Como otras muchas asociaciones y particulares, EGUZKI también ha presentado alegaciones al expediente de solicitud de autorización administrativa y declaración de impacto ambiental de la instalación “Parque Eólico Ganekogorta”, en los términos municipales de Güeñes, Alonsotegi, Arrigorriaga, Arrankudiaga, Bilbao y Okondo, promovido por Eólicas de Euskadi, S.A. Así hemos venido manifestado una postura crítica hacia el modo en que se está implantando la energía eólica, abogando por una implantación racional.
La reciente avalancha de proyectos de centrales de generación de energía eólica ha supuesto una transformación constante de la mayoría de las cumbres de las sierras pasando de una clara vocación forestal o ganadera en otra industrializada, perdiendo valores y su esencia natural.
Una política energética con dos planes energéticos promovidos por el sector público, cuyos pilares son la “seguridad del suministro” y la “competitividad”, se impone por encima del mantenimiento de estos usos y valores sociales y naturales.
Para Eguzki, el hecho de que se pretenda ubicar una central de este tipo en un área con un alto grado de conservación, de gran ecológico y sobre todo paisajístico, demuestra por la vía de los hechos que las propuestas del Gobierno Vasco en cuanto a desarrollo sostenible sólo son un simple escaparate.
Como Eguzki tenemos que decir que no aceptamos este diseño de mega-parques para nuestro territorio. Una vez más se demuestra la hipócrita apuesta energética teóricamente renovable de nuestras instituciones, apostando por el aumento del negocio olvidando el fomento del ahorro energético, pilar fundamental de una política ambiental.
En el caso de Ganekogorta, nos oponemos a este proyecto porque no tiene nada de renovable ni sostenible para su entorno, pues no se basa en el ahorro y la sustitución de un modelo contaminante cimentado en el petróleo por otro que lo sustituya, ni respeta los valores de ese ecosistema.
El PTP de Bilbao metropolitano, aprobado por DECRETO 179⁄2006, de 26 de septiembre, no incluye ninguna referencia a la instalación de eólicos en la zona del Ganekogorta, ni se formula referencia alguna al PTS de eólicas, y además dicho paisaje fue incluido en el Catálogo abierto de paisajes singulares y sobresalientes de la CAPV. Este proyecto se contradice con su protección, así como con el laureado cinturón y pulmón verde de la urbe del Gran Bilbao, y de zona de paseo, esparcimiento y ejercicio sano.
Sin previsión en el PTS, y siendo como es un paisaje singular, las afecciones que genera no deberían ser de gran impacto o relevantes, pues estaríamos hipotecando dicho valor natural y social. Estos valores no son tenidos en cuenta en el caso de Ganekogorta y las afecciones evidencian una exclusiva rentabilidad económica por encima de los principios y valores naturales.
El estudio de impacto ambiental que han hecho no contempla la apertura de grandes pistas en una ladera virgen y con fuertes pendientes que obligan a grandes taludes y plantean un camino. La propia obra de instalación es una afección cuya reversibilidad al estado originario resulta complicada y nunca absoluta. La construcción del parque va a suponer además enormes movimientos de tierras, cimentaciones, creación de grandes pistas, kilómetros de Alta Tensión, utilización de maquinaria pesada y grúas gigantescas, precisando ocupar al menos 17 hectáreas de superficie de un paraje hasta ahora salvaje y espectacular.
Ganekogorta, es una montaña que, pese a localizarse próximo a Bilbao, dada su elevada altitud, con 998 metros de altura, le ha hecho mantener unos valores naturales sobresalientes, especialmente en su zona de cumbre, con buenas poblaciones de especies de montaña como el escribano montesino (Emberiza cia), el bisbita alpino (Anthus spinoleta) o el verderón serrano (Serinus citrinella). Las afecciones a las aves ( Alimoche, buitres, etc..), y en especial, de especies de montaña como el escribano montesino (Emberiza cia), el bisbita alpino (Anthus spinoleta) o el verderón serrano (Serinus citrinella), son muy elevadas.
Además, el impacto visual que produce en esta mítica cima, repercute en 482.686 habitantes, o lo que es lo mismo una cuarta parte de la población de la CAPV.
Eguzki ha estado y esta a favor de las energías renovables, pero siempre y cuando este tipo de iniciativas sigan unos parámetros sostenibles y sustentables, cuidando y protegiendo los espacios naturales que nos quedan e impulsando el ahorro y la eficiencia energética.
Por todo lo expuesto, y a la vista de este y otros proyectos energéticos, Eguzki propone la paralización de éste y otros mega proyectos en tanto en cuanto no se realice una revisión del actual modelo de consumo y producción energético de adición o suma de producción, se produzca un debate social sobre los proyectos, sus afecciones y costes económicos, sociales y medioambientales mediante foros de participación publica, y se apueste por la sustitución de modos, en aras a una producción respetuosa y alternativa de los actuales sistemas de producción energética.
En Bilbao, a 18 de agosto de 2011.