Amis­ta­des peli­gro­sas: Mun­dial de fút­bol, tra­ta y prostitución

A pocos días del comien­zo del Mun­dial de la FIFA 2014 en Bra­sil, los sec­to­res femi­nis­tas se suma­ron a las masi­vas pro­tes­tas con­tra el mega­even­to depor­ti­vo. A las denun­cias por el aumen­to de la tra­ta y el turis­mo sexual, se suman los repu­dios por la mer­can­ti­li­za­ción del cuer­po de las muje­res. La vio­len­cia y la explo­ta­ción detrás de la deno­mi­na­da pasión de multitudes.

En el lla­ma­do “Día Inter­na­cio­nal de Luchas con­tra la Copa”, miles de per­so­nas vol­vie­ron a tomar las calles de Bra­sil en aque­llas ciu­da­des que serán sedes del Mun­dial de la FIFA 2014. Si bien las pro­tes­tas masi­vas con­tra la rea­li­za­ción del even­to se vie­nen lle­van­do a cabo des­de hace tiem­po, los medios de comu­ni­ca­ción resal­ta­ron la fuer­za y la com­ba­ti­vi­dad que alcan­za­ron estas últi­mas manifestaciones.

En el cen­tro de los recla­mos se encuen­tran los 12.000 millo­nes de dóla­res que gas­ta­rá el Esta­do en la orga­ni­za­ción mien­tras que las nece­si­da­des bási­cas de amplios sec­to­res socia­les no tie­nen res­pues­ta. Pero tam­bién se recha­zan las medi­das que el gobierno de Dil­ma Rous­seff vie­ne imple­men­tan­do para garan­ti­zar el “desa­rro­llo nor­mal” del cam­peo­na­to: miles de per­so­nas lite­ral­men­te lim­pia­das de sus hoga­res pre­ca­rios, des­alo­jo de los ven­de­do­res ambu­lan­tes para ase­gu­rar ven­ta exclu­si­va a los patro­ci­na­do­res y la exen­ción del pago de impues­tos por esos dere­chos exclu­si­vos de ven­tas tan­to a los patro­ci­na­do­res como a la FIFA.

Como par­te de las pro­tes­tas se encuen­tran los aler­tas ante el segu­ro incre­men­to de la tra­ta de muje­res para la pros­ti­tu­ción y la explo­ta­ción sexual de niñas y niños y las denun­cias acer­ca de la uti­li­za­ción del cuer­po de las muje­res como obje­to de con­su­mo publicitario.

Cuer­pos de muje­res en las Copas de hombres

Que la rea­li­za­ción de la Copa del Mun­do de la FIFA trae apa­re­ja­do en cada país don­de se rea­li­za un aumen­to del turis­mo sexual, de la tra­ta de muje­res para la explo­ta­ción sexual, del con­su­mo de pros­ti­tu­ción y de demás ele­men­tos de la deno­mi­na­da indus­tria del sexo, no es nin­gu­na nove­dad. Y en los últi­mos Mun­dia­les esta reali­dad ha ido en aumento.

En Ale­ma­nia 2006, don­de la pros­ti­tu­ción está lega­li­za­da des­de el 2002, se cons­tru­ye­ron mega­bur­de­les para la oca­sión, ani­ma­dos por pro­xe­ne­tas deve­ni­dos en empre­sa­rios. Se esti­ma que 40 mil muje­res fue­ron lle­va­das a ese país para ser pros­ti­tui­das, y su tris­te suer­te fue de la mano de las depor­ta­cio­nes masi­vas por par­te del Esta­do, que las con­si­de­ró inmi­gran­tes ile­ga­les lue­go de un lar­go deba­te mediá­ti­co acer­ca de si lle­ga­ban al país enga­ña­das o por oportunismo.

En el 2010, en Sudá­fri­ca, la gran deman­da de sexo a cam­bio de dine­ro por par­te de los asis­ten­tes se sos­tu­vo con la explo­ta­ción de las muje­res, niñas y niños más vul­ne­ra­bles de la pobla­ción local. Ni la ile­ga­li­dad de la pros­ti­tu­ción en ese país, ni siquie­ra los aler­tas de nume­ro­sas orga­ni­za­cio­nes acer­ca de un posi­ble pico de pro­pa­ga­ción del VIH /​SIDA en una pobla­ción don­de 6 millo­nes de per­so­nas lo pade­cen, fre­nó la situación.

A Bra­sil, ¿por fút­bol o por sexo?

Este año le toca a Bra­sil, que no sólo será la sede del Mun­dial FIFA 2014 sino tam­bién de los Jue­gos Olím­pi­cos en el verano de 2016. Según datos del Minis­te­rio de Turis­mo, se cal­cu­la la lle­ga­da de 600 mil turis­tas extran­je­ros, un 10 por cien­to del total que el país reci­be anual­men­te. Y a ello hay que sumar­le el des­pla­za­mien­to interno esti­ma­do de alre­de­dor de 3 millo­nes de per­so­nas por las 12 ciu­da­des que serán sede del Mundial.

Inde­fec­ti­ble­men­te en este gran suce­so depor­ti­vo se expre­sa­rá la diná­mi­ca de los Mun­dia­les ante­rio­res. Pero en este caso, la tan cono­ci­da difu­sión de Bra­sil como paraí­so eró­ti­co será un fac­tor que agra­va­rá aún más la situación.

Duran­te años la indus­tria turís­ti­ca ha explo­ta­do has­ta el har­taz­go el mito de la garo­ta des­inhi­bi­da que bai­la en la pla­ya semi­des­nu­da sin nin­gún com­ple­jo. Y en la actua­li­dad, esa fábu­la fue enri­que­ci­da con la pro­mo­ción de un paraí­so sexual que tam­bién es “gay friendly”.

Pero lo cier­to es que detrás de las ofer­tas de la belle­za de sus pla­yas, Bra­sil cuen­ta con el mayor índi­ce de turis­mo sexual de Amé­ri­ca Lati­na y el Cari­be y es un país de ori­gen, trán­si­to y des­tino de muje­res, varo­nes, niñas, niños y per­so­nas trans­gé­ne­ro víc­ti­mas de la tra­ta para la explo­ta­ción sexual.

La preo­cu­pa­ción de las orga­ni­za­cio­nes guber­na­men­ta­les y no guber­na­men­ta­les radi­ca pre­ci­sa­men­te en la cer­te­za de que un acon­te­ci­mien­to mul­ti­tu­di­na­rio como el Mun­dial lle­va­rá miles de per­so­nas dis­pues­tas a pagar para expe­ri­men­tar el mito bra­si­le­ño e, inse­pa­ra­ble­men­te, explo­ta­do­res, tra­fi­can­tes y pedó­fi­los tra­tan­do de pasar como hin­chas inad­ver­ti­dos para hacer de la vul­ne­ra­bi­li­dad de amplios sec­to­res de la pobla­ción una opor­tu­ni­dad de negocio.

A pocos días de la aper­tu­ra, la amplia red de nego­cios turís­ti­cos ya está pre­pa­ra­da para fun­cio­nar: agen­cias de via­je, hote­les, bares y taxis. Inclu­so la explo­ta­ción sexual ya se está orga­ni­zan­do a tra­vés del inter­net. Mien­tras tan­to, el gobierno deci­dió inver­tir ocho millo­nes de reales, equi­va­len­tes a 3,3 millo­nes de dóla­res, para com­ba­tir la pros­ti­tu­ción infan­til en las ciu­da­des sede. “Bra­sil está feliz de reci­bir turis­tas que lle­ga­rán a la Copa, pero tam­bién está lis­to para com­ba­tir el turis­mo sexual”, ame­na­zó Dil­ma Rous­seff en su Twitter.

Infruc­tuo­sa tarea la de la pre­si­den­ta. Por­que como está demos­tra­do en todo el mun­do, es impo­si­ble luchar con­tra el turis­mo sexual infan­til sin luchar con­tra la indus­tria del sexo.

El machis­mo de la FIFA

Era de espe­rar que una ins­ti­tu­ción como la FIFA no igno­re que miles de muje­res, niñas y niños serán víc­ti­mas de la explo­ta­ción sexual y apo­ye las cam­pa­ñas de pre­ven­ción. No obs­tan­te, las femi­nis­tas nuclea­das en la Mar­cha Mun­dial de las Muje­res de Bra­sil se suma­ron a las movi­li­za­cio­nes con­tra la rea­li­za­ción de la Copa del Mun­do lan­zan­do la cam­pa­ña “Con­tra el machis­mo están­dar de la FIFA”.

En una decla­ra­ción denun­cian fuer­te­men­te cómo las muje­res son mer­can­cías en la indus­tria del sexo y un fac­tor cru­cial para impul­sar el entre­te­ni­mien­to y el turis­mo, gene­ran­do lucros para las empre­sas y divi­sas para los gobier­nos. Y tam­bién expli­can cómo estas cone­xio­nes son estruc­tu­ra­les, y no un efec­to cola­te­ral de la lógi­ca de los gran­des even­tos y de los mega-emprendimientos.

Con el slo­gan “En la Copa de la explo­ta­ción el que gana es el pro­xe­ne­ta”, van más allá. Dejan muy cla­ro cómo el acce­so a los cuer­pos de las muje­res es par­te intrín­se­ca del mer­ca­do del fút­bol y es incen­ti­va­do por todas las ins­ti­tu­cio­nes y empre­sas que lucran con la Copa del Mun­do, empe­zan­do por la FIFA.

Al res­pec­to, las cami­se­tas lan­za­das a la ven­ta por Adi­das, patro­ci­na­dor ofi­cial de la Copa, es ape­nas una mues­tra de todo ello. En una, al sim­bo­li­zar “Yo amo Bra­sil”, el cora­zón se con­fun­de con un tra­se­ro de mujer ver­de y ama­ri­llo. En otra, una mujer en biki­ni jun­to al pai­sa­je de Río de Janei­ro, lo dice todo.

@MariaPaula_71 – Notas

Artikulua gustoko al duzu? / ¿Te ha gustado este artículo?

Twitter
Facebook
Telegram

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *