Traducción del frances por Boltxe Kolektiboa
No existe jubilación para los viejos revolucionarios alemanes
Dos antiguos militantes de las Células Revolucionarias (Revolutionäre Zellen, RZ) han sido extraditados de Francia a Alemania el 14 de septiembre. La Liga de los Derechos Humanos del Estado francés pide su liberación.
El antiterrorismo europeo vuelve a atacar. Como todo el mundo sabe, la venganza de Estado es un plato que se come frío y podrido. Esta vez, son dos rescatados de los años de plomo alemanes los que se encuentran en el punto de mira. Después de 36 años de vida en Francia y cuatro de lucha jurídica, Sonja Suder y Christian Gauger, de 79 y 70 años de edad respectivamente, están viviendo una pesadilla que viene directamente del tiempo en que Alemania se llamaba RFA, al oeste, y RDA, al este. Es un «remake» estrafalario de Retorno al futuro.
La Alemania reunificada les pide cuentas en relación a acontecimientos que tuvieron lugar… en los años 70. «Acusaciones por acciones contra objetivos materiales que tuvieron lugar en el contexto de la lucha antiimperialista, de la lucha en solidaridad con la Sudáfrica antiapartheid y de la lucha contra la dictadura argentina que hacía desaparecer miles de personas», precisan los militantes del blog Linter.
«Han sido secuestrados de su casa de madrugada. Él introducido en una ambulancia, ella en un coche de policía, y entregados,como una vulgar carta. Ya en Alemania, Christian Gauger ha sido internado en el hospital de una cárcel y Sonja Suder en la cárcel de mujeres de alta seguridad de Francfurt», explican los miembros del Comité de solidaridad.
En abril, a petición de la abogada Irène Terrel, la Cancilleria aceptó que se realiza un examen médico a Christian. El resultado fue que el estado de salud de Christian, gravemente enfermo después de un ataque cardiaco y otro cerebral, era incompatible con una posible detención. El médico forense volvió a insistir en el riesgo de degradación irreversible física, al que se podría añadir un riesgo de ruptura psiquiátrica en caso de que se le separa de su compañera. Ella es la única persona que puede reorganizar su memoria, estimular sus emociones y su articulación en la vida real.
Estos son los peligrosos terroristas que Francia ha entregado a Alemania. «Las autoridades judiciales alemanas no pueden ignorar que un sumario, abierto 36 años depués de los hechos imputados, no puede terminar en una condena [en Alemania no existen los juicios en rebeldía y el sumario debe empezarse cuando los inculpados están ante del tribunal]. En realidad no es más que una condena preventiva a pena de muerte», concluye el Comité de Solidaridad.
El 26 de septiembre la Liga de Derechos Humanos ha denunciado estos hechos y ha pedido la liberación de Sonja Suder y de Christian Gauger, igualmente pide que se abandonen los cargos que pesan contra ellos «que no tienen ningún sentido». La LDH recuerda la opinión del presidente de la República francesa en el asunto Roman Polanski. «Nicolas Sarkozy dijo que no debía llevarse a cabo un procedimiento judicial después de treinta y dos años de los hechos, sobre todo teniendo en cuenta la edad de Polanski, 76 años, que una decisión de este tipo no era buena para la justicia. Se podría pensar que este principio de un “tiempo razonable” sería válido para todo el mundo. Pues no lo es. Por lo tanto, no es un principio sino una práctica que corresponde a decisiones aleatorias en función de las relaciones de Estado y de las relaciones diplomáticas con países extranjeros. En el caso de Sonia y de Christian los hechos se parecen más a una venganza que a un acto de justicia.»
El rey Sarko I ha sido desenmascarado una vez más.
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27 de septiembre de 2011
