Valo­ra­ción de la Huel­ga Gene­ral- Ezker Abertzalea

En pri­mer lugar, que­re­mos feli­ci­tar a las miles y miles de per­so­nas que hicie­ron que la jor­na­da de ayer se con­vir­tie­se en una enor­me pro­tes­ta con­tra las medi­das anti­so­cia­les impul­sa­das por el Gobierno del PSOE con el apo­yo de sus socios del PNV.

Pese a los abu­si­vos ser­vi­cios míni­mos que mer­man el legi­ti­mo y nece­sa­rio dere­cho a la huel­ga; fren­te a las ame­na­zas ver­ti­das des­de ins­ti­tu­cio­nes varias y la patro­nal y fren­te a la habi­tual ame­na­za y vio­len­cia poli­cial, pode­mos decir que la Huel­ga Gene­ral con­vo­ca­da por la mayo­ría sin­di­cal vas­ca en Nafa­rroa, Biz­kaia, Ara­ba y Gipuz­koa ha sido un rotun­do éxito.

En este sen­ti­do, des­de esta rue­da de pren­sa la Izquier­da Aber­tza­le quie­re tras­la­dar su soli­da­ri­dad a todas las per­so­nas víc­ti­mas de la vio­len­cia que las dife­ren­tes poli­cías ejer­cie­ron ayer en dife­ren­tes pun­tos de Hego Eus­kal Herria. Una vez más, se vuel­ve a res­pon­der con vio­len­cia a mani­fes­ta­cio­nes y movi­li­za­cio­nes total­men­te legitimas.

Tam­bién que­re­mos salu­dar a las miles de per­so­nas que se movi­li­za­ron ayer en Gali­cia y Cataluña.

Des­de la Izquier­da Aber­tza­le que­re­mos aplau­dir la valen­tía, cohe­ren­cia y el com­pro­mi­so demos­tra­dos por la mayo­ría sin­di­cal vas­ca. Fren­te a unos sin­di­ca­tos buro­cra­ti­za­dos que ayer mis­mo pac­ta­ban con el Gobierno espa­ñol ampliar la edad de jubi­la­ción has­ta los 67 años. Fren­te a esto la mayo­ría sin­di­cal vas­ca ha con­se­gui­do acti­var y movi­li­zar a dece­nas de miles de per­so­nas en la ter­ce­ra huel­ga gene­ral con­vo­ca­da en año y medio. Estas tres huel­gas tie­nen un deno­mi­na­dor común: que no sea la cla­se tra­ba­ja­do­ra la que pague la cri­sis gene­ra­da por la ava­ri­cia sin limi­tes del capi­tal finan­cie­ro; que con la excu­sa de la cri­sis no se recor­ten más los dere­chos adqui­ri­dos tras déca­das de lucha.

Por cier­to, cabe sub­ra­yar que nin­guno de los pro­ta­go­nis­tas de este pac­to (Gobierno, patro­nal y lide­res de CCOO y UGT) se jubi­la­rán ni a los 67, ni a los 65, ni a los 60…

Algu­nos ten­drán la ten­ta­ción de recu­rrir a por­cen­ta­jes y a la gue­rra de cifras para res­tar­le valor a la gran movi­li­za­ción rea­li­za­da ayer en Hego Eus­kal Herria. Mejor harían si en vez de escu­rrir el bul­to hicie­sen caso a algu­nos de los lemas corea­dos por las dece­nas de miles de per­so­nas que se mani­fes­ta­ron en las cua­tro capi­ta­les de Hego Eus­kal Herria ayer al medio­día y en dece­nas de loca­li­da­des al atar­de­cer: ¡No al saqueo de las pen­sio­nes!, ¡No fal­ta dine­ro, sobran ladro­nes! Ese es el men­sa­je que debe­rían de aten­der el PSOE y el PNV, en vez de asis­tir con indi­fe­ren­cia ante los casos de corrup­ción, cada día más nume­ro­sos, y per­ma­ne­cen cru­za­dos de bra­zos ante los alar­man­tes índi­ces de frau­de fis­cal. Ambos par­ti­dos debe­rían de desis­tir de apli­car medi­das anti­so­cia­les que supo­nen un cla­ro retro­ce­so en los dere­chos socia­les y labo­ra­les de los y las tra­ba­ja­do­ras, y que pro­vo­can que las con­se­cuen­cias de la cri­sis recai­gan sobre los sec­to­res más des­fa­vo­re­ci­dos, en espe­cial la juven­tud, las per­so­nas inmi­gran­tes y las mujeres.

Tal como decía­mos el pasa­do mar­tes en la rue­da de pren­sa ofre­ci­da jun­to con Eus­ko Alkar­ta­su­na y Alter­na­ti­ba, con­si­de­ra­mos que la Huel­ga Gene­ral de ayer no res­pon­de úni­ca­men­te a la rabia o al enfa­do. Movi­li­za­cio­nes como la de ayer son el camino para con­ti­nuar tra­ba­jan­do por el ver­da­de­ro cam­bio. Y movi­li­za­cio­nes como la de ayer nos demues­tran que hay una gran masa crí­ti­ca que exi­ge ese cam­bio, que exi­ge acu­mu­lar fuer­zas y con­ti­nuar tra­ba­jan­do por otro mode­lo eco­nó­mi­co, social y polí­ti­co. Un nue­vo mode­lo en el que los ciu­da­da­nos y ciu­da­da­nas no este­mos al ser­vi­cio de un mode­lo eco­nó­mi­co que bene­fi­cia a unos pocos, sino que sea la eco­no­mía la que este al ser­vi­cio de los intere­ses populares.

Ezker Aber­tza­lea,
2011ko urta­rri­lak 28

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