Como sabéis, desde el movimiento Herrira estamos trabajando para terminar con las políticas de excepción que se aplican al colectivo de presos y presas políticas vascas. Y el reto más urgente es conseguir la libertad de los presos y presas que sufren enfermedades graves.
En las últimas semanas se han multiplicado las iniciativas para pedir su excarcelación, y aquí en Nafarroa tenemos en marcha varias dinámicas de trabajo, en colaboración con distintos agentes políticos y sociales, para pedir la libertad de Iñaki Erro, Iñaki Etxeberria, Josetxo Arizkuren y Jesus Mari Mendinueta.
Son presos que sufren patologías graves, y su estancia en prisión está contribuyendo a que empeoren y puedan llegar a ser irreversibles. Todos han pagado largas condenas y dos de ellos ya la han cumplido en su totalidad.
Por lo tanto, pedimos su excarcelación de manera urgente. Porque es una cuestión de salud, de mero respeto a los derechos humanos, y también de lógica política en una situación como la que nos encontramos.
Nos parece muy grave que los gobiernos sigan instalados en el no, que sigan jugando con la salud y la vida de los presos y sus familiares. Por eso, el sábado 31 de marzo vamos a llenar las calles de Iruñea, para decirles que ya es hora de dar pasos en positivo, y que la liberación de los presos y presas con enfermedades graves debe estar en la agenda de manera prioritaria.
El 31 de marzo nos manifestaremos para pedir un cambio en la política penitenciaria, un cambio en positivo, que contribuya a asentar un escenario de paz para todos y que también atienda al sufrimiento de los presos y sus familiares.
Llamamos a todas las fuerzas políticas, sindicales y sociales, y a toda la sociedad, a sumarse a esta manifestación y a seguir trabajando para acabar cuanto antes con las graves situaciones que se están produciendo en las cárceles.
INICIATIVAS EN NAVARRA POR LA LIBERTAD DE LOS PRESOS CON ENFERMEDADES GRAVES
- En el Parlamento de Navarra, NaBai, Bildu e Izquierda-Ezkerra han puesto en marcha una iniciativa para interesarse por la situación de Iñaki Erro, después de que fuera ingresado en Navidades por una cardiopatía grave que requirió una intervención quirúrgica. Han solicitado entrevistas con el director de Instituciones penitenciarias y con el director de la cárcel de Almería.
- Este miércoles 29 de febrero, la Comisión de Salud del Parlamento de Navarra abordará la situación de los cuatro presos navarros con enfermedades graves. Será en una comparecencia de la asociación de médicos Jaiki Hadi. A las cinco hemos convocado una concentración en las puertas del Parlamento y a las 17.30, al final de la sesión, realizaremos declaraciones a la prensa valorando el contenido de la misma.
- En el ámbito laboral, decenas de trabajadores y trabajadoras de Osasunbidea tomaron parte en la concentración del pasado viernes en la rotonda de hospitales, donde anunciaron el inicio de una recogida de firmas en el ámbito sanitario para pedir la libertad de estos cuatro presos.
- Desde el pasado 17 de febrero, la ambulancia que veis aquí está recorriendo toda Nafarroa para informar sobre la situación de estos presos, gracias al trabajo de decenas de voluntarios que la ponen en marcha todos los días, mañana y tarde. En torno a esta ambulancia se están organizando más iniciativas de las que os informaremos en las próximas semanas.
- En los pueblos y barrios de los presos con enfermedades graves también se están llevando a cabo distintas iniciativas para pedir su excarcelación.
Ante declaraciones Ministro
Las declaraciones de ayer del Ministro del Interior dejan clara una cosa: la dispersión es parte de una política penitenciaria de excepción que se aplica con fines políticos al colectivo de presos y presas políticas vascas.
Estas declaraciones se acompañan con las graves noticias que llegan de las cárceles: agresiones a presos, traslados a cárceles más lejanas, situaciones de aislamiento, presos con enfermedades graves que son retenidos en la cárcel pese a haber cumplido toda su condena…
Por lo tanto, que no hablen de una política penitenciaria individualizada, o de mero cumplimiento de la ley. Lo que están haciendo es una política de castigo colectivo, con medidas de excepción que se aplican de manera colectiva y por razones políticas.
Los gobiernos están intentando poner precio a los derechos más elementales de las personas presas. Están vulnerando sus derechos humanos al servicio de unos objetivos políticos. Es decir, están utilizando la violencia política contra los presos, presas y familiares.
Están instalados en el no, en el inmovilismo, en las políticas de venganza. Y mientras, el reloj de la dispersión sigue marcando las horas, los kilómetros, los accidentes…
Nos parece muy grave que los gobiernos se recreen en el dolor de tantos miles de personas. Porque la dispersión sigue generando sufrimiento semana tras semana, y se puede cobrar más víctimas en cualquier momento.
Nunca debiera admitirse legislación excepcional alguna, pero es escandaloso que se siga apostando por mantener estas medidas en un contexto donde la mayoría de la sociedad apuesta por soluciones. Se sigue imponiendo un castigo añadido a familias en contraposición a las ansias de paz y el momento de esperanza compartido por esa gran mayoría de la sociedad vasca.
