Para ase­gu­rar el dere­cho a la vivien­da es nece­sa­rio aumen­tar la pre­sión social sobre la vivien­da vacía- Elkartzen

elkartzenAnte la situa­ción de emer­gen­cia que las eje­cu­cio­nes hipo­te­ca­rias supo­ne y ante la fal­ta de volun­tad e inca­pa­ci­dad de los sec­to­res que ges­tio­nan el sis­te­ma para solu­cio­nar el pro­ble­ma de la vivien­da a toda la pobla­ción, urge poner fin al urba­nis­mo sal­va­je, limi­tar los pre­cios de los alqui­le­res y cons­truir par­ques públi­cos de vivien­da en alquiler.
Elkar­tzen siem­pre ha pues­to de mani­fies­to la gra­ve cri­sis de exclu­sión de acce­so a la vivien­da por par­te de los sec­to­res más pre­ca­ri­za­dos en el mer­ca­do labo­ral: juven­tud, muje­res y per­so­nas migran­tes. El dere­cho a la vivien­da es una mera for­ma­li­dad sin obli­ga­ción de com­pro­mi­so por par­te del sec­tor públi­co, que lo basa en “un sor­teo” o en bare­mos res­tric­ti­vos para una mino­ría, sin que en él pue­dan entrar las per­so­nas más nece­si­ta­das. Esta fal­ta de cober­tu­ra social en un bien bási­co como la vivien­da ha lle­va­do a un endeu­da­mien­to masi­vo y muy por enci­ma de sus posi­bi­li­da­des a los colec­ti­vos nece­si­ta­dos de la mis­ma. Esta exclu­sión al acce­so de la vivien­da jun­to a la explo­sión de la cri­sis y la con­si­guien­te expul­sión de las per­so­nas median­te eje­cu­cio­nes hipo­te­ca­rias, está tenien­do una reac­ción amplia y popu­lar. En este sen­ti­do, somos cons­cien­tes de que sólo la movi­li­za­ción popu­lar, la soli­da­ri­dad y los esfuer­zos desin­te­re­sa­dos de un sec­tor amplio de la pobla­ción han obli­ga­do a los sec­to­res que han hecho de la vivien­da un nego­cio, a tener que recu­lar en sus inten­cio­nes de rea­li­zar uno de los mayo­res tras­va­ses de ren­tas (como lo han hecho en el pasa­do) esta vez, por la vía de los desahucios.
“Los que hacen su dine­ro pres­tan­do el dine­ro ajeno y espe­cu­lan­do con él, no tie­nen dere­cho a con­si­de­ra­cio­nes espe­cia­les”. (Ernes­to Guevara)
El Real Decre­to sobre hipo­te­cas hecho públi­co el pasa­do 15 de noviem­bre no es sufi­cien­te para las per­so­nas que vivi­mos y tra­ba­ja­mos en Eus­kal Herria. Ha que­da­do paten­te que la ban­ca man­da y esta medi­da no es más que un movi­mien­to para sacar a las enti­da­des finan­cie­ras del apu­ro y mala ima­gen que les supo­ne que, mien­tras se les ha inyec­ta­do astro­nó­mi­cas sumas de dine­ro públi­co para sal­var­les, a los sec­to­res popu­la­res no se nos ayu­da ni sal­va sino que se nos expul­sa de nues­tras vivien­das con la ayu­da de todo un entra­ma­do coer­ci­ti­vo y legal. Se ha dicho que hay que cam­biar la ley hipo­te­ca­ria y ¿por qué no la Ley de Arren­da­mien­tos Urba­nos que per­mi­te los desahu­cios de las per­so­nas en régi­men de alqui­ler? Y ¿por qué no la Ley de Enjui­cia­mien­to Civil que per­mi­te a la ban­ca hacer­se con las vivien­das de los sec­to­res más cas­ti­ga­dos por la cri­sis? Como si no fue­ra sufi­cien­te­men­te agre­si­vo el paro, demos una vuel­ta de tuer­ca a la situa­ción, eché­mos­les a la calle, con sus fami­lias, sus pocas per­te­nen­cias… nos ceñi­mos a la ley, dicen… ¡esa es su for­ma de actuar!
En Eus­kal Herria, mien­tras no nos libe­re­mos de esas prác­ti­cas, del entra­ma­do legal, admi­nis­tra­ti­vo y judi­cial que tie­nen orga­ni­za­do en torno a las com­pe­ten­cias sobre vivien­da, será impo­si­ble hacer reali­dad el dere­cho al uso y dis­fru­te de un lugar de alo­ja­mien­to digno para toda la población.
El pro­ble­ma de la vivien­da es colec­ti­vo y glo­bal, con­se­cuen­cia de la apli­ca­ción del mode­lo neo­li­be­ral en nues­tro pue­blo. Los desahu­cios no son más que una de las con­se­cuen­cias de este pro­ble­ma. El gran pro­ble­ma con la vivien­da es que, en reali­dad, no se con­si­de­ra un dere­cho. Tene­mos dere­cho a una vivien­da dig­na y esto es lo que las admi­nis­tra­cio­nes públi­cas corres­pon­dien­tes tie­nen que garan­ti­zar y no garan­ti­zan. En este momen­to este es uno de los fac­to­res más impor­tan­tes del empo­bre­ci­mien­to y exclu­sión de la pobla­ción de Eus­kal Herria.
Enten­de­mos que el pro­ble­ma de la vivien­da es glo­bal y por tan­to, requie­re de una solu­ción estructural.
Los desahu­cios nece­si­tan una solu­ción inme­dia­ta pero sin una solu­ción inte­gral que abar­que todo el pro­ble­ma de la vivien­da, no deja­rá de ser un par­che más.
Podre­mos alar­gar los pla­zos, podre­mos bus­car res­qui­cios lega­les pero mien­tras que no ata­je­mos el pro­ble­ma de una mane­ra glo­bal e inte­gral no vere­mos satis­fe­cho el pro­ble­ma de acce­so y dis­fru­te a una vivien­da dig­na para todas las per­so­nas. En momen­tos de cri­sis como los que esta­mos vivien­do vemos como el peso de las hipo­te­cas y la usu­ra de la ban­ca es inaguan­ta­ble para el con­jun­to de la cla­se tra­ba­ja­do­ra en par­ti­cu­lar y de los sec­to­res popu­la­res en gene­ral. En lugar de inyec­tar dine­ro a los ban­cos o de ofre­cer refu­gio a las cons­truc­to­ras a tra­vés de la VPO como se está hacien­do en estos momen­tos, cree­mos que a quien hay que dar refu­gio es a las per­so­nas que se han vis­to en la obli­ga­ción de adqui­rir una hipo­te­ca. En este sen­ti­do exigimos:
1. A los Gobier­nos de Lakua e Iru­ñea que impon­gan la sus­pen­sión de todos los desahu­cios rela­cio­na­dos con impa­gos por cau­sas obje­ti­vas adu­cien­do para ello la
situa­ción de cri­sis eco­nó­mi­ca que esta­mos padeciendo.
2. A los dife­ren­tes Ayun­ta­mien­tos que ase­gu­ren la asis­ten­cia legal y ayu­da a las per­so­nas afec­ta­das, evi­tan­do que la gen­te se que­de en la calle. Negar­se a cola­bo­rar en este des­pro­pó­si­to que supo­ne des­alo­jar a las per­so­nas de su lugar de resi­den­cia. Así como la crea­ción de comi­sio­nes loca­les espe­cia­les, con par­ti­ci­pa­ción popu­lar para afron­tar el pro­ble­ma des­de el ámbi­to más cercano.
3. Que toda vivien­da suje­ta a eje­cu­ción hipo­te­ca­ria pase a for­mar par­te de un par­que públi­co de vivien­da en alqui­ler social a nivel local.
Pero el pro­ble­ma de la vivien­da como veni­mos remar­can­do des­de hace tiem­po va más allá de resol­ver el pro­ble­ma de las eje­cu­cio­nes hipo­te­ca­rias. Para ase­gu­rar el dere­cho a la vivien­da de una mane­ra inte­gral cree­mos que:
Hay que eli­mi­nar la exis­ten­cia de vivien­da vacía, en este sen­ti­do, debe­mos recor­dar que en Eus­kal Herria exis­ten más de 255.000 vivien­das vacías. A estas habría que sumar las que en este momen­to están sien­do vacia­das por eje­cu­cio­nes hipo­te­ca­rias. La opti­mi­za­ción de estas vivien­das supon­dría aca­bar con el pro­ble­ma de acce­so a un dere­cho básico.
Hay que esta­ble­cer un lími­te a los pre­cios que se cobran por los alqui­le­res, tan­to a los pro­te­gi­dos como a los de mer­ca­do. No es de reci­bo que hoy en día el pre­cio medio del alqui­ler en el mer­ca­do libre supere los 900 euros y el SMI sea de 641,40 euros. Des­de hace tiem­po veni­mos rei­vin­di­can­do que ese lími­te ha de ser el 15% de los ingre­sos de la per­so­na inquilina.
Es por ello que hoy cobra más fuer­za que nun­ca la solu­ción que ya pro­pu­si­mos en 2008 (en el libro La Eus­kal Herria ¿de quién? edi­ta­do por IPES-Elkar­tzen) de crear un Ins­ti­tu­to de Vivien­da Públi­ca para Eus­kal Herria, que vela­ría por el dere­cho efec­ti­vo al uso y dis­fru­te de una vivien­da dig­na de carác­ter públi­co, en el cual se inte­gra­rían entre otras, las vivien­das vacías o infra­uti­li­za­das y en el caso que esta­mos ana­li­zan­do, las vivien­das bajo con­trol ban­ca­rio median­te eje­cu­ción hipotecaria.
Lle­va­mos tiem­po expre­san­do nues­tra espe­ran­za y ale­gría ante el aumen­to del gra­do de con­cien­cia­ción y movi­li­za­ción que a lo lar­go de estos últi­mos años se está dan­do en la cla­se tra­ba­ja­do­ra y los sec­to­res popu­la­res de Eus­kal Herria. Al albor de este aumen­to y en la medi­da de nues­tras posi­bi­li­da­des, no pode­mos sino reco­ger el guan­te lan­za­do des­de dife­ren­tes sec­to­res de crear un fren­te común para poder hacer efec­ti­vo un dere­cho como es el de la vivien­da. Este será nues­tro tra­ba­jo en los pró­xi­mos meses, sien­do cons­cien­tes de que solo la orga­ni­za­ción y la lucha a favor de un cam­bio y una trans­for­ma­ción social pro­fun­da hará posi­ble la eman­ci­pa­ción de la cla­se tra­ba­ja­do­ra y los sec­to­res popu­la­res de Eus­kal Herria. Nos com­pro­me­te­mos a ello.
Elkar­tzen 26-11-2012 

Artikulua gustoko al duzu? / ¿Te ha gustado este artículo?

Twitter
Facebook
Telegram

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *