por César J. Ayala /Resumen Latinoamericano, 13 de julio de 2020
En 2018, 64% de los puertorriqueños vivían en los 50 estados y la capital federal, el otro 36% en la Isla de Puerto Rico. Al comenzar el siglo la población de la Isla aventajaba, aunque por poco, a la población puertorriqueña de los 50 estados. La ventaja se tornó a favor de los 50 estados en 2006, año en que se terminan las exenciones contributivas 936 en Puerto Rico y se acelera el éxodo iniciado por la pérdida de empleos industriales en la Isla. La economía de Puerto Rico, que a través del siglo veinte nunca pudo proveer suficientes empleos a la población, empezó a colapsar con la eliminación de las 936. Cuando se publiquen los datos del censo de los Estados Unidos del 2020, por lo menos dos terceras partes de los puertorriqueños van a estar en los 50 estados, y un tercio en la Isla. Los puertorriqueños son, hoy por hoy, un pueblo diaspórico.
El aumento de la población puertorriqueña continental se produce simultáneamente con la diminución absoluta de la población de la Isla. Puerto Rico tenía más gente en el año 2000 que hoy. El gran éxodo de las últimas dos décadas difiere de la gran emigración puertorriqueña de los años 1950 en que aquella ola migratoria no resultó en la diminución absoluta de la población de la isla, la cual siguió creciendo a pesar del gran número de puertorriqueños que partía para los Estados Unidos. Pero en la ola actual, el éxodo y las tasas de natalidad muy reducidas han resultado en la merma de la población de la Isla de 3,810,605 habitantes en 2000 a 3,193,354 en 2018, una diminución de 16%. Podríamos decir que uno de cada seis habitantes se ha ido.
Fuente: Censo de EEUU, American Community Survey, 2000 – 2018.
El flujo migratorio de las últimas dos décadas también difiere del de 1950 en cuanto a sus destinos. El gran polo receptor de los años cincuenta fue la ciudad de Nueva York, y en menor medida, ciudades como Filadelfia y Chicago. En el siglo veintiuno el principal destino de los puertorriqueños es el estado de la Florida, que hoy por hoy mantiene la mayor población puertorriqueña, que sobrepasa a la del estado de Nueva York. En el 2018, vivían en el estado de Nueva York 1,073,673 puertorriqueños, 29,738 menos que en el año 2000. En ese mismo periodo la población puertorriqueña de la Florida aumentó en 690,000 personas, para alcanzar la cifra de 1,171,637 habitantes puertorriqueños. Aunque una parte de este aumento gigantesco se debe al nacimiento de niños puertorriqueños en ese estado y a la inmigración de boricuas de otros estados, la mayoría del aumento se debe al flujo de residentes de la Isla. En conjunto, los dos estados de mayor concentración de población boricua, Florida y Nueva York, representan casi el 40% de los 5,771,813 puertorriqueños que viven en el continente (año 2018).
Hay otros estados que experimentaron gran aumento de la población puertorriqueña entre el 2000 y el 2018. En Pennsylvania el aumento fue de 269,282, para alcanzar una población puertorriqueña de 472,213. En Texas el incremento fue de 129,368, totalizando 213,809 residentes boricuas, mientras que en Massachusetts el aumento fue de 124,182 para alcanzar la cifra de 329,532. La población puertorriqueña de los cincuenta estados, que pronto alcanzará la cifra de 6 millones de personas, se encuentra distribuida como indica la tabla al final de esta nota.
De estos hechos demográficos surgen muchas interrogantes. ¿Qué significa que dos terceras partes de los boricuas vivan fuera de la Isla? Evidentemente, los puertorriqueños son un pueblo que habla dos idiomas, pero no todos los puertorriqueños hablan dos idiomas. ¿Qué impacto tiene sobre la Isla, y sus opciones de estatus político, el hecho demográfico de una mayoría boricua en los 50 estados? ¿Persistirá en Estados Unidos la identidad puertorriqueña? ¿Cómo figura el hecho demográfico puertorriqueño dentro del marco de una nación estadounidense muy cambiada, en la cual uno de cada seis residentes (y pronto uno de cada cinco) es hispano? Ya hay más de 60 millones de Hispanos en Estados Unidos (59,740,273 en el año 2018), lo cual en términos económicos representa un producto económico mayor al de los países latinoamericanos más poblados (Brasil, México). El creciente peso demográfico latino en Estados Unidos representa, potencialmente, un poder económico y político capaz de redefinir el sistema político norteamericano. ¿Qué significa todo esto para Puerto Rico? No tenemos las respuestas, pero por el momento, vale la pena ir formulando las preguntas.
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*Contenido recuperado de website del autor: 
https://www.sscnet.ucla.edu/soc/faculty/ayala/prdiaspora/
FUENTE: 80 Grados
