Desde el sindicato LAB pensamos y reivindicamos que Euskal Herria debe tener la oportunidad de recorrer su propio camino, de decidir su futuro sin ningún tipo de violencia, ni ingerencia, ni limites impuestos. Necesitamos que se construyan los acuerdos políticos que garanticen esa posibilidad y eso es posible hoy. Estamos ante esa oportunidad histórica, no hay excusas y además Euskal Herria lo necesita. Es momento para que todos y todas asumamos compromisos claros en esta dirección. Y eso es lo que le hemos demandado a Patxi Lopez.
Las instituciones pueden y deben jugar un papel muy importante en la construcción de las soluciones que necesitamos. Y Patxi Lopez, responsable máximo de las instituciones de la CAPV, tiene la responsabilidad de impulsar y desarrollar esa posibilidad. Es momento de asumir compromisos en ese sentido, empezando por dar pasos para superar el déficit democrático de la institución que representa. El dialogo político es necesario e insustituible en esta fase, un diálogo sin exclusiones. El Lehendakari, con su acción política, debe dar el paso de garantizar el reconocimiento y la participación en igualdad de condiciones de todas las opciones políticas que hoy existen en Euskal Herria.
Se tienen que garantizar la participación de la ciudadanía vasca tanto en el proceso como en su resultado final. Este es un compromiso a asumir por todos y todas, empezando por el máximo responsable de las instituciones de la CAPV. Y le hemos demando a Patxi Lopez compromisos claros con este principio. En este sentido, hemos recalcado la necesidad de garantizar instrumentos para la participación efectiva de la mujer. Este proceso no puede excluir a nadie, ni podemos aceptar que nadie quede excluida por tener dificultades añadidas a la hora de participar en la vida política y social. Esa es la realidad de muchas mujeres y no podemos obviarlo, se debe garantizar la participación de todas las mujeres habilitando y potenciando los cauces necesarios para que esa participación sea posible y sea real.
Los problemas de los y las trabajadoras deben estar presentes en los acuerdos que se van a construir. Esta oportunidad histórica no ha surgido en cualquier momento. La posibilidad de construir los nuevos acuerdos que necesita este país se ha generado en la mitad de la peor crisis que hemos conocido. Los y las trabajadoras no tenemos ninguna posibilidad de decidir sobre nuestro futuro económico y social. Se nos niega ese derecho y a Euskal Herria se le niega el derecho a dotarse de los instrumentos que necesita para determinar y desarrollar un nuevo modelo económico y social. Se nos han impuesto reformas laborales, no se nos permite participar en decisiones que son determinantes para las políticas económicas y sociales que se desarrollan, se nos impide la posibilidad de transformar el modelo actual a pesar de que está en una profunda crisis y a pesar de ser la demanda de la mayoría. Estas situaciones forman parte del conflicto que debemos solucionar. El Lehendakari debe dar pasos para superar estos problemas y eso es lo que le hemos demandado.
En Gasteiz, a 3 de noviembre de 2011