Después de celebrar de manera exitosa el segundo evento deportivo más importante del orbe, Suráfrica vive hoy la oportunidad de acoger otro evento planetario: el 17 Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes.
Poco a poco, el espíritu de amistad y solidaridad que caracteriza a estos encuentros, surgidos en Praga hace 63 años, se apodera de esta capital, donde el forastero se asombra con los contrastes naturales y sociales.
En diversos idiomas y muchas veces incomprensible para cualquiera por la mezcla de lenguas, los delegados a esta cita, la primera en África subsahariana, intentan comunicarse e indagar sobre las expectativas de la reunión.
Surafricanos, cubanos, colombianos, paraguayos, belgas, zimbabwenses y vietnamitas, entre otros, intercambian como si fueran viejos conocidos, y el calor humano dispara la temperatura ambiente para sentirla muy superior a los 32 grados Celsius existentes.
Durante la acreditación, los anfitriones contagiaron a los presentes en el Centro de Eventos de Tshwane con mucha alegría y corearon diversos cantos contra el segregacionista régimen del apartheid.
El momento también se convirtió en una evidente muestra de apoyo a la mayor de las Antillas, y los gritos y vivas a Cuba, con la bandera de la estrella solitaria ondeando, repercutieron en los oídos de todos.
Asimismo se escucharon cada vez más fuertes los nombres de los líderes Fidel Castro y Nelson Mandela, a quienes de manera especial está dedicado este evento.
Esa es la Revolución cubana, un excelente ejemplo de la capacidad de resistir ante las adversidades y pensando siempre en todos los seres humanos, señaló a Prensa Latina el joven estadounidense Tom Baumann.
Interrogado sobre los motivos de su viaje a Pretoria, el miembro de la Juventud Socialista precisó que su nación tiene los mismos problemas que otros países: desempleo, analfabetismo, pobreza…, y éstos requieren soluciones a nivel global.
El capitalismo, agregó el trabajador de una fábrica de bolsas plásticas en Nueva York, debe ser superado con revoluciones socialistas, y los obreros y campesinos ocupar un lugar diferente en la sociedad donde no primen banqueros y dueños de compañías.
Bajo el lema Por un mundo de paz, solidaridad y transformaciones sociales, derrotemos al imperialismo, el 17 Festival se desarrollará del 13 al 21 del actual mes, y los organizadores esperan más de 15 mil participantes.
(Con información de Prensa Latina)