Perú. ¿Qué desa­fíos tie­ne el Plan de Acción en Géne­ro y Cam­bio Climático?

Resu­men Lati­no­ame­ri­cano, 23 de noviem­bre de 2020

Avan­ces y desa­fíos del Plan de Acción en Géne­ro y Cam­bio Cli­má­ti­co en el área prio­ri­ta­ria de bosques

Apro­ba­do en 2016 y con vigen­cia has­ta el 2021: ¿Qué avan­ces ha obte­ni­do el Plan de Acción en Géne­ro y Cam­bio Cli­má­ti­co? ¿Está sufi­cien­te­men­te ins­ti­tu­cio­na­li­za­do? ¿Ha per­mi­ti­do con­tar con data dife­ren­cia­da sobre la par­ti­ci­pa­ción de hom­bres y mujeres?

Para con­tes­tar estas y otras inte­rro­gan­tes com­par­ti­mos una serie de infor­mes sobre la agen­da cli­má­ti­ca de las muje­res indí­ge­nas des­de una pers­pec­ti­va terri­to­rial y eco­sis­té­mi­ca, los cua­les han sido ela­bo­ra­dos en el mar­co de espa­cios de refle­xión estra­té­gi­ca rea­li­za­dos por el Pro­gra­ma Mujer de la Aso­cia­ción Inter­ét­ni­ca de Desa­rro­llo de la Sel­va Perua­na (Aide­sep) con el apo­yo de la Fun­da­ción Frie­drich Ebert y la cola­bo­ra­ción de Servindi.

En el año 2016, el Minis­te­rio del Ambien­te (Minam) y el Minis­te­rio de la Mujer y Pobla­cio­nes Vul­ne­ra­bles (MIMP) apro­ba­ron el Plan de Acción en Géne­ro y Cam­bio Cli­má­ti­co (PAGCC 2016 – 2021), el cual se pre­sen­ta­ba como una herra­mien­ta para faci­li­tar la pla­ni­fi­ca­ción con enfo­que de géne­ro en mate­ria ambien­tal, ade­más de que se plan­tea la arti­cu­la­ción con los docu­men­tos estra­té­gi­cos y de pla­ni­fi­ca­ción de los dife­ren­tes sectores.

La pre­mi­sa del PAGCC está basa­da en que el cam­bio cli­má­ti­co tie­ne impac­tos dife­ren­cia­dos en hom­bres y muje­res, y que sus efec­tos tien­den a acen­tuar la des­igual­dad social y espe­cial­men­te la de géne­ro, una pre­mi­sa com­pro­ba­da a tra­vés de dife­ren­tes fuen­tes y estu­dios a nivel nacio­nal e internacional.

Se prio­ri­za­ron ocho áreas temá­ti­cas: bos­ques, recur­sos hídri­cos, ener­gía, segu­ri­dad ali­men­ta­ria, resi­duos sóli­dos, salud, edu­ca­ción y ges­tión del ries­go, y tie­ne un pla­zo de vigen­cia has­ta el 2021, y hace explí­ci­to que dicho lap­so de tiem­po se debe a la nece­si­dad de gene­rar, como pri­mer paso, infor­ma­ción dife­ren­cia­da de géne­ro en el con­tex­to de cam­bio cli­má­ti­co. ¿Cuán­ta de esa infor­ma­ción dife­ren­cia­da se ha gene­ra­do has­ta el momen­to? ¿Cuá­les son los avan­ces y desa­fíos del PAGCC?

Expec­ta­ti­vas y hallazgos

Para el área prio­ri­ta­ria de bos­ques, en rela­ción a los obje­ti­vos espe­cí­fi­cos del PAGCC, son seis los resul­ta­dos espe­ra­dos: 1) Se cuen­ta con infor­ma­ción dife­ren­cia­da sobre la par­ti­ci­pa­ción de hom­bres y muje­res; 2) Sabe­res y prác­ti­cas ances­tra­les y loca­les que con­tri­bu­yen a la miti­ga­ción y adap­ta­ción al cam­bio cli­má­ti­co; 3) Enti­da­des públi­cas del Sina­for con capa­ci­da­des for­ta­le­ci­das para incor­po­rar el enfo­que de géne­ro; 4) Orga­ni­za­cio­nes de ges­tión con capa­ci­da­des for­ta­le­ci­das en la ges­tión de bos­ques, cam­bio cli­má­ti­co y géne­ro; 5) Los ins­tru­men­tos nor­ma­ti­vos de ges­tión incor­po­ran el enfo­que de géne­ro; y 6) Incre­men­to de pro­yec­tos de mane­jo fores­tal y de fau­na sil­ves­tre en los que par­ti­ci­pan mujeres.

Sin embar­go, el pano­ra­ma real es dis­tin­to. A tra­vés de entre­vis­tas y sobre todo revi­sión docu­men­ta­ria del Minam, el Pro­gra­ma Nacio­nal de Con­ser­va­ción de Bos­ques para la Miti­ga­ción del Cam­bio Cli­má­ti­co (PNCBMCC), el Gobierno Regio­nal de San Mar­tín, Ser­for y Ser­nanp, se deter­mi­nó que el PAGCC no está posi­cio­na­do e ins­ti­tu­cio­na­li­za­do como se esperaba.

De la revi­sión docu­men­ta­ria sobre ins­tru­men­tos de pla­ni­fi­ca­ción ins­ti­tu­cio­na­les, se ana­li­za­ron tres pro­gra­mas pre­su­pues­ta­les: 0130, 0057 y 0144. Se halló que lo tres pro­gra­mas no con­si­de­ran acti­vi­da­des e indi­ca­do­res que apli­quen el enfo­que de género.

El plan no cuen­ta con sis­te­ma de moni­to­reo y repor­te de indi­ca­do­res y, ade­más, la imple­men­ta­ción del PAGCC está atra­ve­sa­da por un limi­ta­do recur­so humano. 

Esta infor­ma­ción se corro­bo­ra con las decla­ra­cio­nes de algu­nos fun­cio­na­rios, quie­nes des­co­no­cen o cono­cen poco sobre el PAGCC, así como de la exis­ten­cia de una dis­po­si­ción explí­ci­ta para su imple­men­ta­ción. Este débil posi­cio­na­mien­to oca­sio­na una inade­cua­da sis­te­ma­ti­za­ción y difi­cul­ta poder tener datos de avan­ces reales. El plan no cuen­ta con sis­te­ma de moni­to­reo y repor­te de indi­ca­do­res y, ade­más, la imple­men­ta­ción del PAGCC está atra­ve­sa­da por un limi­ta­do recur­so humano.

La per­cep­ción gene­ral es que las accio­nes del PAGCC y del enfo­que de géne­ro pue­den coli­sio­nar en el con­tex­to indí­ge­na y que ‘for­zar’ su incor­po­ra­ción pue­de ser adver­so a las accio­nes plan­tea­das en el terri­to­rio. Esta afir­ma­ción es un indi­ca­dor de la nece­si­dad de com­pren­der teó­ri­ca y prác­ti­ca­men­te lo que sig­ni­fi­ca la trans­ver­sa­li­za­ción y, por tan­to, que el logro del Resul­ta­do 3 (del PAGCC) aún está en proceso.

Otros hallaz­gos son a dis­cre­ción para que las ins­ti­tu­cio­nes incor­po­ren las accio­nes del PAGCC en sus pre­su­pues­tos anua­les, la eje­cu­ción cen­tra­li­za­da del docu­men­to, limi­ta­das capa­ci­da­des en las ins­ti­tu­cio­nes, ins­tru­men­tos y recur­sos, etc.

El PAGCC en el Pro­gra­ma de Bosques

Entre los prin­ci­pa­les meca­nis­mos de inter­ven­ción del PNCBMCC se encuen­tra la Trans­fe­ren­cia Direc­ta Con­di­cio­na­da (TDC), un sub­si­dio eco­nó­mi­co que se brin­da a comu­ni­da­des nati­vas y cam­pe­si­nas titu­la­das, para for­ta­le­cer las capa­ci­da­des de con­ser­va­ción de sus bos­ques y favo­re­cer la reduc­ción de la deforestación.

Sobre este, Pine­do (2018) afir­ma que exis­ten cier­tas estra­te­gias y accio­nes con enfo­que de géne­ro, pero sin herra­mien­tas espe­cí­fi­cas para su segui­mien­to. Agre­ga que en todo el pro­ce­so de afi­lia­ción, pro­ce­so cla­ve para la fir­ma del con­ve­nio, las meto­do­lo­gías son homo­gé­neas y asu­men que la “demo­cra­cia comu­nal”, como tal, ya reco­ge los intere­ses y nece­si­da­des de hom­bres y muje­res, de jóve­nes y per­so­nas adul­tas, lo cual no es exac­ta­men­te de ese modo (p. 70). 

Si bien en las áreas zona­les se están tra­ba­jan­do estra­te­gias y meca­nis­mos con hom­bres y muje­res, que podrían res­pon­der a los indi­ca­do­res del PAGCC, estos no han sido pla­ni­fi­ca­dos nece­sa­ria­men­te con esa inten­ción y mucho menos están sien­do sistematizados.

Un segun­do meca­nis­mo impor­tan­te es la Ges­tión de Pro­gra­mas y Pro­yec­tos, a tra­vés del cual el PNCBCC imple­men­ta el Pro­gra­ma de Inver­sión Fores­tal del Perú (FIP Perú), una ini­cia­ti­va de los Fon­dos de Inver­sión para el Cli­ma (CIF) diri­gi­do a comu­ni­da­des nati­vas, peque­ños usua­rios del bos­que, ser­vi­do­res públi­cos, orga­ni­za­cio­nes indí­ge­nas y socie­dad civil en once depar­ta­men­tos amazónicos.

Este pro­gra­ma cuen­ta con cua­tro Pro­yec­tos de Inver­sión Públi­ca (PIP), los cua­les están vin­cu­la­dos finan­cie­ra­men­te con el Ban­co Inter­ame­ri­cano de Desa­rro­llo y el Ban­co Mun­dial y, de acuer­do con sus polí­ti­cas y las del FIP, los pro­yec­tos deben apli­car sal­va­guar­das ambien­ta­les y socia­les. Estas sal­va­guar­das, de acuer­do con la eva­lua­ción ambien­tal y social (2017), evi­den­cian el enfo­que y vin­cu­la­ción con el PAGCC, pues plan­tean cua­tro líneas de acción para for­ta­le­cer estas dimen­sio­nes. Una de ellas es la Línea de Acción 4: Inter­cul­tu­ra­li­dad, Géne­ro y Comu­ni­ca­ción o Gene­rar con­di­cio­nes socio­cul­tu­ral­men­te apro­pia­das para la par­ti­ci­pa­ción de las muje­res, jóve­nes, adultos(as) y per­so­nas mayo­res en las comunidades.

Tan­to los Pla­nes de Ges­tión de Incen­ti­vo (PGI) de las TDC, y los PIP del FIP, cons­ti­tu­yen opor­tu­ni­da­des para adop­tar en enfo­que de géne­ro y cum­plir con los obje­ti­vos del PAGCC, pues estos espa­cios se con­fi­gu­ran como el momen­to de la refle­xión con­jun­ta y a la vez dife­ren­cia­da res­pec­to a las cau­sas e impac­tos de la defo­res­ta­ción, pro­pi­cios para rea­li­zar diag­nós­ti­cos y aná­li­sis de roles de géne­ro y dis­tri­bu­ción de bene­fi­cios, de acuer­do con los intere­ses y nece­si­da­des de hom­bres y mujeres.

Avan­ces del PAGCC

Se pudo iden­ti­fi­car avan­ces como diag­nós­ti­cos de accio­nes no made­ra­bles, la crea­ción de la Pla­ta­for­ma Cli­má­ti­ca Indí­ge­na y la incor­po­ra­ción de las accio­nes del PAGCC y el enfo­que de géne­ro en las NDC (apro­xi­ma­da­men­te en 58 % del total); Ser­nanp, que cuen­ta con la guía Géne­ro en la Ges­tión de Áreas Natu­ra­les Pro­te­gi­das; Ser­for, que inclu­ye el enfo­que de géne­ro en su Plan Estra­té­gi­co Ins­ti­tu­cio­nal 2019 – 2020, y tam­bién a tra­vés de su Pro­gra­ma de Desa­rro­llo Fores­tal Sos­te­ni­ble, Inclu­si­vo y Com­pe­ti­ti­vo en la Ama­zo­nía Perua­na, en San Martín.

Otras medi­das afir­ma­ti­vas que miti­gan bre­chas encon­tra­das son la pre­sen­cia de intér­pre­tes para garan­ti­zar una bue­na par­ti­ci­pa­ción de las muje­res, la gene­ra­ción de espa­cios solo de muje­res para el buen acce­so a la infor­ma­ción, y la con­si­de­ra­ción de la dis­po­ni­bi­li­dad de hora­rios de las muje­res para acti­vi­da­des de los programas.

Por su par­te, el MIMP cum­ple con su rol de arti­cu­la­ción y acom­pa­ña­mien­to al Minam, por ejem­plo, han tra­ba­ja­do indi­ca­do­res de los enfo­ques trans­ver­sa­les y guía para la ela­bo­ra­ción de las NDC con enfo­que de género.

Todos los pla­nes, indi­ca­do­res o metas rela­cio­na­dos con la polí­ti­ca de géne­ro requie­ren de pro­ce­sos sos­te­ni­dos y per­se­ve­ran­tes, por­que se tra­ta de un cam­bio de para­dig­mas en el ser­vi­cio del Esta­do peruano. 

Desa­fíos del PAGCC

Los avan­ces antes des­cri­tos enfren­tan dis­tin­tos desa­fíos. El pri­me­ro refie­re al pro­ce­so de moni­to­reo y repor­te de indi­ca­do­res. Urge una pla­ta­for­ma de moni­to­reo nacio­nal para que todos los sec­to­res repor­ten sus avan­ces en refe­ren­cia a pla­nes como el PAGCC o el enfo­que de géne­ro, con miras a los gran­des even­tos o cum­bres ambientales.

Un segun­do desa­fío gira en torno al pro­ce­so de la des­cen­tra­li­za­ción. El PAGCC requie­re de una mira­da más des­cen­tra­li­za­da y, a un año de cum­plir su tiem­po de vigen­cia ofi­cial, podría ver­se como una opor­tu­ni­dad para replan­tear res­pon­sa­bles, pre­su­pues­to y resul­ta­dos en los terri­to­rios. Un ter­cer desa­fío es la dis­cre­cio­na­li­dad de las ins­ti­tu­cio­nes para incor­po­rar las accio­nes en sus pre­su­pues­tos anua­les. Es impor­tan­te insis­tir en los enfo­ques trans­ver­sa­les en la pla­ni­fi­ca­ción y que las accio­nes del PAGCC pue­dan ver­se como par­te de los obje­ti­vos de las ins­ti­tu­cio­nes. Nin­gún plan sin pre­su­pues­to es viable.

Final­men­te, un desa­fío cla­ve con­cier­ne a las capa­ci­da­des de los ser­vi­do­res. Sue­len hallar­se resis­ten­cias al tema por el patriar­ca­do estruc­tu­ral e his­tó­ri­co y cono­ci­mien­tos limi­ta­dos sobre cómo incor­po­rar el enfo­que, cons­truir indi­ca­do­res y ela­bo­rar repor­tes. Enton­ces, el for­ta­le­ci­mien­to de capa­ci­da­des es impe­ra­ti­vo y debe ser sos­te­ni­do por­que, ade­más, no cuen­tan con ins­tru­men­tos ni linea­mien­tos de pla­ni­fi­ca­ción con el enfoque.

El papel del Esta­do y de las orga­ni­za­cio­nes indígenas

Todos los pla­nes, indi­ca­do­res o metas rela­cio­na­dos con la polí­ti­ca de géne­ro requie­ren de pro­ce­sos sos­te­ni­dos y per­se­ve­ran­tes, por­que se tra­ta de un cam­bio de para­dig­mas en el ser­vi­cio del Esta­do peruano; por lo tan­to, exis­te una diver­si­dad de nece­si­da­des que den sopor­te y pre­sio­nen su apli­ca­ción des­de las mis­mas ins­ti­tu­cio­nes del Esta­do y, por supues­to, des­de las orga­ni­za­cio­nes indígenas.

Des­de el Esta­do, es nece­sa­rio ate­rri­zar este tipo de docu­men­tos en el terri­to­rio, no solo con los gobier­nos regio­na­les, sino tam­bién en los pla­nes ope­ra­ti­vos de las ins­ti­tu­cio­nes invo­lu­cra­das y con el lla­ma­do a la coope­ra­ción interinstitucional.

Des­de las orga­ni­za­cio­nes indí­ge­nas, se debe inci­dir y man­te­ner una pos­tu­ra crí­ti­ca fren­te al Esta­do, por ello, la repre­sen­ta­ti­vi­dad de las muje­res indí­ge­nas en estos espa­cios es vital. 

Des­de las orga­ni­za­cio­nes indí­ge­nas, se debe inci­dir y man­te­ner una pos­tu­ra crí­ti­ca fren­te al Esta­do, por ello, la repre­sen­ta­ti­vi­dad de las muje­res indí­ge­nas en estos espa­cios es vital. La vigi­lan­cia y la exi­gen­cia debe venir des­de los terri­to­rios, des­de ins­ti­tu­cio­nes como la Aso­cia­ción Inter­ét­ni­ca de Desa­rro­llo de la Sel­va Perua­na (Aide­sep), cuyo rol es velar por el cum­pli­mien­to de este tipo de docu­men­tos y, más impor­tan­te aún, tam­bién deben pro­pi­ciar que más muje­res indí­ge­nas desa­rro­llen con­cien­cia de géne­ro, como un legí­ti­mo dere­cho que cie­rra bre­chas de des­igual­dad res­pec­to al uso y acce­so de los recur­sos y la toma de deci­sio­nes res­pec­to a su entorno.

FUENTE: SERVINDI

Itu­rria /​Fuen­te

Artikulua gustoko al duzu? / ¿Te ha gustado este artículo?

Twitter
Facebook
Telegram

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *