gar a la esca­sez abso­lu­ta” el perió­di­co Hoy afir­ma que:

Las reba­jas com­pul­si­vas de pre­cios y los pla­nes de limi­tar ganan­cias comer­cia­les en Vene­zue­la inquie­tan a ana­lis­tas, agu­di­za­ron la esca­sez por­que a las tien­das se les aca­ba­ron sus mer­can­cías y no pue­den repo­ner­las por­que las obli­gan a ven­der sus pro­duc­tos a un pre­cio por deba­jo de la realidad.

En octu­bre del año 2013 Madu­ro res­pon­sa­bi­li­zó a Fede­cá­ma­ras, Con­se­co­mer­cio y Venan­cham, orga­nis­mos de los sec­to­res empre­sa­ria­les y con víncu­los con la acti­vi­dad comer­cial, de la gue­rra eco­nó­mi­ca con­tra el régi­men, gue­rra detrás de la cual está el gobierno de EEUU. 

Los empre­sa­rios y gran­des comer­cian­tes están boi­co­tean­do la eco­no­mía del país y para ello han ocul­ta­do pro­duc­tos y han subi­do en for­ma exor­bi­tan­te los pre­cios de los ali­men­tos, elec­tro­do­més­ti­cos y otros productos. 

El 4 de diciem­bre de 2013 en un aná­li­sis del perió­di­co Hoy publi­ca­do bajo el títu­lo: “Vene­zue­la, la esca­sez se impo­ne”, dice: Aun­que la cri­sis esta­ba ya ins­ta­la­da cuan­do vivía Hugo Chá­vez, se pue­de decir que con el arri­bo de su here­de­ro polí­ti­co, Nico­lás Madu­ro, la rica nación petro­le­ra está en caí­da libre.” Este aná­li­sis se lo publi­ca acom­pa­ña­do de una cari­ca­tu­ra de Asdrú­bal en la que se ve al pre­si­den­te Madu­ro con un ros­tro pare­ci­do al de Hitler y con tan­ques de gue­rra sus­ti­tu­yen­do a sus pies, en los que se lee “decre­tos”. La ima­gen que se quie­re dar del actual pre­si­den­te de Vene­zue­la es la de un gober­nan­te auto­ri­ta­rio, cuyo régi­men está basa­do en el poder militar. 

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