Cuando salió la noticia de que Bildu renunciaba al asesor o «cargo de confianza», muchas han sido las reacciones que se han manifestado en los foros.… unas aprobando la decisión, otras, como es lógico, en contra: que si es un lavado de cara, que si por qué no renuncian también a los sueldos…
¿Renunciar a qué?
¿A cuánto dinero ha tenido que renunciar la Izquierda Abertzale en estos últimos ocho años? Quizás no sepa el personal que hace dos legislaturas ilegalizaron un montón de candidaturas cuyos componentes
no pudieron hacer su trabajo desde el puesto de concejal “oficial” y por lo tanto no pudieron cobrar sus sueldos… lo cual no impidió que hicieran el mismo trabajo desde la calle…
También debe saber el personal que en la última legislatura en Barakaldo no ilegalizaron a los concejales, pero sí al grupo municipal de ANV, por lo que les dejaron hacer su trabajo; sin embargo, como no constituían grupo, se les privó de la mayor parte de sus remuneraciones. Lo cual no impidió que su actividad fuera más intensa que la de otros que cobraron mucho más…
Además ¿Cuánto dinero han robado en estos últimos años a grupos culturales, deportivos, de tiempo libre,… etc…negando o restringiendo subvenciones por el mero hecho de suponer que alguno de
sus componentes era de la Izquierda Abertzale ? Saliendo, ya, del ámbito de Barakaldo, ¿Cuantos medios de comunicación se han quedado sin subvención por la misma razón? Resumiendo: que es un montón de pasta lo que nos han robado por el morro, con la siempre bien socorrida excusa de la ilegalización, o de cualquier otra excusa…
Sin embargo, pensamos que el trabajo hecho hay que pagarlo. Cuestión diferente es si la cuantía se ajusta al esfuerzo hecho o a las posibilidades del Ayuntamiento.
En efecto, La Izquierda Abertzale piensa que es escandaloso un sueldo como el del Alcalde o el de cualquier Concejal/a liberado/a y en ese sentido aplaude la iniciativa de Bildu de pedir una rebaja de sueldos, pero el trabajo hecho hay que pagarlo.
En cuanto al secretario o secretaria, forma parte de los medios que al Ayuntamiento pone a disposición de los concejales/as para que desempeñen su función, de la misma manera que les facilita folios, un ordenador o un móvil.… estaría bueno que en los tajos fueran los currelas los que tuvieran que pagarse el buzo, los guantes o el casco… y dado que el secretario maneja información sensible, pues es lógico que tenga que ser de la confianza de los concejales/as, tenga el curriculum que tenga…
En cualquier caso es un sueldo que responde a un trabajo hecho que facilita el correcto funcionamiento del grupo, y por lo tanto, de la institución, y el trabajo hecho- con todo lo discutible que puede ser la cuantía- hay que pagarlo.
Entonces ¿por qué renuncia Bildu al sueldo del asesor? ¿Acaso no sería digno de remuneración el trabajo del asesor? ¿Acaso no trabaja el asesor?
El Ayuntamiento dispone de una serie de funcionarios/as que son los técnicos en cualquiera de las áreas en que se divide la actividad municipal. Cuentan con la titulación, la preparación, y la experiencia suficiente para asesorar neutralmente no sólo al alcalde o al partido
del alcalde; sino a cualquiera de los concejales, sean del grupo que sean, sobre cualquier problema técnico que se les plantee. Ese es su deber y su cometido.
En efecto, los concejales son ciudadanos/as, que gestionan temporalmente y con criterios políticos un área, pero no tienen por qué ser expertos en la misma. Para eso están los técnicos que son
funcionarios y cobran su sueldo del Ayuntamiento. Entonces ¿Qué sentido tiene pagar a los partidos un asesor para que haga el mismo trabajo que ya está haciendo el funcionario técnico? ¿Por qué tiene
que pagar el Ayuntamiento dos veces por el mismo trabajo? Quizás algún partido quiera reunir en la misma persona el criterio técnico y el político; pero entonces ¿dónde queda el trabajo de los concejales?
¿Cómo justificaríamos sus liberaciones? En cualquier caso, si así es, que se lo pague el propio partido, no el Ayuntamiento.
El trabajo hecho hay que remunerarlo justamente, pero duplicar gastos nos parece inmoral y más en tiempos de crisis, por eso hemos renunciado al sueldo del asesor o “cargo de confianza”