Donostia. La Asociación para el Desarrollo Comunitario Asodecom y la Oficina de Hermanamiento de Lasarte-Oria son dos caras de la misma moneda, los dos brazos que, de un modo u otro, han gestionado las ayudas a la cooperación y han velado por la ejecución de los supuestos proyectos para el desarrollo en el municipio nicaragüense de Somoto. Pero en ambas hay cosas que no encajan. Por un lado, la oficina ha funcionado sin entidad jurídica hasta 2009. Por otro, la Asociación para el Desarrollo Comunitario Asodecom, constituida en el año 2000 como una supuesta ONG y a la que Ana Urchueguía compró una de sus fincas de un millón de metro cuadrados en 2007, cuenta con, al menos, otras doce propiedades inmuebles sólo en el Departamento de Madriz. En total, aparecen dos propiedades urbanas y once rústicas, es decir, trece a nombre de Asodecom en el Registro Público de la Propiedad Inmueble y de lo Mercantil del Departamento de Madriz.
Pero cabe matizar, en este punto, que a fecha de diciembre de 2010, Asodecom todavía aparece como propietaria de la finca de Las Sabanas, donde Urchueguía ejerce de ganadera con hierro propio. Esto se entiende por lo que ya se explicó en un artículo publicado anteriormente. En Nicaragua, cabe la posibilidad de realizar una compra de una propiedad cualquiera, registrarla y, sin embargo, retrasar su publicación durante meses o años, según los intereses de los afectados. Por eso, la propiedad de la exalcaldesa de Lasarte-Oria sigue apareciendo entre la lista de bienes de Asodecom, además de pertenecer a Urchueguía, en ella se dedica a la actividad ganadera. Por tanto, habría que hablar sólo de doce propiedades de la ONG.
Un origen controlado
La irrupción de la Asociación de Desarrollo Comunitario en el ámbito de la cooperación en Somoto no se entiende sin el contexto político. Asodecom nace en diciembre de 2000 definida como un «Organismo No Gubernamental, apolítico, sin fines religiosos, de carácter cívico y sin fines de lucro», según rezan sus Estatutos. Su primera Junta Directiva, formada por 15 personas, está presidida por Marcio Rivas, la pareja sentimental de Ana Urchueguía por aquel entonces. Pero, ¿cómo llega este político sandinista a presidir la ONG? Antes de ocupar ese cargo, Rivas ejerce desde 1997, momento en el que Lasarte-Oria inicia su hermanamiento con Somoto, como concejal responsable de atender la Comisión de Desarrollo Comunitario (CDC), dependiente del Ayuntamiento nicaragüense.
La CDC recibe «numerosos fondos de cooperación», como reconoce el propio Rivas en una carta de diciembre de 2000 enviada a la alcaldía de Lasarte-Oria y a la que el GRUPO NOTICIAS ha podido tener acceso, «concedidos directamente por Lasarte-Oria», o gracias «a la gestión de estos con otros organismos y ayuntamientos». Aunque oficialmente Lasarte-Oria sólo envió una partida de 75.591 euros en el años 2000 a CDC, es probable que bastante dinero del remitido a la Oficina de Hermanamiento de Lasarte-Oria (OHLOS), que no tenía entidad jurídica, acabara financiando proyectos de CDC.
En el año 2000, sin embargo, Marcio Rivas pierde las primarias en su partido para ser candidato a la alcaldía de Somoto, en detrimento de Douglas A. Prado. En noviembre, su rival directo dentro del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) gana las elecciones y, por tanto, el Gobierno municipal. A partir de entonces, se intensifican los movimientos para crear Asodecom y que ésta se convierta en un ente independiente del Ayuntamiento somoteño y deudora de los planes de la CDC.
Planificación vía epístola La nueva administración, según explica Rivas a Urchueguía en otra carta de noviembre de 2000 remitida a la alcaldía de Lasarte-Oria ‑que aparece en la página siguiente‑, tiene sus propios planes para la CDC, que podrían conllevar «un cambio de mentalidad o estrategia que supondría, al igual, un cambio de personal», le advierte Rivas, quien a pesar de perder entonces las primarias, logrará alcanzar la alcaldía de Somoto en 2004, con una campaña electoral basada, principalmente, en los proyectos de cooperación que gracias al hermanamiento con Lasarte-Oria se podrán hacer si él llega a ser alcalde.
Pero en el año 2000, ante la situación creada con Douglas A Prado en la alcaldía, lo que podría suponer que el equipo de la CDC podría perder su influencia, Rivas incluido, le propone dos alternativas a Urchueguía. Por un lado, que la CDC pase a formar parte de OHLOS. Por otro, que sea Asodecom quien asuma «la estrategia» de la comisión y «su estructura administrativa y técnica».
Entre tanto, Ana Urchueguía ya se había hecho con el control absoluto del dinero de cooperación al emitir un decreto de alcaldía en el que, como publicó ayer el GRUPO NOTICIAS, se autodesignaba la única persona competente para controlar el dinero.
Es importante, entonces, controlar todo lo que recibe tanto la CDC como OHLOS, porque la comisión no solo es un destino de Lasarte-Oria, sino que también recibe los fondos que «indirectamente a través de su intermediación se han obtenido» y pone como ejemplo: «Ayuntamiento de Zumarraga, Arnedo (La Rioja), Aguimes (Canarias), etcétera» y organizaciones «como Kutxa, Comisión Pro-Somoto, Allende, etcétera».
En esta correspondencia supuestamente institucional ‑aunque las cartas que llegan a Lasarte-Oria no llevan el habitual registro de entrada porque se envían directamente al despacho de alcaldía- que mantienen, el 22 de diciembre Rivas informa a la alcaldesa socialista de que la CDC cuenta con un capital de 300.000 dólares (333.333 euros de aquella época), «entre fondos en cuentas de ahorro, mobiliario y equipo agrícola e inversiones en fondos revolventes».
Marcio reconoce que son bienes municipales, si bien informa a Urchueguía de que la Ley de Municipios contempla la posibilidad de que sean «traspasados y donados a entidades públicas o asociaciones privadas sin fines de lucro». Sin andar con rodeos, le dice, «es aquí donde con previa propuesta de la contraparte cooperante (Lasarte-Oria) se pueda solicitar al consejo o Administración Municipal el traspaso o donación de los recursos en manos de la CDC, sea bien a la Oficina de Hermanamiento (OHLOS) o Asodecom».
tres millones de dólares La respuesta ya es conocida. En este contexto nace Asodecom, quien asume todas las propiedades y valores de la Comisión de Desarrollo Comunitario, si bien desentendiéndose desde ese momento del control del Ayuntamiento somoteño, que aún estando en manos de un sandinista, Rivas considera peligroso para el equipo de empleados que perdure bajo su influencia.
Desde entonces, Asodecom ha recibido 482.162,97 euros de Lasarte-Oria entre 2001 y 2008. Pero esta suma no es más que la punta del iceberg del dinero que ha gestionado, supuestamente para desarrollar proyectos de cooperación como el de Lácteos Froilán que,AS lo que nació como una planta láctea para convertir a los campesinos en ganaderos porque el negocio de la leche era más rentable, acabó como un «lavadero de queso» para exportar a El Salvador, según explicó Mauricio Cajina, fundador de Asodecom, a Xabier Lapitz en una entrevista. De todos modos, esos casi medio millón de euros no son nada si se tiene en cuenta, por ejemplo, un informe elaborado por la propia Asodecom, autorizado por el presidente Marcio Rivas, en el que se afirma que la entidad ha ingresado más de tres millones de dólares por donaciones registradas entre finales del año 2000 y el 30 de junio de 2006.
Irregularidades en somoto (Vi)
«Caso urchueguía»
Urchueguía acude al Ayuntamiento
A pesar de que hasta el próximo jueves no hay sesión plenaria del Ayuntamiento de Lasarte-Oria, la actual delegada del Gobierno Vasco en Chile y Perú y exalcaldesa del municipio Ana Urchueguía acudió ayer a las dependencias municipales, según pudo confirmar este periódico, después de que a principios de esta semana volará de urgencia a Euskadi tras las informaciones publicadas desde el pasado sábado por este periódico. En su paso por las dependencias municipales, se reunió con el secretario del consistorio, quien reconoció que había estado con ella, si bien no quiso precisar a este periódico el contenido de su conversación con Urchueguía. Con relación a ciertas informaciones de que la exalcaldesa habría aprovechado su estancia en el Ayuntamiento para llevarse consigo documentos oficiales, el secretario negó de forma tajante que él le hubiera facilitado ningún tipo de documento bajo su responsabilidad, aunque afirmó que «no se si habrá sacado documentación porque este lugar es muy grande y hay muchas dependencias»…afirmó.