Argen­ti­na. San Mar­tin y la his­to­ria en disputa

Por Gui­ller­mo Cie­za, Resu­men Lati­no­ame­ri­cano, 16 de agos­to 2020.

Este 17 de agos­to la dere­cha argen­ti­na vol­ve­rá a uti­li­zar la figu­ra de Jose de San Mar­tín y la ban­de­ra nacio­nal para seguir pre­sio­nan­do por su actual deman­da polí­ti­ca: de no hacer­se car­go de la cri­sis eco­nó­mi­ca en nom­bre de la liber­tad.
En nues­tro país, como en todos los luga­res del mun­do regi­dos por la lógi­ca del capi­tal, la dere­cha dispu­ta el sen­ti­do de cada fecha, pró­cer, sím­bo­lo, o pala­bra que ten­ga algún valor para el pue­blo. Y el gra­do de apro­pia­ción de esas fechas, pró­ce­res, sim­bo­los o pala­bras, es una refe­ren­cia del nivel de domi­na­ción que ejer­ce el capi­tal y sus expre­sio­nes ideo­ló­gi­co poli­ti­cas sobre los pue­blos. A modo de ejem­plo, la figu­ra de Jose Mar­tí y la ban­de­ra cuba­na son patri­mo­nio indis­cu­ti­ble de la ges­ta revo­lu­cio­na­ria enca­be­za­da por Fidel. La figu­ra de Simón Bolí­var y la ban­de­ra vene­zo­la­na, son patri­mo­nio del cha­vis­mo. En la Argen­ti­na no suce­de lo mis­mo y por aho­ra la oli­gar­quía pare­ce haber gana­do la bata­lla.
Resul­ta difi­cil aso­ciar la figu­ra de José de San Mar­tín a nues­tra dere­cha oli­gár­qui­ca. Ya sólo el aspec­to físi­co de San Mar­tin, su color de piel y su nariz agui­le­ña que denun­cia­ba su pro­ce­den­cia mes­ti­za, gene­ra­ban des­con­fian­za en las éli­tes por­te­ñas. Para la oli­gar­quía por­te­ña San Mar­tín fue «el sol­da­do­te», para la oli­gar­quía lime­ña «el cho­lo de las Misio­nes». Es cier­to que se casó con una Esca­la­da, una fami­lia adi­ne­ra­da y de lina­je por per­te­ne­cer a las fun­da­do­ras de Bue­nos Aires, pero tam­bién con la excep­cio­na­li­dad de que era una fami­lia patrio­ta. Dos her­ma­nos varo­nes de Reme­dios: Manuel y Mariano, fue­ron a la gue­rra. Las eli­tes por­te­ñas, lo mis­mo que la oli­gar­quía cuya­na no man­da­ban sus hijos a la gue­rra. Sobre ese tema escri­bi­rá San Mar­tin: «Los ricos y los terra­te­nien­tes se nie­gan a luchar. No quie­ren man­dar a sus hijos a la bata­lla. Me dicen que envia­rán a tres sir­vien­tes por cada hijo, sólo para no tener que pagar las mul­tas. Que a ellos no les impor­ta seguir sien­do una colo­nia. Sus hijos que­dan en sus casas, gor­dos y cómo­dos… Un día se sabrá que nues­tra patria fue libe­ra­da por los pobres, y los hijos de los pobres, nues­tros indios y los negros, que ya no vol­ve­rán a ser escla­vos de nadie».
En la déca­da del 70 el desa­rro­llo de movi­mien­tos revo­lu­cio­na­rios en la Argen­ti­na puso en dispu­ta la figu­ra de San Mar­tin por cues­tio­nes pro­gra­má­ti­cas, pero tam­bién por cues­tio­nes que hacían a la con­cep­ción del ejér­ci­to.
San Mar­tín luchó por la inde­pen­den­cia polí­ti­ca del país y de Nues­tra­mé­ri­ca, por lo que no podía ser rei­vin­di­ca­do por las Fuer­zas Arma­das que habían lle­ga­do al poder con el gol­pe mili­tar de Onga­nía de 1966 y que eran total­men­te subor­di­na­das a las polí­ti­cas de Esta­dos Uni­dos.
San Mar­tín tenía una for­ma­ción mili­tar clá­si­ca euro­pea, pero rei­vin­di­có la noción de ejer­ci­to como «pue­blo en armas». En con­tra­dic­ción con otros mili­ta­res de la épo­ca como Ron­deau o Are­na­les, San Mar­tín podía inte­grar en su estra­te­gia mili­tar las gue­rri­llas mes­ti­zas que lide­ra­ba Güe­mes o las tro­pas ori­gi­na­rias que acom­pa­ña­ban a Manuel Padi­lla, Jua­na Azur­duy o Jose Miguel Lan­za. Todas las orga­ni­za­cio­nes arma­das de los años 70 rei­vin­di­ca­ron la con­cep­ción de «pue­blo en armas», la figu­ra de San Mar­tín y la ban­de­ra nacional.

Para cono­cer el pen­sa­mien­to de San Mar­tín es con­ve­nien­te repa­sar docu­men­tos his­tó­ri­cos como su pro­cla­ma al Ejer­ci­to de los Andes:
«Com­pa­ñe­ros del Ejér­ci­to de los Andes: Ya no que­da duda de que una fuer­te expe­di­ción espa­ño­la vie­ne a ata­car­nos; sin duda algu­na los galle­gos creen que esta­mos can­sa­dos de pelear y que nues­tros sables y bayo­ne­tas ya no cor­tan ni ensar­tan; vamos a des­en­ga­ñar­los. La gue­rra se la tene­mos que hacer del modo que poda­mos. Si no tene­mos dine­ro, car­ne y un peda­zo de taba­co no nos han de fal­tar; cuan­do se aca­ben los ves­tua­rios, nos ves­ti­re­mos con las baye­ti­tas que nos tra­ba­jan nues­tras muje­res y si no, anda­re­mos en pelo­ta como nues­tros pai­sa­nos los indios. Sea­mos libres y lo demás no impor­ta nada. La muer­te es mejor que ser escla­vos de los matu­rran­gos. Com­pa­ñe­ros, jure­mos no dejar las armas de la mano has­ta ver el país ente­ra­men­te libre, o morir con ellas como hom­bres de cora­je «
La pri­me­ra obser­va­ción es que San Mar­tin era un mili­tar que daba a sus subor­di­na­dos el tra­to «com­pa­ñe­ros», la segun­da es que valo­ra­ba a los ori­gi­na­rios como sus «pai­sa­nos», la ter­ce­ra es que los inter­pe­la­ba a luchar por la liber­tad, aun­que les fal­te casi todo.
El tra­to de com­pa­ñe­ros es cohe­ren­te con la con­cep­ción de «pue­blo en armas». Lla­mar a los ori­gi­na­rios como «sus pai­sa­nos», se corres­pon­día con la mira­da que tenían los líde­res inde­pen­den­tis­tas mas lúci­dos sobre los pue­blos pre­exis­ten­tes que con­si­de­ra­ban sus luchas como una con­ti­nui­dad de la resis­ten­cia ori­gi­na­ria a tres­cien­tos años de domi­na­ción euro­pea. Los pue­blos ori­gi­na­rios eran, des­de esta con­cep­ción, «com­pa­ñe­ros de lucha» como los gua­ra­níes, cha­rruas, ayma­ra y que­chuas que for­ma­ban par­te de los ejér­ci­tos inde­pen­den­tis­tas, o eran «alia­dos» como los mapu­ches. Le inter­pe­la­ción a los pue­blos a luchar por la liber­tad aun en las peo­res con­di­cio­nes, tie­ne que ver con una mira­da, tam­bien en dispu­ta sobre la iden­ti­dad de los pue­blos.
San Mar­tín, Simón Bolí­var, Jua­na Azur­duy, Arti­gas, tenían una con­fian­za enor­me en los pue­blos ame­ri­ca­nos , en opo­si­cion al men­sa­je de años de colo­ni­za­ción que los carac­te­ri­za­ba como flo­jos, cobar­des, bár­ba­ros, sal­va­jes, vagos, cani­ba­les, etc. Dos­cien­tos años des­pués Hugo Cha­vez va a plan­tear esta cues­tión de la iden­ti­dad sobre la mesa: «duran­te años nos dije­ron que somos un pue­blo de flo­jos, y no es asi. Somos un pue­blo de liber­ta­do­res «.
La oli­gar­quía argen­ti­na ha teni­do otras mira­da sobre nues­tros pue­blos. Vale la pena leer la opi­nión de Domin­go F. Sar­mien­to, a quien han rei­vin­di­ca­do como pró­cer de la Edu­ca­ción, que escri­bía: “Se nos habla de gau­chos… la lucha ha dado cuen­ta de ellos, de toda esa chus­ma de hara­ga­nes. No tra­te de eco­no­mi­zar san­gre de gau­chos. Este es un abono que es pre­ci­so hacer útil al país. La san­gre de esa chus­ma crio­lla inci­vil, bár­ba­ra y ruda es lo úni­co que tie­nen de seres huma­nos”. Car­ta de Domin­go F. sar­mien­to a Bar­to­lo­mé Mitre. 20 de sep­tiem­bre de 1861. Y tam­bien : «.¿Logra­re­mos exter­mi­nar a los indios? Por los sal­va­jes de Amé­ri­ca sien­to una inven­ci­ble repug­nan­cia sin poder­lo reme­diar. Esa cana­lla no son más que unos indios asque­ro­sos a quie­nes man­da­ría col­gar aho­ra si reapa­re­cie­sen. Lau­ta­ro y Cau­po­li­cán son unos indios pio­jo­sos, por­que así son todos. Inca­pa­ces de pro­gre­so, su exter­mi­nio es pro­vi­den­cial y útil, subli­me y gran­de. Se los debe exter­mi­nar sin ni siquie­ra per­do­nar al peque­ño, que tie­ne ya el odio ins­tin­ti­vo al hom­bre civi­li­za­do”. El Nacio­nal 25 –nov – 1876
Como se advier­te al leer estas citas, la dispu­ta sobre la ver­da­de­ra iden­ti­dad de nues­tro pue­blo es anti­gua. En otras pala­bras: ¿quié­nes somos los argen­ti­nos y argen­ti­nas ?, ¿quié­nes somos los y las ame­ri­ca­nas que vivi­mos al sur del rio Bra­vo?. Estas pre­gun­tas han teni­do his­to­ri­ca­men­te dos ver­sio­nes en pug­na: la de quie­nes apos­ta­mos a cam­bios revo­lu­cio­na­rios o la de la dere­cha oli­gar­qui­ca . Esa dispu­ta tam­bien esta vin­cu­la­da a como juz­ga­mos deter­mi­na­dos acon­te­ci­mien­tos his­to­ri­cos:
¿Qué fue­ron las luchas inde­pen­den­tis­tas?. ¿ Una con­ti­nui­dad de las rebe­lio­nes ori­gi­na­rias, sus­ten­ta­das por un nue­vo suje­to social popu­lar plu­ri­et­ni­co? ¿O una anéc­do­ta local de las dispu­tas entre euro­peos a prin­ci­pios del siglo XIX?
¿Cuán­do nació la Nación Argen­ti­na?. ¿Con las luchas inde­pen­den­tis­tas, o al con­for­mar­se el Esta­do oli­gar­qui­co y la inva­sión a terri­to­rios mapu­ches?
¿Qué ocu­rrió en la deca­da del 70 ? ¿Fue una arre­me­ti­da revo­lu­cio­na­ria que no pudo con­cre­tar­se? ¿ O una deca­da de locu­ra y muer­te?
¿Qué ocu­rrió en diciem­bre del 2001? ¿ Fue una rebe­lion popu­lar lumi­no­sa? ¿ O fue un infierno, del que por suer­te pudi­mos salir?
Resu­mien­do: ¿qué es lo que defi­ne la iden­ti­dad de un pue­blo?: ¿ Sus bata­llas heroi­cas por ser más libres y más dig­nos, incluí­das sus derro­tas? o ¿ los crí­me­nes de sus oli­gar­quías?.
Tene­mos que ele­gir entre esas dos ver­sio­nes. La dere­cha argen­ti­na y todo el pen­sa­mien­to bur­gués no se equi­vo­ca nun­ca cuan­do le hacen esas pre­gun­tas. Y se atri­bu­yen lo pro­pio y lo ajeno
En la dispu­ta de sen­ti­dos de nues­tra his­to­ria, este 17 de agos­to va a sacar­nos una foto.

  • La dere­cha va a apro­piar­se de la fecha movi­li­zán­do­se por sus deman­das polí­ti­cas y apro­pian­do­se de San Mar­tín y la ban­de­ra nacional.
  • Nues­tra izquier­da her­bí­vo­ra y aver­gon­za­da va a que­dar­se muda, o peor aún va a hacer­se car­go de que San Mar­tin y la ban­de­ra nacio­nal le per­te­ne­cen a la derecha.
  • El Par­ti­do de gobierno, va a recla­mar por el robo de la fecha y la ban­de­ra, más des­mo­vi­li­za­do que nun­ca, y es de espe­rar que no hable el Pre­si­den­te por­que pue­de suce­der que vuel­va a rei­vin­di­car a Domin­go F. Sarmiento.
  • Espe­ra­mos escu­char otras voces.

Itu­rria /​Fuen­te

Artikulua gustoko al duzu? / ¿Te ha gustado este artículo?

Twitter
Facebook
Telegram

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *