En 1972, el Estado francés plantea a construcción de un aeropuerto en Notre-Dame-des-Landes en una superficie de 1.350 hectáreas, para suplir el que existe en Nantes. Decretó la ZAD (Zona de desarrollo/ordenación diferido
). Rápidamente se organizóala oposición a este proyecto y la ZAD se convierte para los defensores del territorio en la Zona A Defender. En 2007 se hace una primera ocupación de la ZAD. La lucha continúa, así como la ocupación de la ZAD desde entonces.
El movimiento de las ZAD tiene sus orígenes en la protesta contra los grandes proyectos declarados de utilidad pública pero contestados en nombre de la defensa del medio ambiente, del derecho de las poblaciones locales a decidir el futuro de sus territorios y del rechazo de una concepción de la economía productivista. En Francia los antecedentes más conocidos de este movimientos de las ZAD fueron la lucha de Larzac (1971−1981) y las manifestaciones contra el proyecto de la central nuclear en Creys-Malville, en Isère, en 1977, y en Plogoff a finales de los años 1970 y principios de los años 1980.
Respecto al aeropuerto en Notre-Dame-des-Landes, el proyecto del Estado francés es construir una plataforma económica, Gran Oeste
, de amplitud internacional yendo de Nantes a Saint Nazaire, dos ciudades hoy, que formarían una sola y gran metrópoli. La realización de esta plataforma necesita el control; tanto del cielo, del mar, que de la tierra a través el cambio del actual aeropuerto de Nantes por uno nuevo en Notre-Dame ‑des-Landes. Pero también el crecimiento del puerto de Saint Nazaire, la construcción de nuevas carreteras y autopistas…
Los y las ocupantes del ZAD explican de esta manera la ocupación: Nuestros objetivos, viviendo sobre el lugar previsto para el aeropuerto, son varios: vivir sobre un territorio en lucha, lo que nos permite estar más cerca de las personas que se oponen al megaproyecto desde hace 40 años y poder actuar en los tiempos de las obras; aprovechar los espacios abandonados para aprender a vivir juntos, cosechar la tierra, ser más autónomo respecto al sistema capitalista
.
El movimiento anti-aeropuerto es un conjunto de grupos, colectivos y personas con ideas comunes, pero también con muchas diferencias, pero que se unen en la lucha de la defensa del territorio en el que se quiere construir el aeropuerto.
El domingo 26 de junio se celebró un referéndum, sin poder de decisión, en el departamento de Loire-Atlantique sobre la construcción de un aeropuerto en Notre-Dame-des-Landes. La participación fue alrededor de un 50%. El resultado fue de 55% de los votos a favor de la construcción.
En Nantes los votos se han dividido en artes equitativas por el no
y por el sí
. Lo que desautoriza al alcalde PS de la ciudad que había defendido el sí como algo necesario para el desarrollo de la ciudad. En otras poblaciones en donde el PS ocupa las alcaldías el no
ha salido ganador.
El movimiento anti-aeropuero ha publicado una comunicado común: Este referéndum estaba basado en un conjunto de mentiras del Estado y es radicalmente injusto. Para nosotros es una etapa más en la larga lucha por un futuro sin aeropuerto en Notre-Dame-des-Landes. Esta lucha continúa desde esta noche. Sabemos que los ataques del gobierno y de los pro-aeropuerto se van a reforzar. Por nuestra parte continuaremos a habitar, cultivar y proteger esta zona
.
Se ha denunciado que la consulta se ha hecho en un perímetro demasiado pequeño, pues la construcción del aeropuerto tiene gran influencia en toda la región, además no se ha dado la palabra a colectividades locales que tienen que pagar su construcción.
Se ha denunciado también que la pregunta (¿Está usted de acuerdo con el proyecto de trasladar el aeropuerto de Nantes Atlantique e la comuna de Notre-Dame-des-Landes?
) era demasiado simplista y no proponía ninguna alternativa. La información al público ha sido insuficiente y parcial: por ejemplo, ¿cuánto cuesta el proyecto? ¿cómo puede el Estado defender que mejorar el actual aeropuerto es más caro que construir uno nuevo?
Lo que se tiene que tener en cuenta es que la construcción de un aeropuerto es una batalla de interés general y plantea un problema esencial: ¿Vivir en un territorio quiere decir que lo sometemos a las reglas de utilidad económica o bien se han de respetar las funciones naturales (libre circulación del agua y de las especies que viven en él, absorción del CO2…)? ¿Qué aire queremos respirar? ¿qué aguna queremos beber? Tenemos que dejar de considerar los prados, los bosques y los campos como espacios vacíos y sin valor?
Cada año, el desarrollo de proyectos de actividad comercial de infraestructuras de transporte y de viviendas destruye entre 50.000 y 100.000 hectáreas de tierras y de espacios agrícolas en Francia. El equivalente de un departamento desaparece cada diez años bajo el cemento.
Esta destrucción del territorio es igualmente una bomba climática. El hormigonado del territorio francés emite cada año 100 millones de toneladas CO2. Esto representa el 20% de todas las emisiones de gas carbónico del país.
El movimiento de Notre-Dame-des-Landes es uno de los primeros movimientos sociales contra el desarreglo climático en Francia, después de la movilización contra el gas de schiste. Este movimiento alerta contra la catástrofe que representa la destrucción irreversible de tierras protegidas desde hace 40 años y el impacto de la agricultura productivista.
De momento el movimiento anti-aeropuerto ha declarado que continuará su lucha y que no piensan abandonar la ocupación de la ZAD. Hoy, 28 de junio está celebrando una asamblea para decidir qué medidas tomar y cómo seguir adelante con el movimiento.
28 de junio de 2016
Medios consultados: Zone À Défendre, Mediapart y Wikipedia.