Algunos reporteros oficialistas no cesan en dar nuevas muestras de servilismo hacia el orden establecido. En el caso que relatamos a continuación, aportando ideas para que los bancos españoles resuelvan los problemas que tienen con los inmuebles de los que son titulares, y que se torran, vacíos, al sol del mediodía.
En las tertulia televisiva (miércoles 19 de octubre), desarrollada en el programa “Los desayunos de TVE”, que conduce Ana Pastor, uno de esos estómagos agradecidos insinuó que en España no vendría mal adoptar medidas similares a las que ya se realizan en algunos estados de EEUU, que consisten en derribar las casas, porque a las entidades financieras les cuesta más mantenerlas vacías que venderlas.
No queremos ni imaginar lo que ello supondría en el Estado español donde, según datos del PCPE, 170 familias son desahuciadas diariamente por no poder afrontar los pagos, no sólo de las hipotecas, sino también de los alquileres. Una canallada como la propuesta en esa tertulia representaría una muestra de desprecio, y una ausencia total del más mínimo sentimiento humano con miles de personas que podrían conseguir ese alojamiento al que, según la constitución borbónica, tienen “derecho”.
Pero no quedó ahí la cosa. Los tertulianos del régimen hicieron recomendaciones como “debemos acostumbrarnos a ser más pobres”, expresión realizada en tercera persona, pues para ellos, ser un poco más pobres no les supone gran cosa (de momento).
Ahora bien, ¿cómo hacer más pobres a quienes viven en las calles? Solo existe una manera: La selección natural hitleriana. Que los eliminen las inclemencias del tiempo, o esos nazis que se “divierten” con los vagabundos.
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